Capitulo 43: Que empiece la pelea

1.9K 60 47
                                    

Picolo, Vegeta, Goku, Ryu y Genki se encontraban en la casa de los Briefs hablando de lo sucedido hace unas horas.

—El hermano de Freezer— dijo Bulma, que miraba como había dejado a su esposo sin apenas tocarlo. Todos estaban incrédulos por eso y el orgullo de Vegeta desbastado.

—Lo mataré, entrenaré y lo mataré.

— Yo también— dijo Goku— Tenemos tres días, así que mejor empezar ya.

Ryu asintió levantándose mientras apretaba sus puños. Estaba tan emocionado, era la primera vez que iba a poder pelear en serio por su planeta.

—¿¡Dónde están mis niños!?— un Goten ajitado entró en la sala y abrazó con fuerza a Ryu.— Te dije que no te movieras de casa ¿Sabes el susto que me has dado?— Cogió en brazos a Genki que le pedía que lo cogiera.

—Hay un enemigo papá

—¿Qué? — preguntó el azabache mirando a su padre, que asintió ¿Cuando iba a estar la tierra en paz definitivamente?

—Es hermano de Freezer.— Habló Goku— Es poderoso y da algo de grima.

—Oh no— Goten miró de nuevo a Ryu— ¿No habrás llevado a tu hermano allí no?— el pequeño se quedó callado— ¡Ryu!

—Yo lo he protegido.

—Papi, tenía miedo y Ryu me salvó— dijo este contando como habían sido los sucesos, haciendo ruidos de explotaciones con su boca — ¿Por qué yo no puedo tirar fuego?— dijo este mirando sus manitas.

—Sí puedes— le dijo Goku— Sólo concentra tu ki en ellas.

— ¿Ki?

—Tu poder

El pequeño cerró los ojos con fuerza mientras con la mano abierta intentaba lanzar una bola de energía, y consiguió hacer una diminuta. Goku sonrió al igual que Ryu que felicitaron al pequeño.

—Vamos a entrenar— dijo Vegeta, yendo a la sala de la gravedad. Fue seguido por Goku y Ryu.  

—Por cierto Ryu ¿Dónde aprendiste a teletransportarte?

—Cuando fui a un planeta unos seres me lo enseñaron— Goku sonrió recordando aquellos tiempos— Es bastante útil.

—Ese enano es muy rápido por lo que tenemos que aumentar la velocidad— Puso la gravedad al tope de alta y empezaron con su entrenamiento.

(...)

¿Y qué habrá pasado en este tiempo con Pan, Bra y Ubb? Pues bueno cada uno se fue por su lado cuando llegó la hora de ir a la universidad, pero ya habían terminando y se volvieron a encontrar en la plaza de Ciudad Satán.

—¡Uub!— gritó una morena moviendo su mano para llamar la atención del chico. Este sonrió y veía como esta corría a sus brazos cuando estuvieron a poca distancia, la chica saltó y fue recogida por los fuertes brazos de Uub. Se abrazaron mientras reían.— Estas más alto.

—Y tú más guapa— la chica se sonrojó apartando la vista del otro, que reía.

— Oye ¿para mí no hay abrazo?— se escuchó una voz a sus espaldas. Estos se giraron y vieron a la peli-azul cruzada de brazos.

Uub la abrazó con fuerza mientras le decía que la había echado de menos ¡Habían pasado cuatro años! Tenían muchas cosas que contarse de su vida y eso fue lo que hicieron durante esa tarde.  

— Le dije a mi padre que me gustaban las tías y él me dijo “a mi también” no sé porque tan mala fama con mi papá. Es muy compresivo — dijo la oji-azul, Pan rió.

Nuestro pequeño. Editado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora