OdiarAmarOdiarAmar

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Los brazos de mi padre me rodeaban, como cuando era pequeña, cuidandome del mal que me rodeaba.

-Espero que todo esto sea para bien

Me miraba fijamente, con los ojos húmedos.

-Yo también... No te olvides de mi
-No podría ni aunque lo intentara

Luego volteó, y se dirigió a Lionel. Generalmente, mi papá estaría besandole los pies. Como lo conoce desde chico, era casi un hijo para él. Pero ahora lo miraba serio, y hablaba fríamente.

-Cuidala bien, no quiero enterarme que mi hija sufre

-Tranquilo, Carlos, la voy a cuidar más que a mi vida

-Más te vale

Fue todo muy extraño. Me despedí de mamá, intenté ser distante, pero terminé abrazandola como una niña.

-Te amo, mamá

-Yo a vos, mi amor. Todo va a estar bien, muy pronto vamos a estar juntos de vuelta

Nos despedimos y embarcamos el avión. Yo quería viajar sola en turista, pero Lionel insistía en que viajara con él. Y como no tenía ganas de discutir, termine por darle el gusto.

Los asientos eran enormes, casi como dos camas, y eran muy cómodos. El problema es que estaban demasiado juntos, y yo no quería seguir confundiendo las cosas. Si había aceptado la ayuda de Lionel, fue porque mi mamá insistió, fue por ella, no por él.

-¿Queres tomar algo?

-Agua

Yo no lo miraba, tenía mi cabeza apoyada al respaldar del asiento, y miraba por la ventana. Las personas parecían hormigas desde acá. Pequeños insectos fáciles de aplastar. Y supongo que así somos los humanos, ¿no? Nos creemos invencibles, y en un momento ¡BAM! la vida nos aplasta contra el suelo.

-Te vas a hacer mal el cuello si no lo moves. Tranquila, podes mirarme, no soy tan lindo como para que no te resistas a besarme

-Nunca dije que lo fueras

Sonrió.

-Ésa es la Mara que me gusta, pero le falta algo, no sé... que me mire

Resignada, voltee a verlo. La luz individual que estaba arriba de su asiento lo iluminaba perfectamente, era hermoso, perfecto para una foto.

-¿Feliz?

-Mucho

Otra vez todo se estaba mezclando.

-Quiero aclararte algo. Tu ayuda la acepté porque mi mamá me lo pidió, no por vos. No me interesa reconstruir ninguna relación amorosa entre nosotros

-Entiendo... -aún así parecía un poco triste- Ahora, ¿puedo hacerte una pregunta?

-Sí

-¿Me seguís amando?

Respire profundamente, pensando en qué podía decirle. Si le decía la verdad, lo destruiría cuando me fuera. Si le mentía, lo destruiría ahora. No... quiero que me odie en serio.

-Sí, mucho. Pero... no puedo amar a nadie ahora, ¿lo entendes? No estoy lista

-Soy paciente

-¿Vos entendes en el lío en el que te metiste? Me vas a odiar, lo sé. No va a ser fácil mi recuperación, ésa escena que viviste cuando desperté en el hospital, se va a repetir muchas veces más. Va a llegar un momento en el que me vas a pagar un hotel para no tener que bancarme más

Gol Del Destino (Lionel Messi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora