Su lengua entra en mi boca y busca a la mía. Nos fundimos en un fogoso beso dónde pierdo la noción del tiempo.
—____... —murmuro como puedo entre besos.
—Dime —dice sin dejar de dar besos y pequeños mordiscos en mis labios.
—Estas... no sé si borracha, drogada o que. —Ella, sin hacer caso a lo que le digo, me quita la camiseta.
—Así mejor. —Después de regalarme una gran sonrisa, comienza a besar mi torso. Eres el que está más sobrio de los dos, me digo a mí mismo. No puedo dejar que esto ocurra. ¿Y si en realidad no quiere?
Alzo la vista y ella deja de besar mi torso. Clava su pupila en mi pupila y sonríe. Tiene ese brillo especial en los ojos que tanto me gusta y soy consciente de que no me podré resistir a ella.
—Harry me tienes que decir cuáles son tus sueños salvajes, ¿recuerdas? —Sueños salvajes... si con sueños salvajes se refiere a fantasías tengo muchas, pero ninguna de ellas es liarme con ella cuando no está del todo aquí.
—____, ¿dejamos esto para mañana? —pregunto intentando sonar lo más convincente posible. Es lo último que quiero en este momento, pero debo hacerlo.
—¿Cómo dices? —pregunta mientras lentamente roza mi erección con su mano—. ¿Harry? —insiste comenzando a acariciar mi miembro por encima del pantalón. Suspiro aparatosamente—. ¿Me puedes repetir lo que has dicho?
¡A la mierda! La cojo de la cintura y le doy la vuelta para ponerme encima. Capturo sus labios y sin remordimientos comienzo a jugar con ellos. Doy leves mordiscos al labio inferior de vez en cuando dejándola respirar. Cada vez jadeamos más fuerte y rápido.
—Harry, ¡venga! —me pide mirándome fijamente a los ojos. Yo sonrío de lado de lo preciosa que es. ¿Cómo la he podido encontrar?—. ¿Qué miras? —pregunta ella sacándome de mi cursi trance.
—A ti —susurro en la oreja para después morderle levemente el lóbulo.
Ella gime y se quita la camiseta dejándome ver un sujetador verde de encaje. Sonrío de nuevo y le saco los pechos sin quitárselo. Ahora, no me veo capaz de hacerlo.
Aunque he pasado un tiempo durmiendo, me sigo encontrando terriblemente mareado y con un poco de dolor de cabeza. No quiero ni pensar en mañana.
Comienzo a moldear con mi pulgar sus pechos haciéndola estremecer de placer.
—¿Te gusta? —pregunto melosamente antes de morder uno de sus rosados pezones. Ella suelta un gritito y asiente—. No te he oído... —Le doy otro mordisquito sin hacerle daño mientras clavo mi erección en su sexo.
—¡Sí! —chilla—. ¡Por favor Harry!
Cansada de tantos jueguecitos se sube a horcajadas sobre mí y después de un corto beso en los labios se quita toda la ropa que le quedaba. Eso sí, haciéndome sufrir de lo grande.
Lo hace lenta y morbosamente poniéndome más caliente aún.
—Harry, ¿podrías hacerme tuya de una puta vez? —pregunta con los brazos cruzados apoyando su desnudo sexo en mi erección aún dentro del pantalón. Me estremezco tanto por sus palabras como por lo dicho.
—Luego soy yo el mal hablado —digo guiñándole un ojo mientras me levanto.
—¿Dónde vas? —pregunta mirándome confundida. Yo le saco la lengua.
ESTÁS LEYENDO
Best Song Ever | Harry styles
Fanfiction¿Y si la famosa canción Best Song Ever no fuera solo una canción? ¿Y si está basada en la historia de su autor? ¿Específicamente en la de Harry Styles? -->Trailer en multimedia FINALISTA DE LOS PREMIOS WATTY 2014 ^^ Gracias a tod@s quienes habéi...