-De acuerdo -dije yo devolviéndole la sonrisa.
Me pareció ver a Harry agachar la cabeza. No me había fijado bien, pero parecía estar muy serio.
Niall, Harry, Laura, Marta y María subieron a clase, yo me quedé junto a Louis sentada en una camilla.
-¿Te duele mucho? -le pregunté.
El bestia de Rubén le había pegado muy fuerte, tenía un ojo morado y una venda en la frente.
-Me molesta un poco... Pero no me importa mucho la verdad, me han pasado cosas peores.
-Ese Rubén es un salvaje, le expulsarán, ¿no?
-Seguro, ese chico está más tiempo fuera que dentro del instituto, un año sólo asistió dos meses a clase en todo el curso... Y la mayoría de días que asistió seguía expulsado, sólo venía a hacer exámenes.
-¿Cuántos cursos ha repetido?
-Lleva repitiendo desde cuarto de Primaria, ahora está repitiendo segundo de Secundaria, éste es su último año en el instituto.
-¿Y siempre ha sido así?
-Mira Ana... No digas nada de lo que te voy a contar, ¿vale?
-Vale.
-Según me han contado, su padre, cuando perdió su trabajo, se dedicó a robar a la gente, ya que no tenía nada para mantener a su familia. Llegó a un punto de desesperación, que se volvió adicto a las drogas. Entonces nació Rubén. Su padre comenzó a maltratar a su madre y a él, que con sólo 1 año, tenía que soportar grandes palizas. Su madre intentó huir con él, pero el padre les pilló y... Bueno, la madre... -Louis hizo una pausa, no sabía cómo continuar, daba miedo sólo escucharlo -. La policía investigó el caso y acabó apartando a Rubén de su padre y fue ingresado primero en un hospital, ya que tenía heridas por todo el cuerpo, después en un centro de adopción. del padre ya no sé nada, pero supongo que iría a la cárcel, a un manicomio... -otra pausa, Louis estaba muy nervioso, aquélla historia daba escalofríos...- No lo sé.
-Dios... No... No sé... Yo... -no podía decir nada, había subestimado a Rubén, había soportado muchas cosas... y yo encima le insultaba.
-Tranquila, yo me quedé igual. Aún así... Rubén no debería portarse así, da pena ver cómo ha desaprovechado su vida por un gilipollas Si nada de eso hubiese pasado, Rubén a lo mejor sería hasta un buen alumno.
-Dios mío...
-Lo sé.
-¿Podemos dejar de hablar de esto? Tengo escalofríos... -dije.
-Sí -dijo Louis abrazándome.
-¿Y esto? -dije acurrucándome, se estaba muy a gusto junto a él, olía realmente bien.
-¿No tenías escalofríos? -dijo apoyando su cabeza en la mía.
-Es verdad...
Pasaron las horas, estuvimos hablando todo el rato, conociéndonos mejor. Reíamos todo el rato. Louis era un chico muy majo y muy divertido, no estaba quieto, con él no podías parar de sonreír.
Un rato después oímos un timbre.
-Bueno, ya os podéis marchar, y Louis, recuerda que no puedes menearte mucho, que sino luego empiezan los mareos y los dolores de cabeza.
-Vale -dijo él asintiendo.
La enfermera era una señora mayor y gordeta, pero era muy maja. Siempre estaba seria, pero era muy comunicativa y estaba hablando en todo momento, así ayudaba a que se fueran los nervios y preocupaciones
Louis y yo subimos a nuestra clase a recoger la cosas. Por el camino nos encontramos a María, Laura y Marta.
-¡Hey, Louis! ¿Cómo te encuentras? -preguntó Marta.
-Mucho mejor, gracias -contestó con una sonrisa.
-¡Ah! Ana, Louis, Harry y Niall tienen vuestras mochilas, iban a cerrar la clase y ellos las han cogido porque no llegabais a tiempo -añadió María.
-Vale, gracias por avisarnos, vamos a buscarles, hasta mañana -dije yo despidiéndome de ellas.
-¡Adiós! -contestaron una vez habían bajado las escaleras.
Seguimos caminando hasta nuestro aula.
-Hey, chico, ¿cómo estás? -dijo alguien a nuestras espaldas.
Nos giramos.
-Bien... Gracias.
-Me alegro, ten cuidado. Y por favor, perdona a Rubén estaba... fuera de sí -dijo el chico.
-Él siempre está fuera de sí -contestó Louis muy serio.
-Bueno, me tengo que ir, adiós, Ana -dijo girándose hacia mí en la última palabra.
-¿De qué le conoces? -preguntó Louis una vez el chico se había alejado.
-¿A Zayn?
-Sí.
-Me lo encontré con Harry en una hamburguesería...
-Ah.
Segundos después vimos a Harry y Niall saliendo de la sala de profesores.
-¡Louis! ¿Cómo estas, tío? -preguntó Niall.
-Bueeeeeeeno... -contesto Louis.
-Tranquilo, te pondrás bien -dijo Harry sonriéndole-. Tomad, vuestras cosas.
Cuando iba a coger mi mochila, mi mano rozó la de Harry, sentí un escalofrío y cosquillas en el estómago, otra vez esa sensación...
-Venga, vámonos -dijo Niall.
Primero acompañamos a Louis y a Niall hasta sus casas, ya que vivían justo en frente del instituto, en el mismo bloque de pisos. Después, Harry y yo nos fuimos juntos hacia nuestras casas.
-¿Te ha gustado el instituto? -preguntó Harry después de estar callado un largo rato.
-Excepto por el accidente... Bueno, sí.
-Te acostumbrarás, Rubén siempre está provocando accidentes así.
-Puff...
-Ya... -dijo Harry resoplando también-, ¿y cómo te lo has pasado en la enfermería? ¿Qué habéis hecho?
Sabía que lo preguntaría.
-Pues... hablar, principalmente, y riéndonos mucho, Louis ha estado haciendo el tonto todo el rato.
-Típico en él, pero es un buen chico.
-Sí, muy buena gente.
Al cabo de unos minutos llegamos a mi casa.
-Bueno, mañana nos veremos, ¿no? prométemelo.
-Te lo prometo.
-Bien -sonrió mientras se acercaba a mí para besarme en la mejilla-, hasta mañana entonces.
Y, mientras veía cómo se iba, volví a sentir cosquillas en el estómago.
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"Shhh" [One Direction fanfiction] | CANCELADA
FanfictionNo digas quién eres. Nunca confíes tus secretos. Debes aprender que nadie es quien realmente dice ser, porque, en realidad, nunca llegamos a conocernos ni a nosotros mismos.