I a n
Era jueves por la tarde, como Noah había prometido, salimos a pasear por el centro, mientras comprábamos lo que necesitábamos. No solía pedirle cosas a mi padre a menos de que las necesitara por lo que me sentí extraño cuando él se encargó de decirle que necesitaba un nuevo librero.
Después de salir de la tienda nos aproximamos al carro. El carro le pertenecía a Jenna, era de color rojo brillante, pequeño y acogedor, a mí me gustaba.
-¿Quieres ir a comer?
Mire el reloj en mi celular. 3:30
-Sí, tenemos bastante tiempo.
Hecho el carro a andar por calles, lo observé mientras conducía, se veía concentrado y serio, podía ver como los ángulos de su cara eran afilados era una de las muchas cosas que me gustaban de él. Recargue mi cabeza sobre el asiento cerrando los ojos, mientras una sonrisa se dibuja en mis labios.
El restaurante era pequeño, formado de madera de color verde con ordenadas mesas colocadas afuera del lugar, adornadas por unas enormes sombrillas que también te cubrían del sol. Nos sentamos afuera, la vista era muy bonita.
El día estaba muy caluroso, nunca me molesto sudar, incluso lo disfruta mucho más que el frío. Me sentía relajado, hace mucho que no salía, siempre que lo hacía solo era a mis clases de natación. Estaba feliz de que él estuviera aquí, de que estuviéramos aquí.
-¿Por qué estás sonriendo? -pregunta, bajando el menú para verme.
-¿Eh? -me toma por sorpresa- El lugar me causa muchas sensaciones, me concentro en lo siento para poder escribirlo después.
Asiente pensativo, volviendo su vista al menú en sus manos.
-¿Has escrito algo sobre mí?
Siento como si me hubiera descubierto algo muy íntimo y vergonzoso. No suelo escribir de muchas personas en particular, pero con Noah era un poco más fácil. Me gustaba la sensación de sus dedos revolviendo mi cabello, de sus brazos apretándome con delicadeza cuando me abraza o como sus ojos desaparecen cuando sonríe. Suspire perdido en mis pensamientos cuando escucha una risa.
-Claro que lo haces -respondió con descaro-. Si te da vergüenza admitirlo, está bien. Guárdate tu secreto.
-Que molesto -murmuro sin protestar.
Al parecer no era bueno escondiendo lo que sentía menos cuando se trataba de él. Me regañe a mí mismo mentalmente.
Tome la carta para esconderme detrás de ella, podía sentir como me ardía el rostro.
Luego de que una mesera viniera a tomar nuestra orden, diciendo que estaría listo en veinte minutos más, Noah se paró de su asiento diciendo que iba al baño.
Suspire aliviado cuando se fue, era impresionante como me ponía los nervios de punta. Intenté distraerme tomando fotos del lugar, era muy bonito quería enseñárselo a Jenna.
ESTÁS LEYENDO
Innocent Feelings | California Lovers #1 | RESUBIENDO
Genç KurguIan y Noah se han convertido en "hermanos" después de que sus padres se conocieran. James, el padre de Ian, perdió a su esposa en un horrible accidente, mientras que la madre de Noah se acababa de divorciar de su esposo frío y controlador; conociénd...