La Burbujeante Chica Gorda

Harry

Especial personajes 2.

Desperté y no reconocí el lugar en el que me encontraba, me dolía la cabeza y no recordaba nada.

—Hola, cariño.— se acercó a la cama mi mamá— ¿cómo estás?— preguntó tocando mi frente. Su mirada era triste.

—Me duele la cabeza, ¿qué sucedió?

—Tuviste un accidente. Estabas borracho, Harry, un auto salió de la nada y terminaron impactandose contra un poste.

—¿Pero, todos están bien? ¿Cuánto tiempo llevo aquí?

—Eso creo, hijo. No mucho, el accidente fue ayer a las 11:50 pm.

Me sentía fatal, si hubiera estado con mis amigos, mis verdaderos amigos nada de esto hubiera pasado.

—¿Tú cómo estás? Deberías descansar.— dije preocupado.

—No pienso dejarte solo.—sonrió acariciando mi cabeza.

Odiaba ser una molestia para mi madre, ella tenía suficientes problemas como para que yo le diera más.
Me entristecí un poco al saber que ninguno de mis amigos me había venido a ver. Desayuné y mire un poco de televisión.

Escuché escándalo a fuera y la puerta de mi habitación se abrió, ahí estaba ella, con una débil sonrisa y ojos lagrimosos.

—¡Dios mío! ¿estás bien?

—Lo estoy — Sonreí. — ¿Viniste sola?

—NO. Los chicos están a fuera, no los dejaron pasar. ¿Qué sucedió?— preguntó Naira tomando mi mano.

—Dicen que iba en el auto con los demás chicos, estábamos borrachos y otro vehículo salió de la nada provocando que nos estrelláramos contra un poste. Nada grave.

—¿Por qué estás actuando como un imbécil, Harry?

—No lo sé. Bueno sí.

—¿Qué te sucedió? Ya ni siquiera sé qué somos. Me has ignorado y a los chicos por días. ¿Qué está mal?— preguntó suplicante y bajó su cabeza porque comenzó a llorar.

—Yo estoy mal. —tomé un gran respiro para tomar valentía.— Estoy enfermo.

—¿De qué hablas?— levantó su cabeza y me miro preocupada y confundida.

—Hace unos días comencé a sentirme mal, dolor de cabeza, debilidad y moretones en la piel, así que fui a ver al médico para hacerme un chequeó y...

—¡Oh, Dios mío! Es broma, ¿no? Harry dime que es mentira. Tú estás bien. — apretó con más fuerza mi mano.

—Me detectaron leucemia.— cerré fuertemente mis ojos para evitar llorar, Naira me abrazó como siempre lo hacia y me hizo sentir que todo estaría bien.—No llores, bonita, voy a estar bien, ¿ok?

—Perdoname, Harry.

—Estás loca, no tengo nada que perdonarte, al contrario, soy yo el que te debe una disculpa por como te traté. Te quiero tanto y sé que mereces a alguien mejor que yo, pero por favor— tragé saliva y mi voz se debilitó —no me dejes solo ahora.

—Estaré tanto contigo que hasta te aburrirás de verme.— sonrió.

Le pedí a Nai que se lo comunicara a los demás, yo no tendría la osadía para hacerlo, ella aceptó.

A la mañana siguiente me dijeron que ya podía irme a casa, los chicos vinieron a visitarme, se quedarán toda la noche. Hemos vuelto a ser los mismos.
Nico anunció que se iría a Nueva York a trabajar y Jake también, con beca universitaria.

Ellos están creciendo. Yo estoy creciendo también y no podría estar más feliz de lo que hemos llegado a lograr.

Si hay alguien con quien me gustaría pasar mis últimos días de vida, definitivamente son ellos.

—¡Vamos, Harry! Anota un gol aunque sea.— gritaban las chicas sacándome de mis pensamientos mientras trataba de vencer en el xbox a Jake.

Naira me miraba con una sonrisa esperanzadora y yo se la devolví.

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Hola, he vuelto, perdonen la ausencia. Espero que les guste el capítulo, el siguiente personaje en este especial será Samantha.

¿Diganme qué opinan, qué les está pareciendo este especial?

Por cierto, he publicado una nueva historia, "Las canciones de Rain" sería cool si se pasarán por allí y me dijeran su aponion. Besos x.