The Payno | Niam.

7.

—¡Niall! —un brazo masculino tomó del cuello a Eleanor y enseguida se asustó. No quería morir.

—¡Sueltala! —gritó Niall mirando a su hermana asustada.

—No lo haré. —sonrió—. Está deliciosa.

—Maldito que la sueltes —Niall se intentó acercar pero el hombre le apuntó con el arma alejándose de Niall con Eleanor aún entre su brazo.

—Si te atreves a acercarte juro que te asesinaré. Y disfrutaré hacerlo.

—Oye, quiero que te calmes.

—Vete de aquí. O te mueres. —apuntó su arma hacia el pecho de Niall dispuesto a disparar.

Eleanor gritó y con la fuerza que llevaba cautiva en su interior se inclinó hacia adelante y se devolvió golpeando al hombre con su cabeza. El hombre protestó por el golpe en su nariz dejando ir a Eleanor quien corrió sin dudarlo hacia Niall y él la atrapó entre sus brazos.

—¿Estás bien? —le preguntó revisándola.

—Sí, estoy bien. Vámonos de aquí.

Dispuestos a irse el sonido de un disparo al aire se escuchó. El hombre estaba apuntándoles a ambos. Niall colocó a Eleanor detrás de él.

—Si nos vas a matar hazlo de una vez.

—Será un placer.

El hombre cargó el arma dispuesto a cumplir su palabra y apuntó a la cabeza de Niall. Niall suspiró fuertemente y tomó la mano de Eleanor.

—Disfrutaré verte desangrarte en el suelo mientras me cojo a tu hermanita.

El hombre colocó el dedo en el gatillo y se escuchó el disparo. Niall abrió los ojos pero él no estaba herido. Tampoco Eleanor. Miraron hacia el hombre dándose cuenta que tenía un hoyo en el centro de la cabeza.

—¿Que mierda? —Niall se alejó junto con Eleanor viendo como el cuerpo del hombre caía al suelo dejando ver la persona que lo había asesinado—. ¿Liam?

[...]

—¿Qué es lo que quieren? —el arma seguía en la cabeza de Louis mientras los hombres sacaban a todo el mundo del hospital—. Las personas de este lugar no tienen nada que ver con Liam ni conmigo.

—Cierra la puta boca de una vez —susurró fuerte el hombre—. La Sombra vino aquí por el aprendiz. No por ti. Y hablando del rey de Roma.

La Sombra entró tranquilamente por la puerta mientras Louis veía todo en vivo y en directo. Miró a La Sombra, y comenzó a sudar de lo terrible que era que él estuviera en el mismo lugar que aquel monstruo. No sabía porqué tenía miedo de aquel hombre.

—¿Tú eres Louis, cierto? —la voz de La Sombra sonó relajada. Sin coraje ni rabia en ella. Como si le estuviera hablando a una persona común y quisiera que fuera su amigo.

—Sí —trató de deshacer las ataduras pero La Sombra colocó su mano en el hombro del castaño. Lo podía sentir. Sentía el miedo que le provocaba al muchacho. Le temía—. ¿Qué es lo que quiere de mí?

—De ti quiero absolutamente nada. Eres insignificante para mi uso. Lo único que quiero de ti es que le des un mensaje a tu preciado amigo Liam Payne.

Louis suspiró varias veces por la boca y con todo el odio del mundo se atrevió a mirar los ojos de La Sombra a través de aquella máscara que usaba. Eran negros como la noche misma. Daba terror aquello.

—¿Cual es el maldito mensaje? —La Sombra rió.

—Descuida. Para que no haya fuerza bruta necesito tenerte sin ataduras y sin nada de esto. —La Sombra miró al hombre al lado de Louis y en un segundo le quitó las ataduras a Louis para que éste pudiera levantarse.