Capítulo 8. "Presión"

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Un nuevo día amaneció, Gokú caminaba por los pasadizos de la universidad hacia su facultad, cuando a unos metros suyos vio a su grupo de amigos con las cabezas bajas.

¿Y ahora que paso?, dijo preocupado Gokú.

Hable con él maestro para interceder por los chicos, pero dice que ya no nos necesita, es más me dijo que estaba evaluando la opción de que tú continuarás dijo Piccolo con nostalgia.

Pero a mí el maestro no me ha dicho nada, dijo Gokú intrigado.

Ya te dije, me dijo que por ahora contara contigo, pero a lo mejor en unos días o semanas tampoco te querrá en el gimnasio, dijo Piccolo.

¿Pero por qué?, dijo Gokú.

Cell y sus amigos corrieron la voz en los gimnasios y a los patrocinadores que somos unos tramposos y que no sabemos dar buenas batallas, nuestra imagen está decayendo tanto que ya no quieren apostar por nuestros talentos, dijo Ten con tristeza.

Y eso no es todo, no están creando una fama de mujeriegos, tanto así que ninguna chica quiere siquiera ser nuestra amiga dijo Yamcha.

Así ya no podre acercarme a Dieciocho, dijo con tristeza Krilin.

Y para colmo mi padre, me dijo que ya no me apoyara más, el pensó que podría ser un gran luchador y ganar mucho más dinero, por eso me estuvo apoyando con las artes marciales a pesar de que no eran de su agrado, pero ahora piensa quitarme todo su apoyo y yo no me veo trabajando Gokú como la gente pobre, decía con tristeza Yamcha.

No se preocupen yo hablaré con ellos, todo volverá a estar como antes, dijo Gokú.

¿Qué piensas decirles?, dijo Piccolo preocupado.

Lo que sea necesario para que todo vuelva a la normalidad dijo Gokú.

Oficina Estudiantil:

¡Gracias a todos por venir¡ con esto culminamos la sesión de hoy día, decía cordialmente una bella jovencita pelinegra.

Hasta mañana Milk, decía unos jóvenes de lentes poco atractivos.

Hasta mañana, dijo la pelinegra con una sonrisa.

Milk yo me encargo de pasar esto a limpio, dijo la rubia, tomando los apuntes de la carpeta de su amiga.

¡Gracias Dieciocho¡ dijo la pelinegra sonriendo.

¿Tienes clase ahora?, dijo Vegueta sonriendo.

No aún tengo clase en una hora, pero ya puedes irte la sesión término, dijo con amabilidad la pelinegra.

No, ya tampoco tengo clases aún, dijo Vegueta.

¡Ah¡ pero no es necesario que te quedes, ya puedes irte si lo deseas, dijo Milk.

Te incomoda mi presencia dijo Vegueta acercándose a ella mientras sonreía.

No como se te ocurre, es solo que pensé que ya querías irte, es que ya no hay nada más que hacer, dijo la pelinegra.

Me quedare a acompañarte un rato, dijo Vegueta abriendo una bolsa de papel que había en la mesa, sacando unos vasitos y unos taper. 

Toma, es un café y un sándwich, dijo el joven cabello de flama sonriendo.

¡Gracias¡ dijo Milk con una cálida sonrisa.

¿Y cómo vas con Gokú?, dijo Vegueta.

Bien, dijo la pelinegra.

¿Sus padres ya te conocen?, dijo Vegueta.

No aún no, es que recién estamos juntos, creo que eso será más adelante dijo la pelinegra llevando el vasito de café a su boca.

"PARTE DE ESTE JUEGO"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora