No me subestimes, niña...

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-¡Va, me la juego subiré!- Y sí, sin meditarlo demasiado ya estaba subiendo cada escalón a un ritmo lento,al final de las escaleras se hallaba un pasillo, un oscuro y denso pasillo.Caminé despacio tratando de no tropezar, el silencio era desgarrador apenas podía oír a las suelas de mis zapatos chocar contra el piso. No sé a donde rayos se ha ido mi miedo hacia la oscuridad, iba tocando las paredes para encontrar alguna puerta y por suerte la hallé, giré lentamente la perilla y la abrí casi sin haber hecho ruido, encendí la luz al instante.

-Parece ser que ésta es la habitación del idiota de Jeffrey.-Me dije a mi misma.-Esto es un caos...-Entré y cerré la puerta con seguro, así nadie me molestará.La habitación era amplia, tenía un baño privado y también un balcón, maldito sea, el cuarto en el que él me encerró apenas tiene una ventaja. Recorrí la habitación entera revisando cada detalle, excepto su ropa, no meteré mis manos allí ¡Nunca! Hubo algo que enseguida captó mi atención, un libro con una llamativa pasta negra de cuero.-¿Y éste libro qué, será brujería o algo así?- Pensé mientras abría el libro, al principio no tenía índice, ni prólogo, ni nada, al seguir pasando las páginas leí el nombre de Slenderman y a continuación parecía haber una historia, más páginas y leí el nombre de Jeff.-Vaya, debe ser su historia, supongo que puedo leer un poco...-De pronto escuché que alguien subía las escaleras, me alarmé e inmediatamente apagué la luz, quité el seguro de la puerta y como pude me escondí bajo la cama...Estoy jodida y asqueada, estar aquí abajo no es nada cómodo. La puerta se abrió y cerró al instante, los convers negros de Jeffrey se dirigían hacía la cama, dios estoy más que muerta si me descubre, un movimiento en falso y me oirá, se sentó sobre la cama, yo no perdía de vista sus convers, tranquila Ámber, ya verás que pronto se irá, luego vi como sin pena alguna lanzó su sudadera blanca al suelo y se levantó directo hacia su armario. Todo estaba en orden, yo bajo la cama en silencio, y Jeffrey sin sospechar nada, hasta que...-No...NO NO NO.-Pensé desesperada, ya que el jodido polvo me estaba afectando, y provocando lo que sería un estornudo colosal.-Mierda mierda mierda...No estornudes Ámber, no lo hagas.-Mis súplicas hacia mí misma fueron en vano y no aguanté más.-¡Achúuu! ¡Ay, auch!-El tratar de contenerlo fue peor, e hizo que me diera un golpe en la cabeza contra las tablas de la cama...Estoy más que muerta.

-Rico golpe el que te diste...-Se estaba acercando.-Mira Ben, ya haz inten...

- Lo siento ¿Sí?-Dije deslizándome por el piso.

-¡¿Ámber?!

- Agg...Deberías limpiar un poco...-Sacudí el polvo de mi cabello y ropa...-Lo siento Jeffrey - Abrí los ojos como platos al ver su torso...¡MENUDO SIX PACK QUÉ SE CARGA!-Ah, eh...Creo que...Mejor me voy...¡Sí, adiós!

-Hey, quieta...Te dije que tenías prohibido venir a la planta alta...-Éste chico es bipolar ¿o qué? Su actitud era bastante tranquila.

- Sí pero...Quería conocer la casa y Slenderman dijo que por hoy eram...

- Sh, cállate...¿Qué tienes en las manos?

- Ah ¿Dedos?-Dije divertida esbozando una media sonrisa forzada.

Veo que no le causó gracia y se acercó hacia mí, jalando mis brazos haciendo que tire el libro.

-¿Curiosa, no? Vete de aquí.

-Me iré, pero esto se va conmigo.-Recogí el libro.

-Déjalo ahí...

-¡No, ahora viviré con ustedes, y tengo derecho a saber quiénes son!

-¡Dije que lo dejes!

*Narradora*

El chico estaba enfadado, sacó su cuchillo y se lanzó hacía Ámber, por suerte para ella, logró esquivarlo y salió por la puerta hasta llegar al pasillo, como pudo buscó las escaleras, de lo rápido que bajaba casi tropieza un par de veces, se encontraba desesperada y con su corazón a tope, luego revisó el objeto que la había llevado a a actuar de esa manera...Aquel libro, en el cual parecía estar el origen de aquellos seres que tanta curiosidad le causaban, dudó un segundo en lo que iba a hacer, aunque después del alboroto que causó allí arriba supuso que el asesino estaría buscándola con cuchillo en mano. Se planteó dos opciones: Llevar a cabo su objetivo principal que era leer el libro o subir con él, disculparse y aceptar su castigo, recordó entonces lo idiota que fue al invadir su privacidad y lo molesto que él debe estar por eso, Ámber dio un largo suspiro y volvió a subir escalón tras escalón, ahora el miedo la envolvía completa, sabía que lo más probable fuese que Jeffrey saliera de la oscuridad y la atrevesara con su cuchillo, incluso le alivió un poco pensar en que si eso ocurría, acabaría de una vez con su sufrimiento,pero quiso continuar, de nuevo, estaba frente a la puerta que la había llevado a aquella habitación que tantos problemas le causó, dio unos débiles golpes a la puerta y nuevamente su corazón se sobresaltó al ver como ésta se abría.

Sin Piedad《Jeff The Killer》.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora