EXCELSO [#1] [TERMINADO] [EDITANDO]

19.

Después de una hora sólo en la habitación de la enfermería, esperando a que alguien venga a quitarme las correas, finalmente puedo moverme a mi gusto. Vino la chica que Julio llamó cuando salió lastimado al entrar en mi mente, creo que se llama Roxy, si mal no recuerdo. No resistí el impulso de preguntarle por Denise, pero ésta no me respondió, parece tomarse su trabajo muy en serio. No llevaba ningún traje del programa, por lo que supongo que ya controla su habilidad a la perfección y no sigue internada en el programa, sino que decidió quedarse en lugar de irse del programa.

Después de varios minutos acostado, sin nadie con quien hablar, decido intentar levantarme nuevamente, a ver si, con algo de suerte puedo mantenerme de pie, y caminar hasta la habitación en donde tienen a Denise. Necesito ver como está ella. Digo, ya que es mi culpa que esté en ese estado, debería, por lo menos, ir a verla. Además, ella hizo lo mismo por mí cuando me desmayé. Debería de demostrarle la misma importancia que ella me dio a mí, y, la verdad, es que sí me importa como esté.

Coloco los pies en el suelo. Está frío. Tomo aire antes de intentar levantarme nuevamente y luego, me impulso apoyando completamente los pies en el suelo. Nada. No caigo al suelo. Por suerte.

Camino lentamente, tambaleándome un poco. Admito que me duelen un poco las piernas.

Llego a la puerta y giro el pomo. Me encuentro con una pared completamente blanca frente a mí. No debería parecerme raro, ya que todo el lugar es color blanco, más bien, debería empezar a acostumbrarme.

El pasillo está totalmente solo. Cierro la puerta de mi habitación y empiezo a caminar a la recepción. Recuerdo que la primera vez que estuve aquí, fue para visitar a Arturo. Vinimos Lián, Bryan, Annie, otro chico y yo. Fuimos atendidos por una chica en la recepción, ésta nos dijo donde se encontraba la habitación de Arturo. Espero que, con la misma suerte, me de la misma información sobre la habitación en la que esté Denise. Espero no perderme camino a la recepción. Sinceramente, todo éste lugar es un inmenso laberinto. Un laberinto que estoy dispuesto a cruzar con tal de ver como está Denise. No sé qué me pasa con esa chica, la verdad. Sólo sé que me importa muchísimo. Quizás parezca un poco precipitado todo lo que está sucediendo. Quizás le di demasiada importancia a Denise en muy poco tiempo. Y quizás hasta parezca algo estúpido que sea así, pero, ya no puedo seguir negándomelo a mí mismo. Desde que vi como esa chica cayó en el suelo agonizando, sentí como todo lo demás me importaba una mierda y sólo me preocupaba ella, ahí me di cuenta de todo. Estoy perdidamente enamorado de Denise.

Llego a la entrada de la enfermería, a mi lado está el escritorio, en donde está la misma chica de la última vez sentada frente a un ordenador.

Me acerco al escritorio y me sueno la garganta, llamando su atención. Ésta levanta la mirada.

—Perdone, ¿La habitación de Denise Lance? —pregunto.

La chica revisa brevemente en el ordenador y asiente luego de unos momentos.

—Habitación número veintitrés. —frunce el seño. —¿No deberías estar en la tuya?

—Ya me siento mejor.

—Está bien, la habitación está a mano izquierda, al fondo del pasillo. —sonríe.

—Gracias. —contesto, asintiendo.

Comienzo a caminar por el largo pasillo de la izquierda que la chica me señaló. Tengo que buscar la habitación número veintitrés entre todas éstas. Espero que Denise haya mejorado. Dijeron que estaba agonizando, pero que, por suerte, tenían los mejores médicos. Supongo que debe de estar bien. Espero que sí.

Habitación número veintitrés. Aquí está. Por favor, Denise. Giro el pomo de la puerta y empujo la puerta, detrás, veo algo bastante raro. Algo que nunca hubiera imaginado ver. Bryan. Está sentado junto con Jonathan y la chica a la que llevó al dormitorio la última ves frente a Denise ¿Qué hacen ellos aquí? Nunca han convivido con Denise. No tiene sentido que estén aquí. Recuerdo que Bryan dijo una vez que no está interesado ser amigo de Denise. No comprendo que hacen aquí.