14. Golpes físicos y emocionales

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Previamente:

Utilizando el yo-yo y el bastón, los adolescentes salieron, listos para la pelea.


Mélancolique Copie, ¡es hora de arreglar nuestro pequeño problema!— gritó la azabache mientras trataba de controlar lo mejor posible el yo-yo.

—Vaya... Pero si son ustedes dos.— mencionó la pequeña dama con curiosidad y fastidio. —¿Ya se hartaron de su patética condición?

—¿Y tú no te haz hartado de comportarte como una niña malcriada?— contestó el rubio; ésto provocó que la de verde se molestara e irritara aún más de lo que ya estaba.

El dúo chocó los puños como regularmente lo hacía después de terminar con un problemático Akuma, para después echarse a reír un poco. —Bien dicho, My Lady.

La Akumatizada guardó silencio un par de segundos, su rostro se veía como si una bomba estuviera a punto de explotar. —Les propongo algo, tontos. Más vale que me presten atención porque les va a interesar.

Los héroes dejaron su feliz rostro para ponerse serenos y escuchar con atención a su rival. Aunque no lo parecieran, ambos estaban preocupados en gran medida: nunca habían tardado tanto en acabar con una marioneta de Le Papillon.

—Como se que son unos despistados, me imagino que no planearon alguna estrategia para derrotarme ¿o me equivoco?— Mélancolique cruzó sus brazos y bajó la mirada para notar en el rostro de los adolescentes una expresión cargada de asombro, puesto que la situación era justo como la de gran sombrero había mencionado. —Así que mejor pónganse a planear como van a atacar y déjense de comentarios absurdos.

Tanto Ladybug como Chat Noir se quedaron pensando un momento. ¿De verdad les daría su enemiga una oportunidad?

—Suena interesante.— por fin contestó el rubio. —Pero ¿no nos estarías dando ventaja?— preguntó expectante de su respuesta.

Enfrente del rostro de la malvada muchacha, apareció la figura de una mariposa lila. «No seas ingenua, mi pequeña. Aunque odie aceptarlo, ellos tienen razón, les estarías dando ventaja. ¡Mejor roba sus Miraculous de una vez y olvídate de ellos!» la de cabello morado escuchó en su mente una voz masculina llena de deseo y molestia.

—No te preocupes, Papillon, tengo todo controlado.— aseguró la chica con una sonrisa maliciosa; acto seguido, la silueta desapareció. —¿Aceptan o no? Me quiero ir de inmediato de aquí para no ver sus caras llenas de conformismo y amor.

—¿A-amor?...— preguntó la de coletas. Su rostro se tornó rojizo, pero no lo suficiente como para igualar al de su contrario, el cual se podía comparar perfectamente con un tomate.

—¿Es que son tan ciegos que ni de eso se dieron cuenta? Desde que los ví supe que su relación no era únicamente laboral.— soltó con un gesto lleno de cansancio. Dicho comentario sólo sirvió para aumentar la pena de ambos jóvenes.

—¡Como sea!— el de mirada esmeralda interrumpió el corto silencio provocado por el denso ambiente. —¿Cuándo y en dónde nos vemos para terminar con ésto de una buena vez?— preguntó algo fastidiado Chat Noir.

—El martes en la tarde, cerca de la Torre Eiffel.— comentó con precisión el Akuma. —No vayan a faltar... Les aseguro que me voy a divertir mucho con ustedes.— Acto seguido giró media vuelta para alejarse con un gran salto de la zona mientras soltaba una carcajada.

[ML] Atrapados en otro cuerpo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora