sugar daddy [ziall]

[cuarenta y cinco]

Niall miró con fastidio la puerta de la oficina de su novio cerrada, entonces ésta se abrió y de ahí salió su nueva secretaria. Una jovencita muy linda de piernas largas, cabello rubio y buenas caderas. El rubio regresó su vista a su celular y le respondió un mensaje a Michael quejándose por el hecho de que Zayn le había prometido que exactamente a las dos en punto irían juntos a comer antes de que tuviera que irse al despacho jurídico donde su tío le había ofrecido empleo desde que salió del bachillerato, llevaba un poco más de diez minutos esperándolo y se había enojado aún más al enterarse de que estaba con su secretaria esa, según recordaba se llamaba Giselle y era un año mayor. Volteó a ver a la puerta otra vez y de ahí salió su novio, acomodándose el cabello con la mano y dejándole una carpeta a la jovencita linda de piernas largas, cabello rubio y buenas caderas de paso y dirigiéndose al sillón en el que se encontraba esperándolo, regresando su vista a su celular y revisando unas notificaciones que le habían llegado de Sandy por Twitter. Zayn se sentó a su lado y le dio un beso en la mejilla.

-Hola, mi amor-le saludó el moreno con una sonrisa. Niall colocó su mano como una barrera entre ellos dos y terminó de tuitear con una mano, guardó su celular en uno de los bolsillos de su saco y se cruzó de brazos sin mirar al empresario-. ¿Qué sucede?

-Nada.

-Te hice esperar otra vez ¿verdad?-dijo el mayor algo preocupado mientras revisaba el reloj de muñeca que traía y se dio cuenta de que eran las dos de la tarde con quince minutos.

-Llevo como diez minutos aquí y tú estás con tu secretaria esa de las piernas bonitas.

-Niall James Horan de Malik, ¿estás celoso?-preguntó enternecido y Niall no se tomó la molestia de responderle, confirmando la pequeña sospecha de su novio. Zayn le comenzó a hacer cosquillas al costado de su pansita y Niall se aguantó la risa lo más que pudo mientras se retorcía sobre el sillón-Estás celoso, bebé.

-No estoy celoso-le miró a los ojos con la mirada más seria que tenía a pesar de que quisiera reírse.

-¿Ah, no?-sonrió y volvió a hacerle cosquillas, esta vez consiguiendo que su novio soltara una carcajada. Aprovechó la oportunidad y lo abrazó, la cabeza de Niall estaba sobre su hombro, mirándole con algo de enojo pero al fin y al cabo su cara de enamorado estaba ahí-No tienes por qué estar celoso.

-No me gusta cómo te mira Giselle-soltó de repente refiriéndose a su secretaria.

-¿Y cómo me mira Giselle?

-De la misma manera en que yo te miro-Zayn abrió la boca para decir algo pero Niall volvió a hablar-cuando te vistes en la mañana-Malik soltó una risita, incómodo por el gran ejemplo que le había dado su novio y negó con la cabeza, antes de hablar se relamió los labios.

-No me importa, sabes que no me no me gustan las mujeres. A mí sólo me importa que me mires tú-Niall le sonrió y se dieron un beso-. Ahora, ¿te parece si vamos a comer?

[...]

Zayn besó sus labios una vez más antes de bajar hasta su cuello y apretarle un poco el trasero con una mano. Niall se sonrojó mientras lo abrazaba y le decía con calma -y pena- que ya tenía que irse al despacho.

-Todavía no hemos terminado, Horan-le susurró en el oído y besó su mejilla. Niall le sonrió y caminó hasta la entrada del despacho, recibiendo una nalgada de parte de su novio, razón por la cual se volteó para verlo-. Que te vaya bien.

-A ti igual-le mandó un beso con la mano-. Por cierto, dejé mi guitarra en la camioneta de Liam, corazón.

-Sí, no te preocupes yo la llevo a la casa.

[...]

-¿Revisaste lo que te pedí?

-Sí, señor Malik, ya está todo listo.

-¿Los boletos?

-Sí.

-¿El hotel?

-Sí.

-Está bien, gracias por tu ayuda, Giselle.

-Es un placer, señor Malik.

-Bien, te veré mañana, Giselle.

Niall entró a la habitación un poco cansado, se notaba en su rostro que su día había estado muy atareado, y en gran parte su fastidio se debía a que había escuchado lo último que Zayn le había dicho a su jodida secretaria. Te veré mañana, Giselle. De sólo pensar que trabajaban juntos le daban ganas de golpear a Malik en el rostro, su bonito rostro.

-Hola, mi amor-le saludó su novio acostado sobre la cama mientras veía la televisión, sin camiseta y el cabello agarrado en un bollo.

-Hola-respondió de mala gana quitándose el saco y aflojando su corbata para poder quitársela.

-¿Cómo te fue hoy?

-De la verga-terminó de quitarse los pantalones, junto con sus calcetines y se metió al baño para lavarse un poco la cara. Estaba un poco estresado.

-¿Por qué? ¿Qué ha pasado?

-Nada, explicarle a la gente las acciones legales que hay que tomar en ciertos casos es difícil cuando hay una mujer histérica y uno que otro hombre ignorante. ¡Ah! Y hay un imbécil por ahí al que le parece divertido ponerme a archivar y acomodar en orden alfabético una enorme pila papeles que al final terminaron en el bote de reciclaje-se quitó la camisa de botones y se acostó a un lado de su novio en la cama. Zayn le miró con empatía y cariño, no le gustaba ver a su novio así-. Y después de eso, el asistente de mi tío me tiró su café encima.

-Los accidentes pasan, mi amor.

-El asistente de mi tío me detesta-respondió enojado y cubriendo sus ojos con el dorso de su mano, tratando de calmarse sin éxito alguno-. Desde que llegué al despacho quiere joderme las bolas porque según él "conseguí el trabajo como un niño mimado". Yo ni quería trabajar en esa mierda. Ese idiota puede besarme el trasero.

-No, no puede. Tu trasero es mío.

-Sabes a lo que me refiero, Zayn-se colocó la almohada sobre la cara y dejó salir un largo suspiro que estuvo a nada de ser un grito.

-Bebé, no te pongas así-trató de quitarle la almohada pero no pudo ya que su novio la pegó más a su rostro, y no iba a pelearse con él de una manera tan infantil así que se acercó más a él y haciendo changuitos con la mano derecha recorrió el torso de su novio desde el centro de su costillas hasta su ombligo, siguiendo hasta el bulto de su ropa interior, sintiendo cómo su pene reaccionaba ante su tacto. Sonrió intuyendo que su novio se había dejado llevar por un momento y comenzó a cantarle con suavidad-. Oye... Te tengo un regalito.

-¿Qué es?-asomó uno de sus ojos por debajo de la almohada.

-Te lo diré si dejas de estar molesto-Niall bufó como una forma de decirle que podía sobrevivir sin un regalo, pero Zayn puso manos a la obra y comenzó a hacerle cosquillas por todos lados, en las axilas, parte del cuello, la pansita y la parte interna de los muslos, Niall pudo resistir la risa y se quitó la almohada de la cara, tratando de agarrar las manos de su novio para poder respirar un poco-. ¿Ya?

-Ya... ¿Qué es el regalo?-preguntó emocionado.

-Espera-se levantó de la cama y abrió uno de los cajones en donde guardaba su ropa para dormir, de ahí sacó una caja más o menos grande color negra con un moño muy pequeño color dorado-. Te lo iba a dar otro día pero creo que vendrían bien hoy.

-¿Es chocolate?-le sonrió ampliamente y se colocó encima de él en cuanto regresó a la cama, sentándose sobre sus muslos (específicamente colocando su trasero sobre su bulto) y abriendo la caja, rápidamente metiéndose un chocolate a la boca-Te amo.

-Yo más, bebé, y por eso no me gusta que te estreses-le dio un beso en los labios a Niall a pesar de que éste estuviera comiendo.

•••

tbh, no tengo forma de justificar el m-preg, estos dos han cogido como conejos sin condón desde hace un buen :v