Capitulo 5

4.1K 296 19
                                    


Rin estaba muy emocionada, camino durante un día entero y solo se sentó a descansar cuando ya tenia sueño, pero apenas amanecía, ella ya estaba caminando, guiándose por su instinto.

Porque ella sabia que le pertenecía al amo Sesshomaru desde el mismo momento que él la regreso de la muerte. Y jamas podría dejar de agradecérselo.

Cuando era más pequeña los enemigos del señor Sesshomaru la secuestraron en más de una ocasión y él siempre la había ido a buscar. Ahora era su turno, no por que él se encontrara en peligro, sino por el simple hecho de querer permanecer a su lado.

Pasaron unos cuantos días desde que Rin abandono la aldea y sus provisiones iniciaron a escasear, comenzó a buscar su comida por cuenta propia hasta que encontró una aldea.

Esta le pertenecía a un hombre con mucho dinero y poder, según le habían contado los pobladores; pero en el momento que se lo contaron terror había cruzado por su mirada.

Después de la aclaración Rin fue con mas cuidado, compro unas cuantas frutas y cuando ya iba de salida, paro en seco, vio a lo lejos muchos demonios que iniciaban a poseer a los humanos.

Corrió hacia ellos y fue disparando flechas que regresaron más rápido de lo usual, prontamente llamo la atención completa de aquellos seres que iniciaron a atacarla.

Al parecer la anciana Kaede le había hecho algo a las flechas, porque pulverizaban a los demonios igual que si fueran sagradas, pero eso no la distrajo, al contrario, se sentía más poderosa y tenia mas fuerza en sus ataques.

Cuando el ultimo demonio huyo, nadie celebro su triunfo ni fue a agradecerle por salvar sus vidas; Rin giro justo a tiempo para ver a un hombre golpearla en la nuca.

...

Rin despertó exaltada y lo primero que hizo fue tomar su arco y una flecha, cuando vio con más claridad noto que no era un arco el que traía sino un palo curvado y no era una flecha lo que sostenía sino una pequeña rama.

Las volvió a dejar en el suelo y vio unos grandes grilletes que amarraban sus pequeñas muñecas, giro la cabeza de un lado al otro pero no vio más que una choza hecha de paja y madera con unas mujeres que parecían de la misma edad que la anciana Kaede.

Les grito varias veces, pero nadie giro siquiera a verla.

-No te escucharan -dijo una voz a su lado.

Rin giro exaltada y vio a una chica con aspecto cansado, tenia la cara llena de tierra y sus manos también tenían grilletes.

-Soy Yukari -dijo, la mire estudiando cada aspecto de ella.

Pero lo único que vi fue desilusión y no tenían ninguna esperanza en sus ojos.

-Soy... Rin -conteste.

La chica asintió y no dijo nada más. Yo por mi parte, quería saber porque demonios estaba encadenada, no tenia tiempo de estar ahí, debería buscar al señor Sesshomaru.

-¿Que es lo que hago aquí? -pregunto Rin viendo con el ceño fruncido a las señoras en la choza.

-Eres una esclava -musito la chica- como yo

Rin abrió los ojos como platos, se levanto y quiso deshacerse de las cadenas pero no funciono.

Yukari la siguió, pero la tomo fuertemente de los brazos y la miro fijamente.

-No hay salida -dijo- acostúmbrate a vivir aquí, tal vez, cuando terminemos de construir el castillo nos dejen ir... por ahora no puedes hacer nada.

Rin la miro desconcertada, pero siguió intentando quitarse las cadenas, cuando no lo logro cayo al suelo e inicio a llorar.

Se sentía tan abatida, ya no podría seguir buscando al señor Sesshomaru; y lo peor de todo era que se sentía tan culpable por haber dejado la aldea.

Por que sabia que nadie la buscaría, todos pensaban que estaba buscando al señor Sesshomaru, ahora sí que se sentía como una estúpida.

Sesshomaru

Estaba recostado, al lado de una gran fogata que había hecho Jaken, improvisada, claro. Cuando el fugaz recuerdo de Rin apareció en su mente.

No, el ya no tenia que recordarla, ella estaba haciendo una nueva vida en otro lugar, donde ni el ni nadie podría dañarla. Ademas, de cierta forma sabia que Rin estaba segura, porque Inuyasha vivía en esa aldea, al igual que todos sus raros amigos.

No era porque de pronto confiara en Inuyasha, sino porque sabia que la defendería. Sinceramente él ya no tenia a nada que regresar a la aldea.

Pero ahí se vio, levantándose y elevando el vuelo, directo a la aldea donde quería ver a la niña, no, ya debería de ser toda una señorita.

Se obligo muchas veces a regresar, pero nunca cedió, quería verla, tan siquiera la ultima vez y ahora sí, no regresaría nunca, con todo y el dolor que le provocaría. Solo quería que ella estuviera a salvo. Y si eso significaba alejarse de ella.

Pues lo haría.

Ya pasaba de la media noche cuando llego ahí, fue directo a la choza de la anciana Kaede

Pero no tuvo el suficiente valor de entrar, no quería que si Rin estuviera ahí, se ilusionara con verle y creyera que iba por ella.

Así que dio la media vuelta y se marcho.

♣♣♣♣♣♣

Hola chicas, les dejo aquí este capitulo, espero que les este gustando, les mando un beso.

Detrás del rostro frío ◆Sesshomaru y Rin◆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora