"Por eso, y en un solo dia, caerán sobre ella sus plagas: muerte, lamentos y hambre, y quedará consumida por el fuego; pues poderoso es su juez, que es Dios, el señor."
Apocalipsis,18:8Mi mochila estaba siendo arrastrada por las escaleras, trataba de parar la frenética marcha de Jongin, mi brazo dolía por el peso, su auto esperaba afuera.
-¿Por que no me dijiste algo sobre él?- gritaba con un tono quebrado, como si estuviera a punto de llorar.-¿No me vas a responder?-No quería que te preocuparas de más- Sin nada más que decir, me llevó al asiento delantero, una culpa inmensa llenó mi ser.
-Jongin, te amo, no podría engañarte nunca, lo sabes- el solo conducía, no tenía idea de a donde nos dirigíamos, esas fueron mis palabras antes de lagrimas incontrolables, parecía realmente enojado, o tal vez frustrado.
-Ponte el cinturón.
-Nunca haría algo para lastimarte, no quiero que lo malinterpretes-, Sus manos soltaron el volante, llegamos tan lejos pudo conducir, en medio de la nada, en silencio.-No puedo dejarte, nisiquiera sabiendo que te acuestas con él, nisiquiera eres mi tipo, no sé que he visto en ti.
-No puedo explicarlo, pero no es tu culpa, es toda mía, perdoname.
-¿Eres una especie de maldición?, Pensé que el acoso del que me hablaste era exagerado, pero supuse que eras lo bastante cuerdo para no aprovecharte de las personas, ¿Por que lo veías?, sabes que pueden echarlo si quiero. ¿ lo haces para aprovar la materia?
-No queria afectar a nadie, no me aprovecho de nadie, hoy iba a firmar el cambio de aula.
-No quiero que hables, no vuelvas a engañarme así, si dices algo Soo, nunca más me verás de nuevo, solo cierra la boca.
Unos minutos viendo caer la lluvia a nuestro alrededor bastaron para olvidar nuestra cordura, sus labios recorrían mi cuello, estaba sobre mi, no podía respirar, su peso era sofocante, el sonido que salía de mi garganta era abrumador.
-Espera, aún no.
Sus manos estaban ansiosas, su cuerpo pedía a gritos algo que no podía darle, nunca tendrá suficiente, ese deseo iba a destruirlo, escucharlo mencionar mi nombre era estimulante, su cabello estaba desordenado, su semblante era oscuro como la de un vampiro hambriento.-¡Cierra la boca!- me grito con un tono de ira.
En un momento su mano entraba por el resorte de mis pants y su mano me tomaba con totalidad, una sensación de miedo me inundó, no podía creer que mi cuerpo respondiera ante tal violencia, sus ojos me miraban penetrantes ante mi reacción, su mano subía y bajaba despacio, tan pronto un sonido salió de mis labios su boca estaba sobre la mia, sin dejar de estimularme mordía mis labios hasta hacerlos sangrar. - ¡Jongin, basta me duele!- respondí e intenté librarme de su peso, pero era demasiado fuerte para mi, no podía ni mover mis brazos.
Sentía mis labios arder y un sabor metálico me produjo asco, era sangre.
-¿Acaso tu profesor te lo hacía con ternura?- su voz era diferente, era cínica y con dolor.
-Nunca pasó nada, te lo juro, si quieres que te lo explique, lo haré-, suplicaba.
-No tienes que decir nada, nunca más lo repitas, ya no lo verás nunca- me susurraba al oído mientras su mano seguía castigando mi entrepierna- ¿Quieres que pare?
-No-, respondí jadenate, en ese momento sabía que había perdido la batalla.
Jongin solía tocarme como si fuera una extensión de él mismo, no mostraba pudor alguno con su cuerpo, pero yo seguía escondiendo mi barriga cada vez que él me miraba, seguía estando expuesto ante sus ojos. Él manejaba todos nuestros encuentros, siempre íbamos a su ritmo, a su antojo y yo cedía ante todo, era muy emocionante estar expectante a él, por que debía admitir que todo lo que me hacía, lo hacía muy bien, como un novio lo haría, ¿Que estaba pasando ahora?
Me giraba con tal facilidad que no podía resistirme, sus manos abrían mi trasero e introducía sus dedos húmedos, entraba y salía, mis manos sudorosas se sostenían del cuero del asiento, temblaba expectante ante la embestida.
Solía manejarme como un profesional, ajustaba el ritmo a su antojo y yo aguantaba cualquier sonido que pudiera escapar de mi, me sentía aterrado si un gemido salía de mi, no quería darle alguna señal que lo volviera mas loco.
Cuando terminaba siempre se balanceaba un poco más con fuerza hasta salir completamente y abrazarme sudoroso, sus labios me llenaban de besos y me miraba a los ojos para robar todo lo que pudiera de mi, toda señal de sumisión, esta vez evitaba mi mirada.
-Jongin-, mis palabras se perdían en besos.
Siempre empezaba frenético, imparable, mezclando palabras dulces con maldiciones, para terminar con ternura, deslizando sus dedos por mi piel, inspeccionando cada centímetro, siendo cuidadoso al tomarme entre sus manos.
-Dime-,me decía al oído.-¿Que hiciste?- pregunté con una voz débil.
El ambiente era húmedo, me tenía sobre sus piernas, estaba tranquilo por primera vez desde hace meses.
-Sabes lo que ocurre, conoces el efecto que causo, es mi culpa el no haberme alejado lo suficiente- Miraba fijamente mis labios pero no respondió, en todo el camino a casa no me dirigió una sola palabra.Había sido irresponsable de nuestra parte alejarnos tanto, era muy tarde, tenía que preparar la llegada de mis padres.
-No he sido honesto contigo, no debí actuar así- ¿A que se refería?, no me importaba en ese momento, me sentia extraño, solo queria llegar a casa.
Me dejó en la puerta de mi apartamento, yo esperé a que se alejara para abrir la puerta.
-¿Yul bin, estas despierta?, ¿Yul hee?
Entré con mucho cuidado, al menos no iba a preocuparme por una escusa . . .-No hagas ruido, Yul hee está dormida-, mi cara no podía expresar lo que sentía, me había pillado.
-Esta bien, ¿sabes quién dejo el paquete que estaba en la puerta?-, trataba de sonar normal, le mostré una caja que había recogido camino al cuarto.
-No quiero que sigas haciendo esto, si vas a seguir escondiendo a Jongin, ¿al menos podrías ser mas discreto?, no sé como piensas que no nos damos cuenta.
-No le digas nada a mis padres, es muy duro para mi, ellos piensan que estoy a salvo aquí-, me alejé de la mesa, mi pose era suplicante.
-Ellos llamaron esta mañana, su vuelo salió hace dos horas, les dije que estabas muy cansado para contestar-, subía una ceja y cruzaba sus brazos, su expresión altanera de nuevo.
-Gracias, lo resolveré mañana-, no debes preocuparte por mi-, respondí intentando sonar seguro.
-No es necesario que hagas algo por mi, hazlo por respeto propio, los han visto besarse en la biblioteca, resuelve tus asuntos, no puedes exponerte así.Yulbin sabía todo lo que haciamos, su rostro sin maquillaje era dulce, pero el tono de voz desentonaba con esa imagen, mi bola rosada se volvía negra, mis padres lucharon por no verme así, salir con un hombre para ellos era pasional, no creerán que es amor o algo parecido.
-Apaga las luces antes de irte a la cama, no te voy a juzgar, pero piensa bien lo que estás haciendo-, terminó saliendo de la habitación.Otra vez tenía el papel de juez, acostado en la cama intentaba no pensar en esa tarde cuando descubrio que su hermano tenia fotografías mias, cuando ella alertó a sus padres sobre mi situación y como a pesar de eso, al otro día llego a mi casa como si nada, con esa mirada de superioridad esperando que le saludara de vuelta, Yulbin era aterradora si te metías en sus asuntos, o con su hermano.
Hola!!! 😙😘😘😚
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Charming (Encantador)
FanfictionUna historia sobre el acoso, el sentimiento de culpa y una idea errónea sobre el amor. En un principio, el destino jugaba una verdadera importancia en la vida de las personas, cuando era desafortunado formaban una bola de estambre inmensa, sin cuid...