Capítulo 11: Insinuación a cita

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Los días habían pasado, un mes para ser exactos, desde aquel almuerzo en la escalera. A partir de ese día nos volvimos más cercanos, como una especie de amistad, encima Emma se unía a sus bromas y discusiones, que eran diarias.

Por fin Alba había escuchado a Nick, y como era de esperarse volvieron a ser una pareja empalagosa como antes. ¡Puaj!

Una silla y mucha cinta adhesiva tuvieron que ver mucho en que eso sucediera.

Era domingo en la mañana y me encontraba en mi cuarto intentando hacer la tarea de historia. Era un ensayo largo que me llevaría mucho tiempo. ¿Por qué siempre dejaba los trabajos a último momento? En realidad, todo lo dejaba para última hora.

La puerta se abrió rápido dejando ver a mi madre un poco agitada.

—Hija, Blake decidió invitarnos a su fiesta de cumpleaños, es esta tarde, así que sólo nos quedan...—miró su reloj de mano—. Menos de cinco horas, te informo para que no demores después, sabes que detesto la impuntualidad.

¿El cumpleaños de Blake tenía que ser hoy? ¿Hoy? No podía faltar, era un día especial para él, además era mi amigo, definitivamente tenía que asistir. Pero, ¿Qué haría con el trabajo? ¿Blake o mi notas académicas?

Dejé caer mi cabeza entre las hojas que aún seguían blancas.

—Mamá, tengo que terminar este ensayo que es para mañana. Quiero ir, pero no sé si podré terminarlo si voy a la fiesta.

—¿Y cuándo lo dejaron? —Se cruzó de brazos, examinandome con su mirada.

Sonreí. Mi madre me conocía muy bien.

—Eso no importa ahora.

Negó con su cabeza con desaprobación

—Haz una parte en este tiempo que queda y cuando regresemos lo terminas —puso su mano en mi cabeza y dió palmadas.

—¿Entonces, sugieres que vaya a la fiesta? ¿Y si no me da el tiempo suficiente para acabarlo? Y eso que cuesta la mayor parte del bimestre. Probablemente deje la clase —insistí, colocando mi puño sobre mi barbilla.

—No exageres, Carlina. Lo acabarás cuando regresemos, prometo que no demoraremos mucho —aseguró con una sonrisa.

—Como las otras veces —murmuré acomodando las hojas.

—Anímate, si quieres también puedes invitar a tus amigos —aconsejó y caminó hacia la puerta—. Te dejo para que prosigas con ese trabajo de hace tres semanas —sonrió dejándome perpleja y cerró la puerta.

¿Cómo supo que...? Sacudí mi cabeza para concentrarme en lo importante. El ensayo. Miré las hojas encima de mi escritorio, blancas, ni siquiera había empezado.

Recosté mi cabeza en la silla giratoria, observando el techo blanco, me estresaba las tareas que eran para el siguiente día, pero aún así siempre hacía lo mismo. No tenía solución.

Me acomodé en el asiento, iba a tomar el lápiz cuando desvié mi atención a mi laptop, ¿Mamá dijo que podía invitarlos? ¿Debería hacerlo? Puse mis dedos encima del teclado, abrí mis redes sociales y empecé a enviarles mensajes.

Grupo "CESSMAD"

CarlinJos :
Sé que nadie querrá aceptar pero no pierdo nada. ¿Quieren ir a una fiesta conmigo?

Samsomnio :
Ya sabes mi dirección 😉

CarlinJos :
Si, la escribiste muchas veces atrás de mi cuaderno de biología al igual que tu nombre 😅

Davetastico :
¿Esa es una insinuación a cita? 😍

CarlinJos :
¿Qué? ¡Claro que no!

Davetastico :
Algún día. 😉

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