Capitulo 14

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Irasue

Su paciencia se había agotado a un 0%, estaba tan enojada que pudo haber destruido todo el imperio, pero se detuvo, tenia que pensar fría y calculadoramente

Sabia que su hijo tenia su mismo carácter: fuerte, frío y calculador; también comprendía que su orgullo era muy grande y que se había apaciguado gracias a la compañía de una niña humana.

Pero lo que verdaderamente le había molestado e irritado era su poco interés acerca de su madre, ¿Cómo se había atrevido a ignorarla?

Ella si le había respondido cuando le pregunto sobre la Piedra Meido, y ahora, el muy descarado se había negado a acudir a ella, dejando a  su emisaria de mas confianza de lado.

Un día, ya cansada de esperarlo, se levanto y salio de camino al imperio creado por su hijo, al llegar, fue recibida de una manera muy cordial y llena de atenciones, pero no estaba de humor para ser elogiada, así que rápidamente pregunto por su hijo.

Los sirvientes se miraron unos a otros, sabiendo que lo que le dirían la haría enojar, pero no hubo de otra; le contaron que se fue desde hacia dos días y que no habían regresado desde entonces.

Para la sorpresa de todos, Irasue no reaccionó de manera violenta e inmediatamente pidió que le preparan un cuarto, pues se quedaría ahí esa noche, si en la mañana siguiente él no había regresado, tendría que ir a buscarlo.

Sesshomaru

Era difícil buscar su olor, había estado buscando por todos lados pero no encontraba ningún rastro de su presencia, había mandado a Jaken a buscarla en otra parte y no había regresado con noticias.

Iniciaba a estresarse y a culparse por su desaparición, tenia tantas ganas de matar algo, pero ningún demonio le hacia frente, todos huían en cuanto lo escuchaban venir y de alguna forma le molestaba, pero no se iba a rebajar a buscar a uno.

Seguía en su búsqueda cuando decidió que tal vez debería de regresar a su imperio, si Rin seguía afuera tendría que llegar de algún modo u otro.

Pero no, él no podía dejarla, y menos expuesta a los peligros que había, era su protegida y por lo tanto cometió un grave error al dejarla sola.

Se sentó al lado de un río y le conmovió saber que ahí era donde Rin y Jaken intentaban pescar un día, si se lo proponía podía verlos aun chapoteando el agua y sintiendo pequeñas gotas rozar sus manos.

Tenso la mandíbula y cerro los ojos, fue en ese momento que escucho algo caminar rápidamente, luego los arboles moverse de un lado a otro y supo que había alguien observándolo.

Calculó su próximo salto y el lugar donde aterrizaría así que con su látigo verde rompió la rama, mandando al intruso directo al suelo.

-Sabes que no me gusta que me espien, Inuyasha -pronuncio con rencor el demonio más fuerte.

Escucho un fuerte quejido y luego los pasos de su medio hermano.

-¿Qué es lo que haces aquí, Sesshomaru? -preguntó esté con las manos cruzadas frente a su pecho.

-No es algo de tu incumbencia -dijo Sesshomaru con los ojos cerrados.

Inuyasha se rasco la cabeza y lo miro con fastidio, era mas que obvio el hecho de su prescencia ahí, cerca de la aldea.

-Vienes por Rin -dedujo Inuyasha.

Sesshomaru se levanto, dispuesto a irse para no tener que enfrentarse con el estúpido de Inuyasha, pero él prontamente lo alcanzo.

-Sesshomaru, sé donde puede estar, he olido su escencia -Sesshomaru estuvo a punto de escucharlo pero su orgullo le gano y decidió no prestarle atención, dejándolo prontamente atrás.

Sesshomaru no se limitó a escucharlo y dejo que Inuyasha siguiera balbuceando, después de ver que no prestarle atención no hacia fruto alguno, giro a verlo molestamente, estiro la mano y tomo fuertemente el cuello del mitad demonio.

-Te he dicho que no te metas en mis asuntos Inuyasha, ¿Acaso nunca haz de comprender? -dijo con rabia, no quería que nadie se entrometiera en eso.

Él encontraría la manera de encontrarla solo, no necesitaba la ayuda de nadie, si no la necesitaba antes, no la necesitaría ahora.

Inuyasha gruño de manera agresiva mientras su medio hermano seguía sujetándolo fuertemente, Sesshomaru lo soltó dejándolo caer y se alejo de ahí.

Inuyasha

Sesshomaru maldito, no puede dejar de ser orgulloso ni siquiera por un minuto, Inuyasha decidió no seguirlo y regreso a la aldea avisando a la anciana Kaede sobre el cometido.

La anciana no se vio sorprendida, sin embargo sabia que si Sesshomaru había salido a buscarla y hasta este momento no había rastro de ella seria algo realmente alarmante.

Ella no menciono tampoco algo sobre tratar de ir por Rin, por que ella de alguna u otra forma sabia que Sesshomaru la encontraría.

Inuyasha por su parte regreso a la choza que compartía con Kagome, pero al no verla ahí se alarmó un poco, entonces recordó que hacia tiempo que ella visitaba constantemente el pozo.

Y fue a buscarla.

Detrás del rostro frío ◆Sesshomaru y Rin◆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora