Tentación 2 (Larry Stylinson)

Capítulo 49: "Entrega de premios Parte IV" (Zayn)

Cuando nombraron su serie. Casi me muero del infarto.
Miré hacia donde enfocaban y allí estaba ella. ¿Ella? ¿Era Cris? No podía ser. ¿La del vestido rojo, ajustadísimo, con un escote y una abertura en la pierna, era ella? Pasó caminando como una auténtica modelo. Y con la cabeza bien alta.
Cuando subió al escenario y comenzó a hablar, dudé de que fuese ella. Cris no hablaba así. ¿Dónde estaba el "burchao" "camelao" y toda esa jerga?


-Buenas noches a todos. Estoy aun en medio de un sueño. No puedo creer que hayamos ganado el premio. Hace muy poco yo estaba en España estudiando y ahora me encuentro aquí, ante todos ustedes. Quiero agradecer esta oportunidad que me brindó esta cadena.-así no hablaba Cris ni en borma.- Y agradecer la ayuda de mi compañero Derek, sin el cual yo no haría mi trabajo ni la mitad de bien.- miró al chico y le sonrió.

¿Qué eran tantas confianzas con ese tío?
Luego habló el chaval, y no le escuché. No me interesaba. Lo que si me interesó y demasiado fue lo que dijo Cris después.

-Un segundo.- volvió a sostener el micrófono ella.- Quiero decir a una persona que hay en esta sala, que he vuelto. Que se prepare para volver a los "buenos momentos".

No se si fue química, si fue la tensión de llevar tanto tiempo a pan y agua o que, pero mi amiguito, es decir, me excité. Además el hecho de que estuviese ayudando a Liese a intentar curarse, o sea siempre empezábamos pero nunca terminábamos.
Me levanté y salí de allí. Me metí en uno de los baños. Apoyado contra la puerta, respiré profundamente.
Tenía que calmarme.
Pero desde el baño particular escuché como alguien abría la puerta.

-¿Zayn?-preguntó su voz.

Dudé si contestar o no.

-¿Zayn estás aquí?-insistió.

Escuché como la puerta volvía a cerrarse pero antes de que se cerrase del todo salí, la sujeté por la muñeca, la arrastré conmigo dentro de nuevo y cerré la puerta con pestillo.
La empotré contra la pared, en aquel diminuto espacio y comencé a besarla. No aguantaba más. Necesitaba hacerlo.
Mordí su barbilla antes de bajar por su cuello. Ella jadeaba y me miraba confundida, pero no paré. Continué subiéndole el vestido hasta ver su ombligo. Me agaché y le besé el vientre. Volví a levantarme mientras mi mano entraba bajo la tela del vestido y le acariciaba el pecho. Lentamente la trasladé a su espalda y la apreté contra mí.
Me separé unos centímetros para bajar su tirante y comenzar a besar y lamer uno de sus pechos.
Ella se mordía los labios para no gemir.

-¿Qué...Qué....haces?- dijo con gran esfuerzo.
-Voy a follarte.- fui sincero. No me corté ni un pelo.
-No
-Si.-sentencié.

Mi mano resbaló hasta su culo y subió su pierna para que rodease mi cintura.

-No -repitió al tiempo que forcejeaba.
-¡Si Liese!-grité.

Paró de forcejear. Dejó caer sus brazos y se quedó mirando al techo mientras yo continuaba besándola entera. Luego, sin pensarlo dos veces saqué mi miembro con la intención de penetrarla pero para mi sorpresa me empujó con toda su fuerza y me pegó una torta.
Estaba a punto de ponerse a llorar, y temblaba. Y se estaba ahogando. Le había comenzado a dar un ataque. Intenté decir algo pero se bajó el vestido, abrió la puerta y salió corriendo.

-¡Liese!-grité. Pero era demasiado tarde, ya se había marchado.
-¡Mierda!-grité golpeando la pared.

Me miré, menuda pinta. Con mi "masculinidad" asomando por los pantalones y solo en el baño. Fui a cerrar la puerta pero un pié se interpuso y no pude.
Eran unos zapatos de mujer preciosos. Y la pierna...cuando miré arriba me encontré con la cara sonriente del que iba a ser mi gran problema.

-Veo que me estabas esperando to cachondo ya eh.- entrecerró los ojos mirando mi pene.

Corriendo intenté taparme pero ella me empujó y entró al baño conmigo. Ahora estaba en la misma situación que hacía unos minutos pero en vez de con mi novia, con mi ex novia.

-Cris...
-Te he echado de menos -pasó su lengua por mis labios. – Voy a darte lo que no te di cuando me fui -los mordisqueó y se lanzó de pleno a besarme.

Me besó con tanto ardor, con tantas ganas. Me quería comer. Y entre que hacía tiempo que no tenía sexo, que mi novia me acababa de dejar con las ganas y de que tenía allí metiéndome mano la chica con la que mejores polvos había tenido. Pues la "fiesta" se animó de golpe.
La abracé y le devolví los besos. Ella se reía al mismo tiempo. Metió su mano en mis pantalones y comenzó a tocarme el culo. Eso me puso a cien.
Luego con la otra, se dedicó a masturbarme. Yo me dejaba llevar. Oleadas de placer me mareaban. Lamí su garganta mientras ella continuaba.
Y de repente...

-Zayn, ¿sigues aquí?-musitó mi chica.

La sangre que tenía acumulada en mi sexo desapareció para ir directa a mi corazón y provocarme una taquicardia.
Como un auto reflejo alcé a Cris poniéndola sobre el retrete para que Liese no la viera, y le tapé la boca.

-Si, si, aquí estoy -contesté.

Cris me miraba sorprendida. Supongo que alucinaría.

-Lo siento ¿podemos hablar?
-Ahora no Liese, no es el momento.
-Volveré a la mesa con los demás. Solo quería decirte que he podido controlar el ataque, que creo que poco a poco voy mejorando. Solo eso. Te espero allí.
-Vale.

Me sentí fatal. Mi novia pasando por una crisis de ansiedad mientras yo solo pensaba en mi mismo.
Cuando escuché la puerta cerrarse, dejé a Cris en el suelo.

-Lo siento -dije.
-¿Quién coño era?
-Mi... bueno, mi novia -admití.
-¿Tú qué? ¿Novia? ¿Tienes novia?
-Si.
-Pues menos mal chato. ¿Y dejas que te la casquen teniendo novia?
-Es que yo no quería

Enarcó una ceja.

-Vale, si quería, pero no por el hecho de querer ponerle los cuernos. Era por que estoy en una situación algo rara
-Explícamela.
-No, ahora no. Mejor que vuelva. Me están esperando y a ti también.- comenté.
-En fin- miró por debajo de mi cintura- Ya se ha echado todo a perder, así que si, volvamos. Pero tenemos una charla pendiente. Llámame.- me hizo una perdida desde su nuevo móvil.
-Ei, si tenías mi número, ¿por qué nunca me has llamado?
-Ya te lo explicaré. Ahora no.

Me dio un pico y se marchó.

Me lavé las manos y la cara y tras vestirme bien regresé a las mesa.
Se me quedó cara de gilipollas cuando vi a Cris hablando con Liese ante la mirada atónita de los del grupo.

-¡Zayn no me dijiste que la conocías! –exclamó entusiasmada Liese.
-¿A no?
-Bueno, aquí tienes el autógrafo Elisita. –dijo Cris con una mega sonrisa mas que falsa.
-Me llamo Liese -la corrigió mi niña.
-Si, si. Lo que digas Elisita. Yo me voy a mi mesa. Ya nos veremos. –se despidió y se fue.

¿Qué debía hacer ante aquello?