Epílogo

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Un año, diez meses y diez horas después

Las risas, los gritos de euforia y la diversión hacían presencia como cada vez que el verano llegaba acompañado del fluir del viento llevándose todas las semillas de angustias que alguna vez llegaron a ser sembradas en cada cuerpo y en cada alma de esa gran familia, alejando completamente la posibilidad de haber una cosecha de dolor y sufrimiento y en realidad traer consigo un mar de nuevas oportunidades que serían bien recibidas con el cálido clima y el sol radiante que iluminaria cada paso que la generación del futuro diera.

Siendo fiel recordatorio de que aquella frase tan popular que siempre se les oía decir a sus padres y mismos maestros, cobrará tanto sentido y que se amoldara por completo a su situación actual.

«Después de la tormenta siempre vuelve a salir el sol»

Y como tenía de razón, ahora veía como las familias de sus amigos estaban unidas de nuevo. Como las personas que siempre admiró estaban con ellos haciendo de su vida un completo oasis de belleza, lleno de vida y de esperanza. Como aquellos que en estas fechas se mantenía rodeados de una penumbra de tristeza ahora no eran más que rodeados de una felicidad plena. Lo podía ver en el rostro de su abuela Molly en la navidad pasada, que no paraba de repartir los jerseys que con tanto esfuerzo había tejido durante todo el año para que ahora en estas épocas cada uno luciera el suyo y la sonrisa que tenía marcada en su rostro le hizo creer que haría todos los viajes al pasado posibles en el mundo para ver nuevamente el momento en el que por fin entregaba en las manos de su hijo Fred el jersey que siempre le había pertenecido.

«Aunque nadie lo recuerde»

Pensó. Porque después de haber regresado a su línea de tiempo bajo las órdenes del fallecido profesor Dumbledore James se había encargado de modificar cada recuerdo que sus familiares y amigos tenían de su improvisada visita a 1995 siendo él el único que recordaba con exactitud lo que había pasado en realidad.

Y ustedes se preguntarán el por qué.

Antes de que aquella fiesta que con tanto esmero había organizado Victore, el profesor Dumbledore le había llamado a su despacho encomendándole la ardua misión de ser él quien conjurase el hechizo Olviblate asegurándose que aquel viaje se mantuviese en total secreto para todos y que nadie recordará que en algún tiempo Fred Weasley, Remus Lupin y Ninphadora Tonks habían muerto y en su lugar dejarán que el tiempo hiciera efecto en sus memorias que ahora estaban llenas de momentos junto a esas personas, incluida la suya excepto porque él si sabia con exactitud lo que había pasado.

Y valía la pena pues desde la pequeña colina en donde se hallaba sentado veía con gran furor a toda su familia reunida en los jardines de la madriguera preparando el lugar en donde pronto estarían todos celebrando la unión de Jolie y Oliver Victore con ayuda de todos había organizado con tanto esfuerzo. A lo lejos visualizo a uno de sus mejores amigos Frank de la mano de una pelirroja Fiorella la hija de Fred Weasley y su esposa Danielle, una joven leona de dieciséis años que amaba las bromas tanto como él y su padre. Sonrió para luego girarse y encontrar a Ted abrazado de otra muchacha de cabello castaño, su hermana.

El cambiar el pasado trajo grandes consecuencias como el hecho de tener nuevos integrantes en la familia como lo había sido Fiorella, Amanda (esta última la hermana de Ted) y George el hijo menor de Fred.

— ¡Hey! —. Le llamó Abraxas sentándose a su lado y observándo en la misma dirección que su amigo —. ¿Qué vemos?

James sonrió y se encogió de hombros.

— Lo felices que se ven todos —. Respondió con simpleza y Abraxas asintió en acuerdo pero una sonrisa de diversión cruzó su rostro haciendo que James frunciera el ceño en señal de confusión.

En El Pasado (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora