Melliza de Uzumaki Naruto.

Exámenes Chūnin. Primera prueba. Parte Uno.

En el capítulo anterior.

Mientras el rubio se imaginaba como Hokage y que superaba todos los obstáculos, el moreno pensaba que podía enfrentarse a cierto pelirrojo de Suna, y la peli rosa, que era imposible que ella pudiera participar, ya que no llegaba al nivel de sus compañeros.

Narrador Omn.

A la mañana siguiente, la pelirroja se puso una camiseta negra de rejillas de manga larga y que sólo cubría su pecho, pantalones cortos del mismo color que la camiseta de rejilla y encima un kimono sin mangas y corto, hasta medio muslo, cubriendo el pantalón, de color morado oscuro y los filos negros, al igual que el obi con el que sujetaba el kimono, siendo también morado. Sus zapatillas ninja negras por encima de la rodilla, y unos guantes sin dedos hasta los codos del mismo color del kimono, colocándose la banda ninja en el cuello y dejándose su larga melena roja suelta.

Como casi todas las mañanas despertó a su rubio hermano, y mientras él se preparaba, tú preparabas el desayuno, saliendo antes que él, inspeccionando los alrededores, encontrándote con Morino Ibiki, un hombre de 27 años, Jefe del Departamento de Tortura e Investigación, y la persona que iba a ser el supervisor de la primera parte del examen Chūnin. Era un hombre imponente, que se complementa con una cara y cabeza llena de viejas heridas y cicatrices, aunque su cabeza estaba siempre cubierta para ocultar una colección de marcas de quemaduras, picaduras de donde se utilizaron tornillos, barras diagonales y largas, las cuales viste al llegar de tu entrenamiento con los Sannin, ya que el Hokage te lo presentó y os llevasteis bien, más o menos, ya que es un hombre algo difícil de llevar, aparte de que también formaba parte de ANBU. Todas esas cicatrices eran indicativos de tortura física que había sufrido en el pasado, e ilustra su capacidad para soportar el dolor sin renunciar a la información deseada al enemigo.

Ibiki: Vaya, veo que ya estás por aquí, ¿lista para empezar? –te preguntó, sorprendiéndote, ya que ibas despistada, preocupada por tu hermano, ya que lo conocías demasiado y sabías que se metería en más de un lío–.

_____: Oh, Ibiki. –saludaste con una sonrisa–. Sí, estoy lista, y ya me sé todas las respuestas, las he estudiado en todos estos días. Sólo estoy esperando a que llegue mi equipo, aunque no esté con ellos dentro de los exámenes. –le explicaste sin borrar ty sonrisa–.

Ibiki: Eso es bueno, ya que eres una de las personas a las que tienen que copiar, aunque si no las supieras tampoco importaba mucho. –reíste ante eso, ya que era cierto–. Ve con tus amigos en ese caso, nos veremos para el examen.

_____: Sí, hasta luego. –te despediste y fuiste a la entrada del edificio donde se haría el examen, viendo al moreno y a la peli rosa–. Buenos días chicos, veo que aun no ha llegado mi hermano.

Sasuke: Buenos días. –te saludó de vuelta, dejando que te agarraras de su brazo en cuanto te colocaste a su lado–.

Sakura: Buenos días. Y no... No ha llegado. –dijo suspirando, y algo molesta por tu acercamiento con su amado, mientras a lo lejos veías una rubia cabellera que se acercaba corriendo–.