- Señor Irvergliettio ¿Quiere que lo ayudemos con esa chica?- Preguntó con un tono de voz de recio, uno de sus hombres de confianza.
La mirada de enfurecido y a su vez de austero, lo hacía parecer más casi como si fuera una especie de halcón.
- ¿Y Qué te parece? ¡¡¡andá a buscar las sogas por favor!!!!!-Ordenó con un tono de voz de furioso.
-Sí señor por supuesto, ahí voy ¡¡¡¡ahí voy!!!!- Contestó con un tono de voz de aterrorizado mientras que uno de sus jóvenes hombres, iba corriendo lo más fugazmente que podía hacia aquel fierro oxidado, en el cuál estaba colgadas aquellas sogas blancas, hacia no muy pocos metros de altura.
- ¡¡¡Ramiro!!! ¡¡¡¡Ramiro!!!!, ¡¡¡¡vení a ayudarme con esta chica!!!!, ¡¡¡¡vamos!!! ¡¡¡¡¡vamos!!!!!! ¡¡¡¡vamos!!!!! ¡¡¡¡¡¡vamos inepto!!!, ¡¡¡móvete!!!- exigió con su tono de voz de mandón, mientras que Él veía como el efecto de aquel líquido que el jefe de la banda de los secuestros, se estaba yendo en aquel cuerpo de la jóven dama.
¡¡¡¡¡¡¡¡¡R-A-M-I-R-O!!!!!! ¡¡¡¡¡¡¡R-A-M-I-R-O!!!!!, ¡¡¡¡¡vamos!!!! ¡¡¡¡¡¡¡vení inútil!!!!- Pidió nuevamente a gritos, mientras observaba hacia su nueva díscipula, como abría sus ojos lentamente.
-¡¡¡¡Grioldriok Apresúrate!!!, ¡¡¡¡vamos!!! ¡¡¡¡¡¡vamos!!!!!, ¡¡¡¡¡tráe las sogas!!!!- reclamó con un tono de voz de sulfurado.
En Esos Precisos Minutos, en los cuáles la jóven novicia de a poco se abría sus ojos, De Repente y sin saber como pudo haber sido atada a aquella jamuga de madera.
¡¡¡Ay!! ¡¡Ay mi cabeza!! ¿Dónde estoy? ¿Por qué estoy atada a esta silla? ¿Quiénes son ustedes? ¿Qué quieren de mí?, Serán mejor de que ustedes me suelten, porque De Lo Contrario me van a conocer y créanme que no les va a convenir tenerme como enemiga-
- Jajajajajaja, Jajajajajaja, Jajajajajaja ¡¡Ay chiquita!! ¡¡chiquita!!, no te conviene hablar con ese tono de voz de inmodesta, ya que si vos seguís comportándome y hablándonos con ese mismo tono de voz que vos tenés y te dirijís hacia nosotros, Deplorablemente vamos a tener que hacerte a vos el primer proceso de iniciación hacia nuestro nuevo grupo y créme, no va a ser muy lindo, de lo que te voy a pedir en estos próximos días que pasen-
¿un nuevo Proceso de entablación? ¿una nueva camada? ¿Qué iban o mejor dicho, Qué me querían comenzar a hacer, para poder estar en su grupo aquellos señores?, eran varias las preguntas que yo me hacía, dentro de mi cabeza, mientras que yo veía, bien amarrada las sogas hacia mi cuerpo y hacia aquella silla de madera, en aquel galpón, como aquella mini oscuridad que se estaba yendo por aquellos rayos de sol que iluminaban y traspasaban algunas de las cortinas turquesas rotas en forma de pequeñitos circulitos, mientras que yo, aún miraba como uno de aquellos hombres, vestidos con traje negro y con un sombro marrón oscuro que tenía cada uno de los secuestradores, sonreían, fumaban y dirijían sus miradas hacia mí, cruzados de brazos, con una suave sonrisa perversa desde un extremo del lado hasta el otro lado de sus bocas.
En Esos Precisos Minutos, en los cuáles yo sentía que aquellas miradas que me estaban incomodando un poco, De Pronto yo comencé de nuevo a oír con mi esquizofrenia, a aquellas voces de la otra dimensión que se me venían encima hacia mi cara.
-Sos una mala compañera, una muy mala persona, vos sos una ¡¡¡¡¡L-O-C-A!!!! ¡¡¡¡L-O-C-A!!!!, ¡¡¡A-S-E-S-I-N-A!!!! ¡¡¡¡A-S-E-S-I-N-A!!!! ¡¡¡¡¡¡¡¡¡A-S-E-S-I-N-A!!!, ¡¡¡¡¡vos sos una loquita!!!!! vos en este preciso momento, deberías estar en la prisión, pudriéndote como si fueras un sapo, vos mataste a miles de personas inocentes, en las cuales no te hicieron y nunca te molestaron en tu vida, pero ¿Vos Sabés de lo que te va pasar a vos Orlidea?, ahora vos, con tú misma sangre y con tú mismo cuerpo, vas a pagar cada muerte, cada fallecimiento que vos le hiciste a esas personas- Certificó con un tono de voz el fantasma de la hemana Cecilia, mientras que el espectro de la jóven ex novicia le quitaba violentamente el velo que tenía encima de su cabeza hacia un costado, para poder posteriormente, jalarle con sus ambas manos, la larga cabellera rizada morena que posseía su ex compañera de dogma.
- No es cierto de lo que ustedes me están diciendo a mí, no es verdad, ¡¡¡ustedes no existen!!! ¡¡¡ustedes no existen!!! ¡¡¡ustedes son un producto de mi imaginación!!!, sisisi debe ser eso mismo, debe ser ese factor, quien me está haciendo escuchar voces y verlas, yo no estoy loca no no no no no, ni tampoco soy una asesina como ustedes piensan y me dicen, no no no no no, yo soy una buena persona, soy una muy buena compañera- negó lo primero con un tono de voz de nerviosamente y lo último con un tono de voz casi de sacada.
- ¡¡¡¡No mientás!!!! ¡¡¡¡No mientás Asesina!!!, vos sos una psicópata, vos sos una persona que tendría que estar en un loquero y no en el recinto de nuestro redentor señor-
- ¡¡¡¡¡¡¡B-A-S-T-A!!!!! ¡¡¡¡B-A-S-T-A!!!!! ¡¡¡¡¡¡B-A-S-T-A!!!!!! ¡¡¡¡Cállense todos ustedes!!!!!! ¡¡¡¡Cállense todos ustedes, no es verdad, todos ustedes están equivocados!!!! ¡¡¡¡¡Todos ustedes están mintiendo!!!!- exortó casi asófnica con un tono de voz casi de demencia.
- Está chica, está jóven ¡¡¡me gusta!!!!, ¡¡¡me gusta como tiene esa actitud de loca, de desquiciada!!!, la verdad, creo que en esto años que yo llevo escogiendo a mis nuevos discípulos y díscipulas, me parece que este año, mi rifle dió en su blanco justo- contestó lo primero con un tono de voz de gratificado y lo último con un tono de voz de riguroso, mientras sacaba por uno de sus bolsillo que tenía en su saco, uno de sus cigarrillos con su encendedor para comenzar a aspirar y a espirar su cerilla.
- mmmm, no sé Samuel si te conviene tener a esta chica, Además fíjate- Dijó con un tono de voz de dudoso, mientras que una de sus manos derechas, le señalaba hacia la jóven señorita que no dejaba ni de gritar ni de exclamar enloquecidamente, enajenardamente.
La mirada de airado, lo hacia cada vez casi más sádico.
- Vos, métete en tus asuntos Grioldriok, porque yo se muy bien, a quién contrato, porque la contrato o los contrato y con que fín ¿eh?- Respondió dándole una fuerte palmada con su mano derecha hacia el hombro izquierdo, mientras que el mandamás se marchaba serenamente hacia el fondo de aquel lugar, para poder darle comienzo a sus nuevas misiones.
- Usted vaya tranquilito mi señor, porque en tan solo y en tan pocos días, yo mismo, me voy a encargar muy bien de este sitio y de su nueva presa- desternillaba cada vez elevando, sus carcajadas hacia todo aquel lugar.
