Gran Tortura

capitulo 10

-¿que se supone que debemos hacer con la luna?- Pregunté

-este artefacto nos podrá guiar hasta a la caja de esmeralda- respondió Peyton, nos encontrábamos dentro del hotel, todos dentro de una habitación hablando sobre como solucionaríamos todo lo ocurrido.

-pero solo se puede usar de noche- siguió hablando -lo que es un poco malo ya que podríamos toparnos con algún detuo de la oscuridad.

-¿podríamos utilizarlo de una vez?- preguntó Jace

-si ustedes así lo quieren, de acuerdo.

Peyton dejo la luna en el centro de la habitación.

-un savortex tiene que activarlo- dijo mirándome.

Logre disimular un poco la risa que me había ocasionado eso y me acerque al artefacto. No sabía que hacer pero en cuanto logre tocarlo se iluminó la habitación mostrándonos como un holograma un mapa. El mapa era de la ciudad en donde estábamos, aunque fuera de eso había algunos puntos rojos en algunos lugares.

-¿que significan esos puntos?- pregunté

-cosas que necesitamos para encontrar la caja.

-o sea que tendremos que buscar mas cosas- dijo Ally

-si- solo dijo Peyton

-genial- dijo sarcásticamente Jace

-no se desanimen- dijo Peyton -no son muchas cosas.

-no, pero se nos acaba el tiempo- dijo Leyla -pueden haber mas detuos por todo el lugar y esparciéndose.

-es cierto- dije -no creó que en pocas noches logremos tener todo.

-bueno pues habrá de separarse- dijo Amber

-¿quien hará los grupos?- preguntó Nathan

-creó que debería hacerlos Dairon- dijo Leyla

-No, no , no lo siento, no soy bueno haciendo grupos- dije nervioso

-bueno yo los haré- dijo Ally -Amber y Dairon, Leyla y Nathan, Peyton y Dallas, y Jace conmigo.

-¡¿que?!- Gritaron Peyton y Dallas al unísono.

-¿hay algún problema?- dijo Ally

-No para nada- dijo Peyton -solo me sorprendió que me pusieran con alguien como Dallas, ya sabes, no será de mucha ayuda pero..

-espera, ¿que?- interrumpio Dallas -hubiera preferido que me pusieran con un perro en vez de alguien como Peyton.

-¡no, no dijiste eso!

-si lo dije y no me arrepiento.

-¡basta!- grito Amber -estan actuando como niños pequeños, no se que problemas hayan tenido pero tendrán que resolverlos después ya que esté es un asunto de gran importancia.

-bien- dijeron los dos.

-saldremos mañana por la noche y es mejor que cada quien apunte la localización del objeto en una libreta.

-nos encontraremos de nuevo en el Parque Stone.

-Y por favor manténgase a salvo, iremos en parejas así que deben cuidarse el uno al otro.

Dicho eso, cada quien se fue a su respectiva habitación, mientras que yo planeaba ir a casa de Josh por la mañana.

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Por la mañana el cielo estaba despejado, no se veía rastros de nubes negras lo cual era bueno porque así podría salir sin llegar todo empapado. La casa de Josh estaba un poco lejos del hotel donde nos habíamos quedado, pero tome un taxi para así poder llegar mas rápido y regresar antes de que anochezca.

El recorrido tardo mas o menos una hora y media, pero logré llegar al lugar donde vive Josh.

Camine por un rato buscando su casa hasta que la identifique. Me acerque a la puerta principal y toque tres veces, pero no abria nadie.

Junto a la casa una mujer que arreglaba sus rosas rojas me miraba fijamente, trate de ignorarla pero por mas que pasaba nadie contestaba, así que me acerque a ella a preguntar.

-Disculpe, ¿sabe si las personas que viven aquí salieron?

-querido, ¿es que no lo sabes?

-¿el que?

-no vive nadie aquí

-oh- dije -¿sabe exactamente a donde se mudaron?

-no, lo siento.

-podría decirme cualquier información que me ayude a encontrarlos.

-solo se que en cuanto se enteraron que su hijo había muerto se fueron a Canadá y después de eso....

-¿que?

-a Canadá

-no, sobre la muerte.

-su hijo, era un buen tipo me ayudaba a cortar el césped los fines de semana.

-¿Josh?

-si efectivamente.

Al escuchar eso no pude escuchar lo demás que me dijo, simplemente me quede petrificado, no podía moverme de donde me encontraba y mi mirada se dirigía hacía ningún lugar.

No escuche a la mujer y salí corriendo, logré encontrar un parque cerca, las lagrimas poco a poco lograban salir, pronto se convirtió en un sollozo.

Trataba de calmarme pero no podía, una presión en mi pecho no lo dejaba.

Después  solo vi oscuridad y solo eso.

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Escuche una voz a lo lejos y pequeños golpes a mi costado.

-Joven, ¿se encuentra bien?- me dijo un señor que se encontraba vendiendo helados.

-si- dije levantándome de la banca -solo me quede dormido.

-me alegro, pensé que estaba muerto.

El señor se alejo y siguió con su trabajo, mientras saque mi móvil y vi la hora, eran las siete, y tenía que estar en el hotel antes de que anocheciera.

Después recuerdos empezaron a llegar a mi mente de Josh, esa persona que fue mi amigo durante tanto tiempo que cualquier cosa que se me viniera a la mente el estaba presente. Poco a poco las lagrimas brotaron si que me diera cuentas. Limpie mi cara con la manga del suéter y busque un taxi.

Pensando en cual fue la causa de su muerte.