Y mientras Onew se debatía si ir a golpear a Jjong o no, Taemin salía corriendo de la casa del moreno a encontrarse con su jardinero, quien ya lo esperaba por las cercanías de la residencia.
TAEMIN
En mi mente solo pensaba en salir de casa de Jjong luciendo seguro, sexy y creyéndome dueño del mundo, pero mi estúpido estomago parecía estar inundado de aún más estúpidas mariposas que me tenían al borde de un ataque de histeria, por lo que solo estaba allí dando saltitos y corriendo como idiota rumbo al pequeño camión de Minho.
A través del vidrio vi como observaba atentamente todos mis movimientos, parecía estar esperando a que me arrepintiera y volviera sobre mis pasos, alejándome...y yo...yo lo único que quería era estar cerca de él...entre sus brazos y si es posible impregnándome con su olor hasta volverme loco.
Acorté la distancia que me separaba del camión y me quedé de pie junto a la puerta del pasajero...
-¿Te arrepentiste? –Dijo de pronto, abriendo la puerta del copiloto y observándome atentamente. Sus ojos mostraban ansiedad, pero no pude determinar a qué se debía.
-¿Quieres que me arrepienta?
-Sí...sé que debería decir que sí, que esto está mal...muy mal...que nunca debí venir aquí en primer lugar...pero no quiero...no quiero que te arrepientas de estar aquí....no quiero que te vayas.
-Bi...bien... -titubeé
-Sería...creo que...deberías subir... -Dijo sosteniendo aún la puerta.
Bien, si quería alguna especie de declaración de que él quiere esto tanto como yo, creo que lo conseguí, y con creces. Así que más que ansioso intenté subir a su camión y ya sea mi mal cálculo de la distancia o los nervios que me devoraban, lo cierto es que apenas puse un pie en la escalinata del camión, mi pierna pasó en banda y estuve a punto de caer de culo al suelo.
-Cuidado!!!...-exclamó, agarrando con fuerza mi brazo y tirando hacia dentro del camión.
-Dios! Si que eres fuerte! -susurré encantado.
-Ven aquí, mocoso adulador -dijo sonriendo.
Con su ayuda conseguí subir finalmente al coche, y noté de inmediato que Minho estaba sentado prácticamente encima del asiento del copiloto, casi empujando el freno, de seguro lo hizo para abrirme la puerta, pero cuando ya estuve dentro no se movió un solo centímetro lejos de mí y eso me ayudó a liberar un poco los nervios que me volvían loco...y que de paso me hacían decir estupideces.
-Bueno...ya estamos aquí... -dije inteligentemente, Dios Taemin, no puedes decir algo coherente por una vez en tú vida?
-Sí, estamos... -Dijo riendo...burlándose más bien.
Y ahí me quedé, sin saber qué decir o qué hacer, porque desde que supe que vendría mis pensamientos no habían llegado más allá del momento en que nos encontraríamos, así que ahora no sé cómo comportarme. Minho apoyó un brazo en el respaldo del asiento y solo se dedicó a observarme...y eso como era de esperarse terminó por desesperarme!!
-Yaaa...deja de hacer eso!!!
-¿Hacer qué? -dijo haciéndose el desentendido
-Mirarme así.
-Así cómo.
-Así...así...qué se yo...solo así...
-Hoy he decidido que me gusta mirarte...
Mierda!...qué se supone que debo responder a eso??...es que no puede venir con su voz ronca y sexy y decirme algo así!!!...no es justo!! Yo solo quiero dejar de hacer el ridículo, pero con cosas como estas solo consigo dejar escapar pequeños jadeos que hacen que sus ojos se vuelvan ardientes.
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Enamorando a mi sexy jardinero (2Min)
FanfictionTaemin es un estudiante de instituto de 17 años que vive preocupado solo de disfrutar el día a día, todo estaba bien hasta que aparece frente a sus ojos un Dios del sexo, de piel morena y piernas largas que pone de cabeza su tranquila vida. Minho, c...