Cap 42: Estoy preparada.

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Me encontraba dando un paseo en barco por el río Támesis que Harry había preparado para los dos.

-¿Te gustan las vistas?

-Amo Londres y te amo a ti, por supuesto que me gustan. -Dije sonriendo, a lo que el respondió con un apasionado beso.

-Pequeña, no te he traído aquí por cualquier razón. Quiero decirte algo, pero quiero que sea tan especial para ti como para mi. -Me acomodé para escucharle atentamente. -Bueno, ya que ahora estás en Little Mix vas a pasar mucho tiempo en Londres hasta que te acomodes y bueno, no me gustaría que tuvieras que pasar el tiempo en una fría habitación de hotel, ya que una princesa no se merece eso.

-No permitiré que me pagues una casa. -Repliqué seria.

-No te voy a pagar una casa, te vas a venir a mi casa.

Un momento, ¿cómo?. Jamás he ido a la casa Harry y me está pidiendo que vaya a vivir con él.

-Pero y cuando esté estés de gira, ¿qué haré?

-Vivirás allí, ahora también es tu casa.

Y entonces sacó de su bolsillo un juego de llaves con un llavero del big beng. No sabía que hacer, así que cogí las llaves, las admiré y enrosqué mis brazos en su cuello para comenzar a darles dulces besos por todo su rostro. Cuando nos separamos comencé de nuevo a mirar las llaves y mi rostro torno un poco triste.

-¿Que pasa pequeña? -Dijo preocupado.

-Pronto llegará la navidad y volveré a España, me encantaría pasarla junto a ti, pero tu volverás a Holmes Chapel con tu madre, como es normal.

- ¡Tachán! Segunda sorpresa, mi mamá te quiere conocer. Desde el 20 hasta el 30 de diciembre estaremos con Holmes Chapel con mi familia y desde el 30 de diciembre hasta el 7 de enero estaremos en España.

Mi cara sorprendida comenzó a derramar lágrimas.

- Pero... tu mamá... sabe... ¿que estas... saliendo conmigo..?

-Pues claro

-¡Qué vergüenza!

- ¿Y tu papá? -Agachó la cabeza.- Lo siento mucho ... Aún no sé nada de tu padre... Y yo solo quería...

-No pasa nada, (tn). Es normal que preguntes por el. Desde que se separó de mi mamá básicamente apenas supe nada de él y tuve que ejercer un poco del hombre de la casa. Mi madre estaba muy mal y hacía pequeños detalles para alegrarle como traerle alguna flor del colegio o cantarle alguna que otra canción. Todos los días la llenaba de besos y abrazos al igual que a mi hermana y poco a poco fuimos saliendo de ese bache. Lo poco que supe de mi padre biológico es que empezó una nueva vida en Italia, lejos de cualquier recuerdo de nosotros.

-Por eso apenas se habla de tu padre, ¿no?

-Exacto. Creo que incluso niega ser mi padre, pero no me importa. Nos abandonó y ahora soy feliz y mi mamá y mi hermana también, no puedo pedir más, porque a partir de ahora tendré a una chica maravillosa despertando junto a mí. -Ese comentario me hizo sonrojarme, le di un dulce beso en la mejilla y me apoyé en su pecho para disfrutar de las vistas. Él se acomodó y besó mi pelo.-Por cierto, mañana nos vamos a nuestra casa.

**

-Bueno chicas, mandadme la dirección del estudio y allí nos veremos.-Dije sonriendo.

-Hasta mañana. -Dijeron al unísono, cosa que nos hizo reír.

Llegamos a una bonita casa blanca con techos grises terminados en pico para que la nieve resbalara y un bonito porche cubierto con unas acogedoras hamacas. Harry me ayudó a bajar las cosas de su bonito Toyota gris.

- ¿Preparada? -Dijo sonriéndome.

-Eso creo.-Dije con una sonrisa en la cual se notaba que estaba nerviosa.

-Adelante, estrena tu juego de llaves.

Saqué las llaves de mi bolso, las introduje en la cerradura y antes de girarlas le dediqué una sonrisa a mi pequeño. La puerta blanca se abrió y dio paso a un bonito recibidor. A la derecha había una puerta corrediza que daba al salón. El salón tenía una mesa de comedor bastante amplia junto a la ventana que dejaba ver el porche que combinaba bastante bien con el gris de las paredes . A la izquierda, junto a la puerta, un bonito sofá negro con una mesa baja y otro sofá, y justo enfrente un gran televisor en un bonito módulo que tenía estantes y varios cajones. En los estantes había varios cuadros con los chicos, también con famosos, con su familia y la primera foto que nos hicimos juntos. ¿¡Cómo!? ¿¡La primera foto que nos hicimos juntos está en su salón!?

-Me encanta esa foto, no esperaba que la tuvieras ahí.- Dije sorprendida.

A la izquierda de los sofás y a la espalda de uno de ellos había una barra americana y unos bancos que daban a la cocina. Había una bran encimera blanca con un bonito mármol, al igual que el resto de la cocina, que tenía un gran frigorífico gris de dos puertas con dispensador de hielo y agua.

-Me encanta Harry, es perfecta.

-Mira al centro de la encimara.

Allí había un bonito ramo de unas flores moradas de las cuales no recuerdo su nombre, pero eran absolutamente perfectas. Acerqué un poco el jarrón hasta mi y me di cuenta de que tenía una tarjeta entre las flores.

"Bienvenida a casa Señorita Styles. Sé que no es un palacio pero espero que te guste.

Con todo el amor del mundo,

tuyo por siempre,

Harry .xx"

.Mío por siempre, me gusta como suena. -Dije acercándome a el, cogiéndole del cuello de la camisa y dándole un sensual beso.

-Mejor no me tientes que estamos solos.

-Guarda un poco para las noches. -Dije guiñándole un ojo y seguidamente resoplo y noté un bulto en mi ingle.

**

- Si mamá, ya estamos en casa. Si si, el viaje ha ido bien, no está muy lejos. No sé, mañana me llevará Harry para no perderme. Tranquila, todo irá bien, te encantará la casa cuando la veas. Yo también te quiero.

-Vamos nena, la pizza se enfría. -Me dijo con su ronca voz desde la barra de la cocina.

**

Nos encontrábamos los dos tumbados en el sofá tras la cena. Su pijama se basaba en unas calzonas negras y una vieja camiseta de publicidad, mi pijama era solo una camiseta ancha que actuaba como vestido. Yo estaba echada en su pecho y el acariciaba mi muslo.

-Te quiero mucho. -Susurró en mi oído.

-Yo más. -dije inclinando mi cabeza hacia el.

Comenzó a besarme, poco a poco, dulcemente, pero esos besos cada vez pedían más, eran más ardientes, casi quemaban. El tenía hambre de mi, y yo de él. No sabía si parar esta situación o saciar mi ansia. No veía ningún motivo para parar. Estábamos solos, los dos teníamos ganas, sería una buena forma de estrenar la casa y yo me sentía preparar. Mi necesidad de unos besos cada vez más apasionados iban creciendo, y el los iba saciando. Yo cada vez tiraba más de su camiseta, creo que incluso la agrandé, pero no importaba. El se fue deslizando hasta terminar tumbado y yo encima de el. Sus manos fueron hasta un lugar que el nunca había explorado, mi trasero, el cual agarraba con fuerza.

-Me siento lista, me dejaré llevar y que pase lo que tenga que pasar.-Dije entrecortada ya que necesitaba obtener algo del aire que el me quitaba con sus besos.

I'm yours ... or not (Harry Styles y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora