Nuestro pequeño. Editado.

Capítulo 44: Y de nuevo paz

—Vamos, enano, puedes empezar cuando quieras— Ryu miraba de arriba a bajo a su contrincante. Llevaban unos minutos mirándose sin hacer nada. Desapareció y apareció justo delante del enemigo, movió su brazo para golpearlo pero este lo esquivó y así siguió, moviendo sus brazos rápido mientras, Kōri, los esquivaba.

—¡Ryu, te quiere cansar!— le gritó Picolo. 

Ryu paró cogiendo aire mientras  veía como Kōri seguía con sus brazos cruzados y esa sonrisa que tanto irritaba al pequeño.

—¿No tienes nada más que darme?

Ryu se transformó en súper saiyan, aumentando su velocidad y volvió a atacar a Kōri el cual seguía esquivando con facilidad.

—Oh vamos Ryu, me estás decepcionando— el pequeño con furia alcanzó golpear la mejilla de Kōri haciéndole un rasguño.— Mejor.— el ser dejó de estar cruzado de brazos, crujió sus dedos y cuello y sonrió al niño.— ¿Seguimos jugando?

Ryu apretó los labios y aumentó un poco su ki para empezar a luchar con Kōri, se devolvían los golpes y lo paraban.

Kōri movió su cola agarrando con esta la pierna del azabache, lo dejó inmóvil y empezó a golpear su cara sin piedad.

Picolo iba a actuar cuando vio una especie de disco cortar la mitad de la cola de Kōri. Este abrió sus ojos quejándose del dolor y buscando al sujeto que lo había atacado.

—Krilin— susurró Picolo sonriendo. Un hombre canoso y de baja estatura se acercó volando a ellos, Kōri cargó una bola de energía que no pudo lanzar pues Ryu se abalanzó sobre él. El pequeño pegaba a este, devolviéndole cada golpe que este le había dado. Kōri miró fijamente a los ojos de Ryu, y el pequeño se sentía atrapado en esos orbes rojos. Sus brazos ya no se movían y un dolor en su organismo lo dejó paralizado.

(....)

Unos minutos antes en corporación cápsula, Bulma, mandaba un mini robot con una cámara al sitio del combate y así lo podrían ver en el ordenador. Goten tenía en sus brazos a un dormido Genki mientras se comía las uñas, ansioso por saber como estaba su hijo.

Marron esperaba a su novio, Ren, el cual apareció por la puerta y abrazó a su novia dejándole un corto besó en los labios.

—¿Cómo estás cariño?

—Bien— le contestó con una sonrisa. Ren le devolvió esta acariciando su barriga.

—¡Tengo señal chicos!— dijo Bulma consiguiendo que Milk y Goten se acercaran rápidamente y después Marron con Ren.

En la pantalla se veía un descampado y en el cielo como Kōri golpeaba el rostro de Ryu. Goten apretó sus puños.

—Mamá cuida de Genki— le dijo este antes de salir volando por la ventana.

Marron miró la pantalla observando la llegada de su padre, su rostro se palideció.

—¿Qué hace mi padre ahí? ¡Es muy mayor!— Gritó la rubia— Tengo que ir a por él.

—Marron eso es muy peligroso, piensa en el bebé.

—No puedo dejar que muera, Ren, es el único que me queda.

—Llevame contigo — Marron negó, le dio un beso a Ren y se fue.

—Si quieres te puedo llevar yo.— le sugirió Bulma, el chico asintió y a ellos se sumó Milk dejando a Genki al cuidado de Bra y Pan.

(...)    

—¿Qué te pasa Ryu, no puedes moverte?— este soltó una carcajada y el pequeño empezó a chillar del dolor. Sabía que eran esos ojos lo que provocaban que sus músculos se estuvieran rajando y sus huesos partiendo, al menos se sentía así, pero no podía dejar de mirar esos ojos.