Capítulo 3: La aldea

4.6K 416 382
                                    


Alex:

Cuando desperté y me di cuenta que estaba apoyando mi cabeza en las piernas de Frank, traté de levantarme sin despertarlo. Rompí un bloque del techo de la choza y vi que era de día, rompí otros dos bloques pero esta vez de la pared y salí, me hice un pico de piedra y una espada que de más no estaba y fui a conseguir carbón. Se notaba que Frank ya había estado aquí ya que solo picó la mitad del carbón que había. También hice un horno y conseguí un poco de carne, volví a la choza y vi que Frank seguía durmiendo, puse el horno con un poco de carbón y la carne, cuando ya estaban listas las saqué, eran como una tabla, eran planas pero mordí una parte y entendí que sí eran comida.

-Frank... –Traté de despertarlo con delicadeza- Frank.

-Mm... ¿Alex...? -Comenzó a despertar lentamente, pero en cuando me vio se incorporó rápidamente y me abrazó- ¡Alex! ¡Ay dios mío, estás bien!

-Estoy bien, tranquilo -Reí algo sonrojado. Esperé a que se separara y le entregué la carne asado-, ten, come algo.

-¿Es comida? -La recibió lentamente algo confundido

-Sí, yo ya comí, sólo muérdelo -Intenté explicarle.

Él la mordió con algo de desconfianza, pero al rato le encontró el sabor a carne y se la siguió comiendo. Mientras comía, me quedé observándolo, su skin negra y verde que él ocupaba en el juego, ahora era su ropa, se veía muy bien.

-¿Sabes lo tierno que te ves vestido así? -Dije algo tímido.

-¿Sabes lo sexy que te ves vestido así? –Soltó él.

Al principio no le entendí, pero luego me miré y me di cuenta de que estaba en ropa interior en frente a Frank y me sonrojé violentamente. En ese momento realmente odié ese momento en el que decidí que mi skin llevase sólo un bóxer azul y un casco de Star Wars.

-Ya, deja de mirarme -Dije algo avergonzado.

-Y te ves tierno sonrojado –Sonrió, siempre había sido muy coqueto, sobre todo conmigo.

-Deberíamos ir a explorar, a ver si encontramos alguna aldea, quizás nos puedan decir qué sucedió con nosotros -Sugerí, intentando cambiando de tema.

-De acuerdo pequeño, vamos –Rió, poniéndose de pie.

Tomamos todo lo que teníamos, yo me puse mi casco y él el suyo y nos fuimos. Caminamos un largo rato, noté que Frank a veces miraba mis heridas con preocupación. De pronto, a él le llegó una flecha en el brazo izquierdo, haciéndolo sangrar un poco, vimos que en el río estaba flotando un esqueleto, Frank iba a sacar su espada de madera, pero yo me le adelanté, sacando mi espada de piedra, y corriendo me aventé al río.

-¡Alex, no! –Gritó Frank con su mano en su brazo, aún con la flecha enterrada.

Comencé a golpear una y otra vez al arquero hasta matarlo, me disparó un par de flechas en el estomago pero me las iba quitando enseguida para no preocupar a Frank, vi que soltó unas flechas pero se hundieron, me sumergí y las tomé, apenas salí Frank me abrazó, sacándome del agua.

-¡Alex! ¡No hagas eso! ¡Me asustaste! -Exclamó.

-Que estoy bien, tranquilo -Intenté tranquilizarlo-, suéltame, que te estoy mojando.

-No me importa eso, me importas tú –Dijo con seguridad. Yo sólo me sonrojé.

-Frank, déjame ver tu brazo -Cambié de tema, preocupado también por él.

Me soltó y extendió su brazo hacia mí, su sangre estaba escurriendo, tomé la lana que había agarrado antes, le saqué la flecha con cuidado y limpié su sangre, cuando terminé besé su herida y amarré la lana a su brazo como si fuera una venda.

¿Desea insertar realidad? | STAXXBYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora