C A P Í T U L O 6

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Narra chunji;
Desperté, y la cabeza me dolía tanto que podía explotarme, tenía puesta aún la ropa de ayer, aunque mi camisa estaba desabotonada, no recordaba nada.
Lo más probable sería que mi primo me haya traído como siempre.
Me di una ducha ya que apestaba a alcohol, no lograba recordar absolutamente nada.
Al salir vi la hora y ya era medio día del domingo, afortunadamente hoy no tenía que ir a la oficina, así que me dispuse a ir a la cocina a preparar algo ya que estaba hambriento, pude observar a ala señora Kang quien era quien me ayudaba de vez en cuando en los deberes del hogar.

-¡Oh! Chan Hee, por fin despiertas, tu siempre de fiesta no cambias- decía mientras se concentra en mover la sopa que preparaba y Meneando la cabeza con expresión molesta.

-Sra. Kang, ya sabe que eso es lo mio, le prometo que es una de las últimas veces- dije mientras abría el refri para servirme algo de jugó.

-Lo dudó mucho, incluso sigues trayendo mujeres a la casa, esta mañana al llegar me tope con ella.

-¿con ella?

-cielo santo, ni eso recuerdas,era una joven de tu edad algo bajita, cabello castaño muy largo parecía muy linda, me sorprende que ella te siguiera, ya que lucía descente.

-¿Que? ¿ella durmió aquí? ¿que hicimos??

-Ay hijo si tu no sabes yo menos.

¿Que paso? por más que quería recordar nada venia mi mente ¿tanto tome? aunque sin duda lo sabría mañana.

***

-así que dormiste ahí, debiste llamarme para ir por ti.

-Lo se unnie, pero me sentía cansada y sólo me quede dormida en el sofá, además, eso es lo que mi papá cree que fuiste por mi y que dormí en tu departamento.

-Lo se, y tambien que te quedaras 3 dias conmigo..pero no bebiste ¿verdad?

-No te preocupes, no lo hice.

-Una copa no esta mal, pero recuerda que demasiado alcohol, es malo para ti.

-Lo se,lo se, yo se cuidarme- la mire sonriendo -¿esta bien que estés aquí?, deberías estar en tu puesto- dije ya que estábamos en el hopital que ella trabajaba.

-No te preocupes es mi hora de comida, igual tu ya deberías estar en...

-Lo se- dije seria - iré en cuanto termine.

-De acuerdo,se que odias hablar de eso... pero este otro tema si no lo evitaras, tu compromiso se hará público en unos días..aún puedes arrepentirte sabes.

-No lo haré, estoy decida a hacerlo, se que no es la mejor manera de hacer las cosas,pero ya tome mi decisión, y esperó que lo comprendas, tu mas que nadie sabe porque lo hago, así que me gustaría que ya no hablemos sobre esto.

- entiendo- me dijo con una sonrisa forzada.

-Chae Won, cambiando de tema..... se que esto ya es abusar, porque has echó mucho por mi, pero podrías usar tus influencias de médico y ayudarme a encontrar datos de aquella mujer que conocí hace 12 años.

-Es cierto, aún buscas al dueño de la carta, claro que te ayudaré, haré lo que pueda.

El dueño de esa carta...no pude evitar recordar;
Cuando tenía 10 años fuimos de vacaciones a un pequeño pueblo alejado de la ciudad, mi padre tenía una casa ahi.
Un dia antes de regresar a la ciudad, mientras jugaba con Chae Won en el río, me subí a una roca y caí, me fracture un pie y lastime mi cuello por lo que tuve que permanecer un tiempo en el hospital, el doctor recomendó no moverme de ahí, así que mi padre no muy convencido regreso a la ciudad con mi unnie ya que el no podía abandonar el trabajo y yo permanecí aproximadamente un mes en aquel hospital al cuidado de una enfermera que contrato mi padre, lo cual al principio no me gusto pero con los días me hice amiga de muchos pacientes, entre ellos una señora muy hermosa con el cabello negro y corto hasta los hombros que siempre permanecía en su habitación ya que no podía salir de ahi, La enfermera me llevaba todos los dias a verla y aquella amable mujer me leía libros y contaba historias "Me recuerdas a mi hijo, el es de tu edad" solía decirme. En un mueblecito de su habitación había una foto donde ella lucía muy joven y a su lado un pequeño niño de 2 años, "en esa foto el aún era pequeño, quisiera verlo una última vez"...y lágrimas caían de sus ojos.
Ella siempre hablaba de su hijo, tanto que quería conocerlo.
Aquella mujer estaba muy enferma y había veces que no me dejaban entrar a verla, en una ocasión alcance a ver que le ponían una máscara de oxígeno.
Una noche fui a verla antes de ir a dormir ya que al día siguiente yo dejaría el hospital y mi padre vendría por mi, ella me entregó una carta y me dijo "Me gustaría que se la entregaras a mi hijo iras a la ciudad y seguro lo verás" ella estaba a punto de decirme donde encontrarlo cuando le empezó a faltar el aire y la enfermera entró y me sacó "hablaras con ella mañana" dijo, pero no fue así, al día siguiente fui a verla y su cama estaba vacía y la foto en aquel mueblecito ya no estaba...."falleció en la madrugada " dijo la enfermera a mi padre, yo no pude evitar llorar.
Regrese a la ciudad sin saber a quien entregar la carta, siempre pedí datos en aquel hospital pero me dijeron que era información confidencial y ni siquiera sabía el nombre del dueño y en la carta no había nombre.
Desde entonces la conservó.

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