Mierda, mierda, mierda. ¿Qué hago? ¡¿Qué hago?! ¡¿QUÉ HAGO?! Ah, si, el hospital.
—Jude, necesito que hagas algo por mi y no te asustes– le pedí, y este de inmediato asintió. —Tengo que ir al hospital, y necesito que te quedes aquí hasta que George y Ringo vuelvan, y cuando lleguen debes de decirles que fui al hospital ¿De acuerdo?– el niño me miró un poco asustado, y justo en ese momento sentí como el dolor volvía a surgir en mi interior—¿Lo harás, Jude? ¿Puedes hacerlo?— este miró hacia abajo, al piso que cada vez se manchaba más y más con mi sangre—¿Vas a estar bien, tío?— me preguntó Jude, asustado —Solo si haces lo que digo— contesté, sujetándome fuertemente a la mesa, intentando mantener la calma.
—¡Entonces vete ya!- dijo Jude de pronto, bajando de la mesa de un brinco que casi lo hizo perder el equilibrio, sujetó mi mano fuertemente y me ayudó a caminar hacia la puerta, este la abrió con sus pequeñas manitas y siguió ayudándome a caminar hasta llegar al coche, y para ese entonces el dolor ya era algo insoportable —Ten mucho cuidado, tío- me dijo, ayudándome a introducirme al auto.
—No le abras a nadie que no sea George o Ringo ¿De acuerdo?- le dije, pensando que quizá las gruppies quisieran entrar a robarnos algo, Jude asintió con la cabeza y salió corriendo hacia la casa, cerrando la puerta de un azote. Unas lágrimas comenzaron a salir de mis ojos una vez que el niño entró a la casa, producto del dolor, hice un esfuerzo horrible para poder prender mi aston martin y salir disparado rumbo al hospital.
Conforme pasaban los minutos me sentía cada vez peor, mis manos habían comenzado a sudar terriblemente, hasta el punto en el que el volante se me resbalaba. Después vino la temperatura, subió en mi como si de pronto me hubieran prendido fuego, sentía como la ropa holgada se me pegaba más y más al cuerpo y comenzaba a sofocarme, pero no podía pararme a abrir las ventanas, así que seguí conduciendo.
Me salté una enorme cantidad de semáforos, y más de una vez estuve a punto de arrollar a alguien, y cuando menos lo esperé ya iba a la mitad del camino. La vista se me comenzó a nublar, y sentía mi trasero caliente a causa de la sangre, pero no quería saber si me estaba desangrando, tenía que llegar al hospital.
Mis ojos comenzaron a cerrarse lentamente, como si me estuviera quedando dormido, y tuve que concentrarme de una manera sobrenatural para seguir conduciendo. Para cuando llegué a la entrada, mis manos habían comenzado a temblar como si tuviera taquicardia, y todo el asiento de mi aston martin estaba cubierto de sangre. Pero ya no tuve energía para bajar del carro.
Cerré los ojos, a pesar de que quería mantenerlos abiertos, y me dejé caer en el volante.
Lo siguiente que vi fueron muchas luces blancas, que pasaban por mis ojos a una velocidad impresionante, y un claro olor a medicamentos y limpiadores—¡Está abortando! ¡Está abortando!— escuché que alguien gritaba a lo lejos, e inconscientemente llevé mi mano a mi vientre, y volví a desmayarme.
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Porque si creían que les iba a dar respuestas en este capítulo puedo demostrarles lo malvada que soy muahaha. :v
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The little Beatle. [McLennon] [MPREG]
Fiksi Penggemar¿Los hombres se embarazan? Recuerdo haberme preguntado eso en algún momento, pero no recuerdo haber obtenido la respuesta correcta ¿O si?