— I..... I...... I..... Irina, es...... es...... es...... espérame por favor, por favor, espérame, no te vayás—
— Supongo que vos, ahora, estarás felíz, por lo que vos hiciste— Manifestó con un tono de voz de fastidiado, mientras que Él, se estaba yendo de aquellos pasillos, hacia la recámara de sus nuevas compañeras.
— Sisi por supuesto, yo estoy muy felíz, muy contenta, por el cometido que tanto, vos como yo mismo hicimos, y Además, celebro por esto y por sobre todo, por lo que te va a venir a vos, mi hombre jajajajajaja—
— Irina, déjamelo, de que yo te lo explique, lo que vos viste, no es lo que vos pensás—
— ¡¡¡¡¡Ay!!!!! ¡¡¡¡Ay!!!!!!, ¿Y Entonces, qué yo tengo que pensar? ¿Eh?, ¿Qué Acaso, vos le observaste algo a Ella, o de que algo se le pudiera haber caído, roto a tu nueva noviecita? ¿Eh?, Explicámelo Alejo, a ver, si sos tan valiente y tan hombre—
¿Sabés qué, Alejo?, mejor ahórrate en tus peleas y en tus palabras, porque yo, en este preciso instante, lamento mucho por mis compañeras, pero vos, no me dejás otra opción, que y...... y....... y.... yo, me tenga que ir de, la casa de nuestro salvador— Habló lo primero con un tono de voz de encolerizada y lo último sollozando, más desgaramente, con un tono de voz de decidida.
