Mi nombre es Ross Lynch, ¿que les puedo decir? Tengo una vida como la de cualquier chico común y corriente.
Mis padres están casados y tengo 4 hermanos. Riker es el mayor, Rydel es la que le sigue, Rocky que es menos que Rydel por un año, luego voy yo y al ultimo Ryland, lo se muchos pero ¿que esperaban? La mayoría somos rubios a excepción de Ryland y Rocky, en fin. ¿Saben? es difícil ser yo aunque no lo crean, muchas chicas dicen que soy guapo pero a mi parecer solo soy un chico normal, no me gusta ser orgulloso y de mas, sin embargo me he tenido que mudar por el trabajo de mis padres.
No viajamos a cada rato, no, pero si se hacen viajes de vez en cuando solo con el simple hecho que esta vez nos quedaremos más tiempo.
Me gusta vivir la vida a lo grande tampoco es que sea un mujeriego de mierda, pero aun no he encontrado a la chica con la cual quiera pasar el resto de mi vida o bien, hasta donde dure. Tampoco digo que me he acostado con medio mundo, no, simplemente aun no encuentro a esa chica que me haga sentir algo diferente... Único. Cursi, lo se.
Eran las 6:00 y Ryland corrió a despertarme, así es soy un flojo eso si, me levante haciéndole cosquillas para después dejarlo y meterme a la ducha. Hoy sería un nuevo día en un nuevo instituto. Termine mi ducha y me vestí, baje a desayunar y ahí estaba mi familia, desayunando, termine mi desayuno una vez que me senté y me levante tomando mi mochila para así encaminarme al colegio.
Una vez que llegue, entre y noté que estaban molestando a una chica, no podía ver bien a aquella chica pues su rostro lo cubría su cabello, lo que si se es que no permitió que esa chica rubia la siguiera molestando, se dio la vuelta y se fue a quien sabe donde.
Recibí mi horario y todo, para después irme a mi primera clase, todas mis clases pasaron rápido eso si, en el primer tiempo, hice un amigo, James, que es buen chico y el también está en contra de lo que le hacen a aquella chica solo que el no puede hacer nada por un motivo que no me dijo, no he dejado de pensar en ella.
Me gustaría saber quien era, porque la molestaban.En fin, salimos a receso y toda la cafetería estaba casi llena, había populares, porristas, nerds, de todo. Menos esa chica.
Joder se me hará un vicio esa chica!Volví a clases y pasaron nuevamente rápido hasta que llegó la clase de literatura, entre al salón y ahí estaba aquella chica, ya se algo y es que tenemos química, entre y la chica estaba sentada sola en el rincón, había lugares vacíos y algunas chicas decían que me sentaran con ellas pero me negué, camine y me senté a su lado.
- Puedes burlarte de mi -hablo fría y cortante sin despegar su vista de aquel libro.-
- ¿Que? ¿Porque lo haría? -dije confundido, la verdad no entendía porque me burlaría.
- Por favor, todos lo hacen y si se sientan conmigo es para juzgarme o restregarme en la cara lo que yo ya se. -dijo aun mas fría y noté como una lágrima resbalaba por su mejilla y ella la limpio rápidamente.
- Yo no soy como los demás, deberías de saber que todos somos diferentes -dije sin apartar mi mirada, quería ver su rostro.
- Todos son iguales, juegan contigo y te botan -solto ella con cierto asco y remordimiento después de ciertos minutos.
¿Pero que mierda? ¿Como es que pueden ser así de crueles y mas con alguien como ella?
Se que suena apresurado, pero ahí algo en esa chica que a mi me gustaría descubrir pero eso si, ya no más sufrimiento para ella.Yo estoy aquí y aunque ella no quiera me quedare.
Tratare de ser su amigo.

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Amor Suicida.
Fanfiction¿Que pasara si juntas a una suicida con un chico que no lo es? ¿Que pasaría si el la hace cambiar? Todo suele pasar, en la guerra y en el amor todo se vale. ¿Pero ella? Ella no creen en el amor y ni le pasa por la cabeza hacerlo lo único que si es...