Alex:
Estábamos caminando junto a las faldas de una montaña, cuando de pronto Frank cayó de rodillas al suelo, todos fuimos a acudirlo.
-¡Frank! ¿Qué sucede? –Pregunté preocupado.
-¿Estás bien? -Se unió Willy.
-Compañero... ¿Qué pasa? -Preguntó Vegetta, intentando mirar sus ojos.
-No me siento bien... yo... yo... -Dijo con una voz débil.
Noté como sus ojos y su sonrisa se volvieron los de Zitre, Lenay gritó espantada al ver aquella imagen, mientras que todos los demás estábamos mirándolo sorprendidos. Frank me tomó del cuello rápidamente y me levantó haciendo que comenzara a ahogarme.
-¡Tú ya no me sirves! -Gritó, pero ese ya no era Frank, ni siquiera era su voz.
-¡Bájalo! -Ordenó Vegetta.
Vegetta lanzó un espadazo al brazo de Frank y logró que me soltara, Lele vino a ayudarme, Frank se acercó a mí y comenzó a golpearme una y otra vez, todos trataban de alejarlo de mí, pero había adquirido más fuerza.
Frank nos golpeaba a todos, estaba poseído totalmente por Zitre, sus pupilas habían desaparecido, su ojos eran totalmente blancos. Willy, Germán y Vegetta trataban de detenerlo, se lanzaban encima de él para de detenerlo pero al parecer lo único que quería era herirme a mí, trataba de acercarme pero Lele me detenía y con todas sus fuerzas me tiraba del brazo, tratando de alejarme, pero yo me resistía, no quería que nada le pasara.
-¡Alex, corre! ¡Te quiere a ti! -Gritó Lele.
-¡No lo voy a dejar! ¡Vegetta, Willy, Germán, suéltenlo! ¡No lo lastimen!
-¿¡Tío, estás tonto!? ¡Te quiere matar! -Exclamó Vegetta.
-¡No me importa! ¡No lo golpeen! –Lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos.
-¡Alex, por favor! ¡No quiero que te haga nada! -Suplicó Lele.
-¡No! –Tiré de mi brazo, zafando mi brazo del agarre de Lele, haciendo que se cayera y corrí hasta Frank, tomando su rostro en mis manos- ¡Frank, por favor! ¡Mírame!
Willy, Germán y Vegetta trataban de alejarlo de mí, Frank se movía descontroladamente tratando de golpearme.
-¡Frank, soy yo, Alex! ¡Frank mírame! –Él seguía tratando de soltarse de Willy, Germán y Vegetta- ¡Frank, por favor, no me hagas esto, yo te amo! –Grité más fuerte, sin importarme que Lele y los chicos estuvieran ahí.
Willy quedó sorprendido y Frank logró soltar su brazo en esa distracción, sacó su espada y trató de golpearme pero Lele me empujó haciendo que el espadazo le llegara a ella.
-¡Lele!
-¡Alex, ya vete de aquí! -Ordenó con determinación, poniendo su mano sobre su herida.
Yo miré a Frank un segundo y luego a Lele, decidí correr. Comencé a subir la montaña que había a un lado de nosotros, cuando iba más o menos por media montaña miré hacia atrás y ya a lo lejos a Lele, Germán, Willy y Vegetta, tratando de detener a Frank y él forcejeando con todos. De un momento a otro, Frank logró zafarse de todos y comenzó a correr hacia mí, yo comencé a subir la montaña más rápido aún, cuando llegué volteé a ver a Frank, no lo veía por ningún lado, fue el momento en el que, de una forma fugaz, algo me golpeó en la nariz, haciéndome retroceder y caerme, Frank subió y comenzó a gatear rápidamente hacia mí, yo retrocedía arrastrándome, sólo ahí me di cuenta de que detrás de mí había una larga caída, Germán y Vegetta llegaron y agarraron a Frank pero Zitre, quien lo poseía, era más fuerte que todos aquí.
En un momento, Frank logró soltarse de todos nuevamente, y comenzó a correr hacia mí, empujándome hacia el acantilado. Pude notar que, repentinamente, justo antes de empujarme, sus ojos volvieron a la normalidad, fue como en cámara lenta, esos hermosos ojos color café, se volvieron los más bellos que había visto. En cuanto sus ojos se clavaron en los míos, su rostro de enojado se trasformó a uno de sorpresa pero ya era demasiado tarde, yo ya estaba cayendo. Recuerdo escuchar a Frank gritando mi nombre desesperado, y vi como todos se asomaban al acantilado.
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¿Desea insertar realidad? | STAXXBY
FanfictionUn grupo de amigos que usan un juego en común, un ser que quiere acabar con ellos. Sólo querían jugar pero ocurrieron muchas cosas más; conocieron gente, aprendieron más sobre sus amigos y pudieron darse el cariño que no habían podido darse en su mu...