Imposible ignorar a Robbinson:

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-¿Qué yo qué? -Mi voz apenas se escuchó.

-Que tú tienes algo que me atrae, que hace que sin apenas conocerte tenga ganas de verte Marta, no sé qué tienes que me volviste loco desde que te vi en aquella ventana. Cuando muerdes ese labio, dios. Podría hacerte de todo y no cansarme. - Lo dijo con la voz tan ronca y entrecortada. En apenas un susurro éste rebotó en mi odio e hizo que sintiera algo extraño en mi interior

— No me digas que son mariposas Drew - dijo mi conciencia. ¿La verdad? No sé qué es esta sensación.

No contesté, me quedé mirándole con los ojos muy abiertos y sin darme cuenta lo volví a hacer, volví a morderme el labio.

-Sí, ese labio.. -Susurró en mis labios.

Nos miramos y sentí que quería besarle, sentía que debía hacer eso, pero sin embargo me quedé mirándole. Estaba tan cómoda haciendo eso y el parecía tan cómodo haciendo lo mismo que nos quedamos así hasta que tocó de nuevo el timbre.

Entraron todos y cuchicheaban de nosotros. Era raro que alguien se quedara dentro de las clases a no ser que o bien, fueran novios que querían intimidad o profesores corrigiendo exámenes. Y no creo que pesaran los segundo. Ángela se acercó a mi y me llevó hasta donde Alex no nos pudiera escuchar.

-¿Estás con él Drew?

-¿Por qué piensas eso? -Dije indiferente.

-Vamos.. sabes perfectamente que si te quedas en clase con un chico a solas es porque hay algo. ¿Sabes que eres ahora mismo la envidia de todas las chicas? -Dijo ella incluso con un tonto más celoso que el anterior.

-No hay nada Ángela, en serio. ¿Yo? ¿La envidia? ¿Por qué? - Solté algo extrañada.

- Porque le gusta a todas las chicas, es el tío más bueno que ha entrado por las puertas del instituto, todas quieren con él y solo lleva dos días aquí. Imagínate.

Justo en ese momento entró Manuel el profesor de Tecnología y me fui a mi sitio en el cual mi compañero no dejaba de mirarme, esto ya se está convirtiendo en una persecución, parecería que estaba intentando saber que pensaba.

Mientras pasaban las clases, no dejábamos de mirarnos y él intentaba buscar algo de contacto físico, yo por alguna razón solo quería besarle, pero no iba a hacer eso, así que le evitaba.

Celia había faltado hoy, estaba "resfriada", pero yo creo que no vino para no ver a Marcos y Brenda juntos. Es algo de lo que hablaría con ella después.
A las 3 tocó el timbre de salida y yo, de nuevo tenía que ir andando, pero Alex salió corriendo de clases buscándome.

- Uf.. Drew como corres. Vamos, te llevo.

- Alex, mejor me voy sola. -Dije intentando tomar distancia ente él y yo.

- Vamos Drew, te llevo. No seas tonta, si no te llevo tendrás que andar todo eso sola. - Dijo mientras con su mano derecha me esperaba aquel casco.

-No. Me voy sola. -Volví a repetir esta vez más fría que antes.

- Es una media hora andando sola por ahí. -Su voz se puso más ronca y se tocó la nuca.

- ¿Y qué tiene? -Dije indiferente.

- Que es peligroso, si te pasara algo.. joder Marta, ponte de una puta vez el casco.

Volvió esa extraña sensación, volví a morder mi labio inconscientemente.

- N.. no. - Me atreví a retarlo.

Todos nos miraban, cuchicheaban, las chicas me miraban con recelo y yo me sentí expuesta. Como si aquello fuese un show y yo la protagonista principal d él. Entonces Alex me agarró y me cargó en su hombro.

Eres mi futuro perfecto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora