•●◇ Del otro lado ◇●• | Dylan O'Brien & Tú |

S. Temporada♡ Capítulo 20.

9 meses después...

—No mamá. Claro que estoy acostada, esta panza no me deja ni moverme... Si, él está aquí... No pero... ¡Mamá! Ya no me grites... Ok, de acuerdo... ¿Las chicas? Están en la sala durmiendo... Basta mamá, me haces reír... Sí está bien, luego te llamo... Bien, nos vemos mamita... Adiós.

Suspiré y dejé el teléfono en la mesa de luz. Mamá ha estado muy nerviosa este último tiempo, mi embarazo avanzó y faltaba poco para conocer a mi bebé... Nuestro bebé. Acaricié mi estómago hinchado y sonreí con los ojos cerrados, sintiendo aquellas pataditas que indicaban que ahí dentro estaba el ser más importante para mí, al que cuidaría con mi vida y le daría todo mi amor.

Unos labios se apoyaron en los míos y abrí los ojos asustada. Me tranquilice cuando lo vi frente a mí, sonriendo y con una bolsa en la mano.

—Hola mi amor —susurré.

—Hola linda —contestó él y acarició mi panza—. ¿Cómo amaneciste?

—Con una llamada de mi madre —rió y se acostó a mi lado, abrazándome.

—¿Sigue paranoica?

—Está nerviosa. El bebé podría nacer en esta semana y ella es un manojo de nervios.

—Yo también estoy nervioso, amor, pero me refería a que si sigue nerviosa por lo que pasó hace tiempo... tú sabes...

Lo miré seria, sabiendo a lo que se refería.

—¿Por qué regresas el tiempo atrás, Dylan?

—Porque aún me sigue costando entender cómo todo se volvió tan loco de repente...

Fue como mi cerebro se desconectara del tiempo en el que estaba y mi mente viajó hasta ese momento, recordando todo como si fuera ayer...

♡

Dylan se colocó frente a mí justo en el momento en que Britt apretaba el gatillo, a la vez que también los policías. Nadie se movía, ni siquiera podía oír mi propia respiración. Mis manos temblorosas abrazaron el cuerpo de Dylan.

—¿Dylan? —le pregunté asustada. No me respondía, mi cabeza estaba apoyada contra su espalda y no notaba señales de vida. Hasta que sus manos cubrieron las mías y respiré aliviada.

—Tyler... —susurró él y entonces lo solté y me puse a su lado. Cubrí mi boca mientras sollozaba.

Tyler estaba en los brazos de Dylan, con un balazo en el estómago. Levanté la vista y Britt yacía en el piso, con un balazo en el medio de la cabeza.

—Aquí la Policía Federal de Atlanta, necesitamos una ambulancia rápido. Tenemos un herido —escuché que decían por el walkie-tokie.

Dylan se arrodilló en el piso con Tyler entre sus brazos. Me arrodillé a su lado y las lágrimas no tardaron en aparecer.

—Ty... ¿Por qué me hiciste esto, Ty? —susurró Dylan, con la voz entrecortada.

—Yo... Yo siempre los protegí, desde un principio... —tosió y sus manos buscaron las mías. Se las di y las apretó fuertemente—. _______, todo lo que te dije era mentira... Yo nunca podría odiar a mi mejor amigo y... mucho menos... a ti...

—Shh, Tyler, no hables —susurré, acariciando su cabello. Mi corazón se rompía al igual que mi alma.

—No, déjame terminar. Britt quería matarte a ti amiga, hacerte pagar por... por su "sufrimiento". Le dije que la única manera de... de herirte es tocando tu punto débil... Y ése es Dylan... —las lágrimas caían como cataratas. Sus manos apretaban fuertemente las mías, temblando—, y le sugerí secuestrarlo pero... no pensé que ella realmente quería matarlo... Perdóname _______, yo.... los amo a ambos...

—Te perdono Ty... Claro que te perdono —respondí entre llanto, tratando de hacerle una sonrisa, pero fue más una mueca que otra cosa.

Tyler me sonrió y elevó sus ojos hasta la cara de su mejor amigo. Dylan tenía una mano en su herida y con la otra, sostenía la cabeza de Tyler.

—Dyl, hermano... todo lo que te dije... es mentira. Yo te amo, eres... eres el mejor amigo que alguien pudiera pedir... Y lo lamento... Perdóname p-por todo esto...

—También te perdono Ty... Pero estarás bien, sé que vas a estarlo. Así que no te atrevas a despedirte de mí Tyler, no te atrevas...

Empezó a respirar rápidamente y justo en ese momento llegó la ambulacia. Empecé a llorar de alegría al ver que tal vez podría salvarse. Tyler tomó las manos de Dylan y nunca dejó de verlo. Lo subieron a la camilla y cerraron las puertas, sin dejarnos acompañarlos hasta el hospital. Al instante la ambulancia salió disparada y yo me quedé con Dylan. 

Él me miró y yo corrí a abrazarlo. Mis manos aún temblaban y me costaba respirar debido al llanto. Mi vista se empezó a nublar y todo a mi alrededor empezaba a girar.

—Va a estar bien, sé que lo estará —fue lo que me dijo antes de que caiga desmayada.

♡

—¡______!

Parpadeé, volviendo al presente. Levanté la cabeza y Dylan me miraba confundido.

—¿Estás bien? No me respondías y estas temblando.

—Yo... Sí, sólo que recordaba cuando se llevaban a Tyler y nosotros no supimos nada de él hasta... —los brazos de Dylan me rodearon fuertemente, haciéndome sentir segura.

—No pienses más en ello. Sé que fue un momento duro, pero pudimos salir adelante. Y así va a ser con todos los que vendrán, porque nunca te dejaré sola y porque eres con quien voy a pasar el resto de mi vida, hasta que dé el último respiro. Y cuando me vaya, te estaré esperando del otro lado, para que nuestras almas estén juntas eternamente.

—Te amo Dylan —susurré mirándolo.

—Te amo, ______ —contestó juntando nuestros labios.

Un fuerte dolor en la parte baja de mi abdomen me hizo sentarme en la cama. Se sentía como si alguien quisiera salir por mi cuerpo a toda costa. Grité y me doblé hacia adelante, apretando en el dolor para que mitigue, pero nada de eso pasó. Al contrario, el dolor se intensificó.

—¡¿Qué pasa, amor?! —gritó Dylan, mirándome asustado.

—Tengo contracciones. El bebé ya viene Dylan... —alcancé a decir antes de empezar a gritar como loca. Él me miró asustado y abrió la puerta del cuarto.

  —¡TYLER ENCIENDE EL AUTO! ¡TU SOBRINO VA A NACER!