Narra Ravi
Otra vez la Alex molesta esa metida en mis asuntos, necesitaba hablar con JaeHwan sobre lo que sentía y vino ella a entrometerse. No sé cómo es que era mi esposa si es bastante insoportable.
Necesito a alguien más a quien pueda contarle esto... ¡HakYeon! Él podría ayudarme, aunque no, él fue quien me dijo que la tal Alex era mi esposa, no creo que sea verdad, no es mi tipo de chica. ¿A quién más podré visitar? De seguro esa chica molesta ya se fue de casa de JaeHwan, sí, iré para allá.
Al llegar, tal y como me lo esperaba, JaeHwan ya estaba solo.
—Hola de nuevo. —sonreí tratando de ocultar lo molesto que me sentía.
—WonSik, lamento haberte «echado» necesitaba hablar con ella urgentemente.
—¿Qué tiene ella de importante que todos tienen que hablar con ella?
JaeHwan se queda pensativo un rato tratando de analizar su respuesta y luego se aparta para darme paso.
—No importa, pasa.
Narra Alex
Llegué con los nervios a millón a casa de Leo y Erika, ¿cómo reaccionarán los niños? Siento que me odiarán por haberlos abandonado... pensarán que lo hice a propósito. Salgo de mis pensamientos cuando siento que abren la puerta y se cae algo.
—¿A... Alex? —preguntó Erika.
—¿Alex? —preguntó Leo al fondo.
—Sí... —suspiré—. Ha sido un día largo.
—Pero... ¿cómo... cómo es que?...
—Es una larga historia... ¿me permites entrar?
—Cla... claro... —se hace a un lado, permitiéndome el paso.
Al entrar pude ver los juguetes de los niños en el suelo, tenía muchas ganas de verlos... aunque me pregunto qué pensarán de mi por haberlos abandonado. Cuando Erika cerró la puerta y me siguió dentro del departamento, Leo salió de la cocina y ahogó un grito al verme.
—¿Eres tú de verdad, Alex? —preguntó.
«Ni modo que seré otra persona» pensé. Ahorita no es momento para el sarcasmo Alex.
—Sí. —sonreí—. Tengo que hablar con ustedes respecto a eso...
Asintieron y nos sentamos en los muebles, tuve que volver a contar la historia, Erika ahogaba gritos mientras Leo murmuraba cosas apenas audibles. Me dijeron que le habían dicho a los niños que me había ido de viaje a visitar a mis padres por lo cual no tenía nada de que preocuparme, admito que al oír eso sentí un alivio enorme. Luego de eso, Erika fue a buscar a los niños, quienes al parecer estaban viendo una película. Escuché unos gritos de felicidad y luego como corrían hacia la sala, lo cual me hizo sonreír.
Cuando llegaron a la sala no pude evitar llorar, los niños se me lanzaron encima y me abrazaron con todas sus fuerzas, en este momento, lo que Ravi me ha dicho se ha ido a un lado, los niños han cambiado el dolor que sentía por felicidad. Estuve dos años deseando volver a darles un abrazo y ahora que mi deseo se volvió realidad, no los quiero soltar nunca más.
—Como los extrañé. —les estaba dando muchos besos en el rostro.
—Y nosotros a ti mami. —dijo HyunSik.
—Yo te extrañé más. —dijo SunHee.
No pude evitar reír a lo que comenzó a ser una pelea de hermanos sobre quien me extrañó más.
—Oigan oigan... —llamé la atención de ambos— yo les gano porque yo los extrañé más. —saqué la lengua juguetona.
Sentí que las horas se me pasaron volando con los niños, tuve que irme porque voy a ir al cine con Christine y no pienso dejarla plantada, odia que le hagan eso. Erika, Leo y yo llegamos al acuerdo de que me llevaría a los niños mañana en la tarde para que les diera tiempo de recoger sus cosas, lo cual me puso muy feliz.
Llegué a casa y Christine estaba casi lista, subí corriendo a bañarme y arreglarme y a los veinte minutos ya estábamos saliendo al cine.
Por casualidad de la vida, a Ravi y a Hyuna al parecer se les ocurrió la misma idea que a nosotras, lo cual me molestó un poco pero luego me calmé ya que no quería que la felicidad que tenía por ver a los niños se esfumara con ese simple detalle. Christine y yo compramos nuestras entradas y comenzamos a ponernos afuera de la sala a esperar nuestra función. Estábamos hablando tranquilamente hasta que Hyuna y Ravi se nos ponen al lado.
«¡¿De verdad?! ¡¿No podías elegir otra maldita función?!» pensé. Siento que esto ya es demasiado. Así que tomé como excusa para alejarme mi típica costumbre de ir al baño antes de entrar, Christine aceptó sin problemas lo que me hizo estar más tranquilas.
—De todos los malditos cines y todas las malditas películas, tenía que venir al mismo y entrar en la misma función, esas si que son ganas de molestar. —murmuraba mientras caminaba al baño, hasta que sentí que alguien me agarró del brazo y me pegó bruscamente contra la pared, cuando subí la mirada me di cuenta que era Ravi.
—Tú... ¿quién eres? ¿Por qué siempre estás en donde yo estoy? —estaba peligrosamente cerca.
«¿Por qué tú siempre estás en donde yo estoy?» pensé en decirle eso pero sólo me atreví a decir:
—No soy nadie... —tragué el nudo que se formó en mi garganta—. Y nunca estoy donde tu estás, había planeado venir a este cine antes.
«Por el simple hecho de que es tu cine favorito» pensé de nuevo. Es un poco masoquista de mi parte venir al cine favorito de Ravi, eso sólo me atormenta más.
—Si no eres nadie —se acercó más y yo volteé el rostro, no puedo mirarlo—, ¿entonces por qué HakYeon dijo que eras mi esposa? Mi «verdadera esposa».
Cierto. No recordaba que HakYeon le había soltado eso de golpe.
—Tu novia te está esperando. —carraspeé tratando de soltarme de su agarre pero sólo aumentó la fuerza—. Auch.
—Eres bastante fastidiosa, ¿sabes?
Lo sé.
—Déjame en paz, ahorita estoy con Hyuna y no tengo tiempo de ocuparme de personas como tú. —me soltó y pude sentir como la sangre fluía en mi brazo de nuevo.
—Si que has cambiado... —lo miré mal y me fui con Christine.
Al estar a cierta distancia de ella, le hice señas de que se acercara a mi y le conté todo lo que acababa de suceder.
—He tomado una decisión. —dije seria.
—¿Qué decidiste?
—Volveré a Venezuela, pero me iré con los niños, así no lo molesto más.
—¿Qué...? —Christine me miraba triste.
—Lo siento pero tal vez es lo mejor...
—Pero tu sabes que perdió la memoria, debes ayudarlo a recuperarla.
—¿Cómo esperas que ayude a alguien que no acepta ayuda?
Se quedó callada y bajó la mirada.
—Entiendo peque...
—Buscaré un boleto lo más pronto posible. —suspiré.
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A Dream Come True (VIXX Ravi)
Fiksi PenggemarAlex es una estilista de veinte años muy famosa de Venezuela gracias a su peluquería, a la que un día, mientras trabajaba, la visitaron diciéndole que estaba contratada para trabajar en la agencia de música coreana Jellyfish Entertainment. Lo que A...