El Hobbit y los Cazadores de Dragones

Capítulo 30

Hola a tod@s sabemos que ha pasado tiempo, pero en serio no podíamos actualizar, ya saben que Dany va a un colegio súper exigente que le consume la vida poco a poco u.u y yo trabajo y estudio, ahora dirán... ¿y las vacaciones de invierno? muy buena pregunta, efectivamente la Dany tiene vacaciones de invierno, pero se nos han complicado las cosas, tanto ella como yo estamos pasando por momentos difíciles en la familia. No puedo hablar por ella, si quiere contar lo que pasa lo hará mas adelante, solo puedo decir que es una situación súper compleja y en serio no se la deseo a nadie. Por mi parte, yo no tengo vacaciones de invierno :c y aparte... bueno, no me agrada hablar de esto, porque hacerlo lo hace real para mi y es difícil tener que aceptar que esta pasando. Febrero pasado le detectaron cáncer a mi abuelo, y le dieron 6 meses de vida, y aunque aun mantiene su jovialidad la mayor parte del tiempo, se ve mas delgado. Estamos intentando pasar la mayor parte del tiempo con él, incluso mi tío se vino desde Arica a la sexta región, para estar con él ya que estamos en cuenta regresiva, lo que me deja aun menos tiempo para la historia. No queremos abandonarla, en serio que no, pero estos últimos capítulos, que no creemos sean mas de diez, los subiremos de forma mas lenta que los anteriores. Cuando las cosas se Regularicen, volveremos a subir igual que antes, los miércoles y sábados.

Sin más preámbulos, les dejamos el Capitulo, que lo disfruten :)

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Bardo abrió la puerta de su casa al escuchar que alguien la golpeaba con apremio, al asomarse, se encontró directamente con Bofur, y tras él Oin y Fili cargando a Kili.

— No, ya tuve suficiente, lárguense — ordenó el hombre molesto.

— No, no, espera — lo detuvo Bofur preocupado — nadie nos apoya, Kili está herido — anunció dejando entonces ver al pálido enano — no va a aguantar — dijo con un notorio tono de angustia en su voz.

Bardo los dejó entrar entonces, esos enanos podrían ser muy molestos, pero no podía dejar que uno muriera cuando habían ido a pedirle ayuda. Abinadab, ya estaba allí desde temprano hablando con su amigo, de qué podrían hacer, ya que él tampoco apoyaba la idea de que los enanos fueran a la montaña, mucho menos si eso ponía en peligro a sus amigos cazadores.

Ambos hombres habían estado manteniendo una conversación acalorada de lo que debían hacer, Bardo decía que debían quedarse en el pueblo y protegerlo para cuando los enanos despertaran al dragón. Abinadab por otro lado, quería seguir a los enanos e intentar razonar con ellos, o detenerlos de alguna manera, le preocupaba que sus amigos, en especial la mayor de las chicas, pudieran salir heridos.

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El bote encalló en la orilla del lago, y todos en ella bajaron observando expectantes la montaña frente a ellos. Bilbo y las chicas dieron una última mirada a la ciudad a sus espaldas, deseando que los que habían dejado atrás estuvieran bien.

La compañía comenzó su larga caminata hacia Erebor, a paso constante y sin descanso llegaron a una saliente, desde donde podían ver a no mucha distancia, las ruinas de una ciudad.

— ¿Qué es este lugar? — preguntó Bilbo, pronunciando en voz alta la misma duda que rondaba la cabeza de los cazadores, ellos al igual que el hobbit, jamás habían estado allí.

— Antes fue la ciudad del valle — respondió Balin, sin quitar la mirada de aquella destruida ciudad — ahora está en ruinas, la desolación de Smaug.

— Muy pronto será mediodía — anunció Thorin a todos — debemos hallar la puerta oculta antes del ocaso, síganme — ordenó reanudando la marcha.

— Espera — dijo entonces Bilbo, llamando la atención de todos, que habían acatado las palabras del líder en cuanto las había pronunciado — este es el mirador, Gandalf dijo que lo veríamos aquí, que no deberíamos...