Pastillas.

486 69 8
                                    

Día 6.

Querido diario:
Hoy me he obligado a visitar el hospital donde trabajaba mi antigua psiquiatra; han pasado años desde que asistí a esta clase de ayuda, por ello no me sorprendió saber que ella ya se había retirado, siendo en su lugar, un hombre joven el que tomo su lugar en aquella inusual visita.

El día continuo su curso, y como era de esperarse, aquel hombre me dio su "opinión profesional": Yo realmente estaba loco.

Por supuesto. ¿Que más podría decir una persona si alguien llegase y le dijera algo como: "Hey, creo que hay un monstruo en mi armario."?

Para cuando salí de ahí, ya tenia en la mano una bolsa con pastillas y un papel con la fecha de mi próxima visita a aquel lugar.

En cuanto llegue a casa deje las pastillas en la mesita de noche al lado de mi cama, y justo antes de dormir, tome una de aquellas pastillas, logrando que la voz de mi madre me acompañara en un fugaz recuerdo.

《Bien hecho Thomas.》 Recuerdo haberla escuchado decir. 《Toma tus pastillas y las pesadillas con monstruos terminarán.》

Claro que eso había sido poco antes de que mi madre me dejará con mi padre y aquel monstruo que nunca se fue con las pastillas, sino hasta que yo decidí hacerme pasar por un suicida aficionado y terminara en un hospital por mas de tres semanas.

Recuerdo que luego de eso no volvi a dormir en aquella habitacion nunca más. Mi padre me mando a vivir con mis abuelos, quejándose de que no podría cuidar a un loco suicida.

Thomas soltó un suspiro y sacudió la cabeza, cerrando aquel cuaderno que igualmente servía de diario. No le servía de nada pensar más en el pasado.

Sin mas que hacer, se fue a dormir temprano, asegurándose de dejar la puerta del armario cerrada y confiando en que aquellas pastillas le ayudarían.

A la mañana siguiente, encontró el armario semi-abierto, su frasco con las pastillas hasta el otro extremo de la habitación, justo frente al armario, y debajo de este, una pequeña nota.

Querido humano:
¿Que son aquellas cápsulas en ese frasco? ¿Se comen?
Anoche note que comías una y no pude evitar tener curiosidad. Espero no te moleste que haya tomado algunas.

Posdata:
Mi azúcar se esta acabando, ¿Tendrías la amabilidad de regalarme un poco antes de irte a dormir esta noche?

Atentamente: El monstruo del armario.

Querido Monstruo En El Armario.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora