Capítulo 4: Elijo a él

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Goten salió del aula, no más clase por hoy. Caminó hasta el patio y allí echó a volar. Aún no se podía creer la reacción de Trunks ¿Enserio le estaba haciendo elegir entre a la persona que amaba y su futuro hijo? ¿Por qué le arruinaría la vida tener un hijo?  Y lo peor ¿por qué se cuestionaba lo que debía hacer?

Llegó a su casa y abrió la puerta, esperaba que su madre no se diera cuenta. No tenía ganas de pasar por un interrogatorio, pero parecía que la mala suerte lo acompañaba. Pues sí, su madre se enteró de la puerta.

—¿Goten? ¿Qué haces aquí tan pronto?— y ya empezaban las preguntas.

—No me encontraba muy bien

—¿Sigues teniendo fatiga? ¿Te duele la cabeza? ¿Tienes fiebre?

—Sí, sí y no.- Quería subir ya a su cuarto y hacerse una bolita entre sus sábanas, eso es lo que necesitaba.

—¿Quieres que te prepare algo? ¿O que vayamos al médico?

—¡No!— su madre pegó un brinco por el grito y él se arrepintió al instante. Sólo no estaba de humor—Lo siento, sólo necesito descansar. No entres en mi habitación voy a estar durmiendo—subió las escaleras mientras su madre asentía.

Se dejó caer en la cama y cerró los ojos con fuerza, quería dormir pero no podía. Se puso en posición fetal en la cama y pronto sus lágrimas empezaron a caer. El embarazo lo estaba poniendo más sensible. Otra cosa que odiaba.

Pensó en Trunks, en cómo este había cambiado o quizás no lo había hecho y él siempre tuvo una idea equivocada de este ¿Ni si quiera tenía curiosidad por saber lo que es ser padre? Lo que tenía claro esque no iba a insistir en que cambiara de opinión. Miles de recuerdo de él y Trunks llegaron a su mente, ellos riendo o luchando al lado del otro. Siempre habían estado juntos en los peores momentos ¿Y ahora esto los estaba separando?
Recordó una vez que habló del futuro con Trunks...

Flashback

Trunks se sentó al lado de Goten mientras masajeaba su hombro, el entrenamiento lo dejaba frito.

Esto es agotador

Si...— Goten miraba al suelo, tenía expresión de tristeza y Trunks lo había notado.

¿En qué piensas?—Goten lo miró a los ojos y después de unos segundos de duda se atrevió a preguntar:

¿Como te ves de mayor?— Trunks lo miró confundido.— Quiero decir ¿luchando? ¿con una familia? ¿Cómo?

¿A qué viene esto?

No quiero estar toda mi vida luchando y poniendo mi vida en riesgo, quiero... quiero ser normal. Crecer y formar una familia y dedicarme a ellos por completo.

¿Acaso luchar te lo impide? Mira Gohan.

Y mira mi papá y el tuyo.

Nosotros no somos como ellos. Cuando yo tenga hijos seré buenos con ellos y si tengo que luchar por algo, será por su felicidad.—Goten sonrió.

Serás un buen padre

Seremos unos buenos padres— Trunks le cogió de la mano y Goten se sintió confundido por un segundo pero después le sonrió y descanso su cabeza en el hombro de este.

Sí seremos unos buenos papás.

Fin del Flashback.

Ahí tenían unos 13 años, Goten ni siquiera se acuerda el por qué tanta preocupación con su futuro pero en esos momentos siempre estaban en su mente. Tenía claro que se quería enamorar de una chica hermosa, casarse con esta y tener hijos y que quería estar lejos de las guerras. Como cambian las cosas. Se enamoró, sí, pero de su mejor amigo. Va a tener un hijo, sí, pero no se siente listo y lo peor es que el padre de este no lo quiere ¿Se estará precipitando? ¿Quizás debía de creer en Trunks? ¿O dejar a este y seguir con su bebé hacía delante? Tantas preguntas sin respuestas le dejaron dormido.

(...)

Goten fue abriendo los ojos y vió una figura, sonrió al pensar que podría ser Trunks pero al parpadear unas cuantas veces se decepcionó. Era Marron.

—¿Cuánto tiempo llevas aquí?— le preguntó.

—Una hora o quizás dos—dijo esta encogiendose de hombros.

—¿Por qué no me has despertado?

—Necesitabas descansar—le sonrió como muestra de gratitud.—¿Qué tal con Trunks?— Goten agachó la cabeza y Marron ya supuso que algo iba mal. Por lo que se sentó al lado de este y le cogió las manos— No ha ido bien ¿verdad?

—No, no ha ido bien. Primero insinuó que lo había engañado y este no era su hijo y después que me lo había inventado para sacarle el dinero ¿Te lo puedes creer?

—¡Noo!— Goten asintió

—Y lo peor es que... me ha hecho elegir entre el bebé y él— Marron se levantó y empezó a caminar por la habitación apretando los nudillos.

—¿Pero que le pasa por la cabeza? Ese chico no está bien y mira que te lo dije ¿Y cual es tu plan? ¿Partirle la cara, arrancarle los huevos o qué?—Goten rió, la rubia siempre se ponía muy sobreprotectora cuando se trataba de él.

—No voy a hacer nada

—¿Cómo? ¿No pensarás abortar no?— Marron miró fijamente a los ojos de Goten.

—No, elijo ser padre— la rubia asintió.

—Ya verás como todo va a salir bien ¿Quién necesita a otro padre cuando se tiene a una tía tan guay como yo? Vas a ser muy feliz pequeñín— Hablaba esta a la barriga de Goten. Para después darse un acogedor abrazo, que el moreno necesitaba.

(...)

Al día siguente Goten y Trunks se vieron a solas en la parte trasera del intituto. El peli-lila lo esperaba con un cigarro en la boca y lo miró de arriba a bajo. Cuando Goten estuvo más cerca este le tiró un sobre blanco, que el moreno cogió con desconfianza.

—Ahí tienes el dinero para el aborto, esta tarde puedes ir a que te quiten esa cosa— Goten miró a este furioso, odiaba que Trunks hablara con tal desprecio a su hijo.  

—No, es ninguna cosa. Será un precioso bebé que crecerá contigo o sin ti.

—¿Cómo?

—Lo que has oído, que lo elijo a él. No creo que ningún hombre que merezca la pena tenga que hacer elegir a una persona entre la persona que...—se calló pues no quería decirle a Trunks que lo amaba

—A la persona que...- Trunks se acercó a este con una sonrisa, sabía desde hace mucho tiempo los sentimientos de Goten hacia él. Siempre le habían servido para conseguir lo que quería. Quizás esta vez funcionase. 

—Nada olvidalo

Goten se iba a marchar cuando Trunks lo agarró por la muñeca y lo estampó contra la pared. Puso su mano en la cadera de este y acercó su erección a su trasero. Sopló suave en la oreja de Goten, y este se estremeció quedando débil ante Trunks. El pelo-lila refregó su entrepierna por el culo de Goten, provocándole gemidos. La mano que sujetaba la cadera de Goten se movió hasta su pene y empezó a acariciarlo. El moreno se mordia el labio con la cara completamente roja.

Trunks le dio la vuelta y beso la semi abierta boca de Goten, sus lenguas bailaban en sus bocas hasta que Trunks se alejó. Para volverse a acercar al oído de este y susurrarle:

—Hazme una mamada— Goten como si este fuera su dueño, acarició los brazos de este y fue bajando para desabrochar los pantalones de Trunks. Se metió el pene en su boca y con experiencia le hizo la mamada. El peli-lila le acariciaba el pelo mientras lo presionaba para que profundizara. Al acabar se abrochó los pantalones y le dijo a Goten:

—Ves, eres mi putita y lo sabes. Te rindes a mi con un solo toque ¿y me dices que eliges a esa cosa? Déjate de tonterías zorrita.— Fue a por el sobre que descansaba en el suelo y se lo tiró de nuevo a su regazo— Gracias por la mamada— le guiñó un ojo mientras se alejaba con una sonrisa.

Goten pegó un puñetazo contra el suelo y tiró el sobre lejos de él. Corrió a una fuente y se enjuagó la boca repetidas veces. Quería olvidar el sabor de Trunks, quería desaparecer y que se acabara todo.

Editando.

Nuestro pequeño. Editado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora