(Punto de vista de Niall)
-No hagáis mucho ruido, cerdos... No queremos saber todas vuestras intimidades.
-Cállate imbécil.- Me dijo Liam mientras cerraba la puerta de la habitación de Ana.
-Parece que nos vamos quedando solos...
-Niall, sólo se han ido Liam y Ana. Siguen estando aquí Louis, Harry y Zayn.
-Es cierto. Será que tengo muchas ganas de estar solo contigo y comerte a besos.
-Cállate anda, vas a hacer que me ponga roja.
-Me encanta cuando lo haces...- Le susurré tras acercarme a su oído.
-¡¡Eh!! Tortolitos, vosotros no os vais. Si no prometo destrozarte la casa, Rosa.
-No me das miedo Lou.
-A mi sí, así que no le dejes solo.- Dije riéndome como un loco. El alcohol estaba empezando a afectarme seriamente.
Estuvimos hablando y bailando un par de horas, mientras de fondo se oían de vez en cuando risas, golpes y algún que otro grito provenientes de la habitación de Ana.
-Joder, a ver quién mueve mañana de la cama a tu amiguita...
-Pues ella verá, mañana vamos a ver a Perrie y a las chicas a un festival. Si no se quiere mover yo me voy sola.
-Vaya amiga...
-Vaya novio, que no vas a Perrie.
-Eh, que tengo cosas que hacer...
Mientras escuchaba la conversación que estaban teniendo Rosa y Zayn me di cuenta de que Harry la estaba mirando fijamente. ¡¡Dios!! ¡Cómo la miraba! En sus ojos había una mezcla de amor, admiración y pasión, mucha pasión. En ese momento me dije a mi mismo que tenía que hablar con él, no podíamos seguir así, éramos como hermanos y no podía permitir que Harry sufriera por una chica, y mucho menos si esa chica era mi novia.
-Harry, acompáñame un momento a la cocina a por... a por hielos.
-Mmmm... vale.
Vi como dirigía una última mirada a Rosa, que charlaba animada con Zayn y Louis. En el corto camino hacia la cocina ordené mis pensamientos como pude, ya que el alcohol me habia envalentonado, pero en verdad no tenía muy claro qué era lo que le iba a decir a Harry.
-Harry...
-Dime Nialler.
-He visto como la miras.
La cara de Harry cambió por completo al escucharme. Intentó recomponerse, pero su primera reacción lo habia dejado claro todo.
-¿A quién?
-No te hagas el tonto Harry, sabes perfectamente de quien hablo.
-Pues no, no tengo ni idea de quién hablas.
-Joder, de Rosa, hablo de Rosa.
-¿Eh? Yo no miro a Rosa.
-No claro... Ahora yo tengo alucinaciones.
-Pues las tendrás. Venga no me jodas, no me des la noche tú también.
-¿Que no te dé la noche? Te recuerdo que estamos hablando de MI novia.
-No hace falta que enfatices el MI como si no hubiera mañana. Sé que es tuya. Y ya te he dicho que no la miro.
-No, tienes razón. No la miras. ¡¡¡La devoras!!!