Por unos segundos me creí aquello. Pero fueron eso, segundos.
-No te creo. Ya no llevo esa venda Irene. Se que el niño es mío. No necesito que nadie me lo diga. Lo siento.
-Pues te equivocas. Te digo que no es tuyo.
-Lo es.
-No.
-Bien, hagamos las pruebas de paternidad.-propuse
Me miró de golpe. La había pillado. No tenía salida. O eso pensé.
-De acuerdo. Pero cuando nazca. Ahora no pienso poner en riesgo la vida de mi bebé por eso.
-Vale. En cuanto nazca quiero un ADN.
-Vale. ¿Me puedo ir ya?
Dudé. Pero me había fijado que su mano masajeaba la tripa desde hacia unos minutos, y el entrecejo lo tenía fruncido. Mi hijito le estaba haciendo daño de nuevo.
Preferí no forzar más la situación.
-Si. Puedes irte.-afirmé.
Abrí la puerta y cuando llegó a mi lado me interpuse, quedando nuestros cuerpos a escasos centímetros.
Antes de que pudiese hablar puse mi dedo índice en sus labios y la mano libre la pasé por su barriga.
Por primera vez lo noté. Y las ganas de llorar volvieron. Pero de emoción. De felicidad. Notaba como esa pequeña personita se hacía notar.
-¿Duele mucho no?-pregunté.
Se había quedado como en shock, pero respondió.
-Si
-Le gustará tocar la batería. Por eso da tantos golpes.
Una sonrisita tímida asomó en su boca.
- Te echo de menos. Te quiero. Te necesito. Irene, sin ti nada tiene sentido, sin vosotros. Sois lo mejor que me ha pasado en la vida y os voy a recuperar como sea.
No le di tiempo a reaccionar. Aparté mi dedo índice y acerqué mis labios a los suyos. A penas los rocé. Levemente. Solo quería que me sintiese. Que me recordase.
Si le besaba en serio se asustaría, me pegaría y saldría corriendo. Perdería cualquier oportunidad de recuperarla. Pero no. Esta vez iba a hacer las cosas bien.
Me aparté y dejé el paso libre.
No dijo nada. Solo se marchó a paso ligero.
******* IRENE *******
En el momento que los labios de Niall rozaron los míos el bebé se calmó. Como una reacción química. No se, pero dejó de moverse y causarme ese dolor que llevaba un par de semanas soportando.
Deseé que me besara. Volver a sentir aquello. A mi Niall.
Era muy egoísta lo que pensaba, por que primero, estaba con Pedro, y segundo, sabía que después de que me besara le tendría que pegar para guardar las apariencias. Pero no pude evitar desearlo.
A los escasos segundos se separó de mí y abrió por completo la puerta. Reaccioné y salí casi corriendo de allí.
Al pasar por el lado de Louis, que esperaba sentado fuera, vi como me miraba con miedo.
No estaba enfadada con él. No podía. Pero merecía que le castigase un poco por la mentira. Así que le hice un gesto de enfado y me marché.
Al llegar a la calle me di cuenta de lo alterada que estaba porque el pequeñajo volvió a la carga.
No me sentía con fuerzas de caminar hasta encontrar un taxi, así que llamé a Marc.
-Hola enana. ¿Pasa algo?
-Si. ¿Puedes venir a buscarme al hospital?
-¿No estaba Pedro?
-Una larga historia. ¿Vienes o no?
-Claro. En quince minutos estoy allí.
Quince minutos era mucho ¿Y si Niall bajaba? Era lo más probable.
Entré en una cafetería y me pedí una tila. Necesitaba calmarme.
Y entonces las patadas del mini Niall comenzaron de nuevo. ¿Mini Niall? ¿Cómo había podido pensar así? No. No. Estaba mal.
Puse la mano sobre mi vientre.
-Vamos pequeño. Pórtate bien -susurré.
-¿Hablado sola?
Alcé la vista. Marc ya estaba allí.
-Que rápido.
-Estaba cerca. ¿Qué te sucede?
-...
-Tengo tiempo.
-Niall...
-¡¿Dónde?!-se levantó a la defensiva.
-Marc, siéntate. Digo que tiene que ver con él.
Suspiró y se sentó.
-Cuenta.
-Me lo he encontrado en el hospital
-¿Encontrado? ¿Casualmente?-comenzaba a alterarse. Lo sabía por la vena de su cuello.
-Si. No. No se.
-Especifica.
-A ver, yo y Pedro salíamos de la ecografía.
-¿Pedro te dejó sola con Niall? ¡Puto italiano!
-¡No! ¡Pedro no ha hecho nada! Escucha y no me interrumpas por favor. –le amonesté.
-Vale.
-Pues al salir nos encontramos a Louis. Y este me dijo que Darcy se había caido y se había hecho una brecha en la cabeza y que estaba allí en el hospital.
-¡Dios! ¿Cómo está Harry?-preguntó sin pensar.
Abrí mucho los ojos.
-¿Te sigue gustando? ¿Le sigues queriendo?
-No estamos hablando de mí. Perdón, ha sido un lapsus. Sigue.
-No. Marc. Creí que tú, bueno, que lo habías superado. Es más, que odiabas a Harry.
-Y le odio.
-¿Entonces?
-Entonces nada. Háblame del criajo. – dijo refiriéndose a Niall.
No quise insistir por el momento.
-Entré a la habitación que Louis me señaló. Se suponía que allí estaba Natalie Darcy, y Pedro se marchó. Pero allí dentro solo estaba Niall que cerró la puerta y me acorraló.
-Una encerrona.
-Si.
-¿Y? ¿Qué te hizo? ¿Te encuentras bien?
-Tranquilo. Si.
-¿El bebé?
-Bien. Está todo bien. Es más, mejor que bien. Cuando me tocó, todo en mi barriga pareció calmarse.
-¿Cuándo te qué?
-No, quiero decir que le dije que el hijo no es suyo. Pero ahora está convencido que si y me ha pedido un ADN. En fin, cuando me dejó ir, se puso muy cerca de mí y me tocó el vientre. El bebé se calmo al instante. Solo dio una pequeña patadita como dándose a conocer, ha sido raro. Y casi me besa.
Alcé la mirada temerosa de la reacción de mi "hermano", pero me miraba de forma muy tierna.
-¿Le sigues queriendo?-era su turno.
-No.-negué.
-Le sigues queriendo.-afirmó.
-¿Y tú a Harry?-le ataqué.
-No, me da asco.- sonrió.
-A mi también me da asco Niall. Me dio asco cuando me rozó con esos labios tan tiernos, cálidos... –comencé a divagar solita olvidándome de Marc.
-A mi también me daría asco besar la perfecta boca del divo.- me guiñó un ojo.
Los dos nos entendimos. Sabíamos que el sentido de nuestras palabras se hallaba al invertirlas.
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Tentación 2 (Larry Stylinson)
FanficTitulo: Tentación II Explicación: Esta novela es una adaptación del fanfic de una banda (CB) que ya no existe. La adaptación es en versión Larry Stylinson con la única intención que llegue a más personas porque me pareció una historia muy buena ...