Viviendo con mi ex | ✔️

Tarde de fotos

—¿Y eso cuando fue? — Pregunta Brooke aún muy curiosa y se cruza de brazos.

—Hace como cinco meses, mas o menos.— Le responde Morgan y Noah asiente.

Y decido intervenir.— ¿Algo más que no sepamos.., Morgan? — Nuestros ojos se conectan pero él se voltea rápidamente.

—No, eso fue todo lo que pasó.— Sonríe y se va a su habitación dejándome con dudas.

Él siempre qué quiere evitar un tema se va, hace otra cosa o cambia el tema.

Justo cómo hizo ahora.

—Bueno, ¿a qué vinieron? — Les pregunto cambiando de tema y tratando de centrarme en otra cosa qué no sea Morgan. Ya no somos nada, no debe porque importarme.

—No nos has llamado y estamos muertas por saber cómo te fue con las chicas de Victoria's Secret, pero ahora sabemos cuál fue la razón de tú falta de comunicación.— Señala Brooke la habitación de Morgan.

—Todo está bien, y me fue más qué bien, las chicas son increíblemente hermosas pero sorpresivamente agradables.— Explico. Vamos hacia mi habitación, me acuesto en mi cama y ellas encuentran una posición de acostarse también y qué quepan bien.

—¿Estuviste nerviosa? — Pregunta Noah.

—Demasiado al principio, pero las chicas me hicieron plática y me mantuvieron tranquila.— Sonrío al recordar todo lo que pasó.

—Richard nos dijo que aceptaste el hacer modelo de ropa interior.— Dice Brooke.— Yo quiero estar presente cuando pase todo eso.

—Si, pero aún estoy un poco indecisa.

—¿Estás loca? ¡Tienes el cuerpo perfecto para el trabajo! Una de las muchas razones por las cuáles vas a participar en una pasarela de Victoria's Secret.— Responde Mara.

—Concuerdo con ella, estás hecha para el trabajo.— Le sigue Noah.

—Tienes que aceptar, además de qué te vendrán muchas oportunidades por esto, ya estás dentro en Victoria's Secret y después de eso te volverás alguien importante, eres hermosa y por eso mismo has llegado hasta donde estás ahora mismo.— Comenta Brooke.

—Dios, Brooke. Tú siempre encuentras las palabras correctas en el momento correcto.— Le digo y ella sonríe.

—Ya vez, no digo solamente cosas sobre sexo o fiestas.— Se defiende y todas reímos.

Estos son los momentos qué disfruto. Estar con mis mejores amigas pasando el rato, riendo y hablando sobre cualquier cosa juntas.

Con todo esto de Morgan y Victoria's Secret casi no hemos pasado tiempo juntas. Antes era imposible no vernos en algún lugar todas haciendo alguna cosa muy divertida.

•••

—Claro, llego en unos momentos.— Digo poniéndome mis zapatos mientras sostengo mi teléfono con el hombro y mi oreja.— Nos vemos, adiós.— Cuelgo y me visto rápidamente.

Me pongo unos jeans rasgados y un suéter negro. Mis amigas se han ido hace como veinte minutos y en eso me ha llamado Richard para que vaya a la sesión fotográfica, Brooke me ha dejado muy claro que quería estar presente así que le mando un mensaje.

Para Brookie: 12:50 pm.
Richard me ha llamado para la sesión, si no estás ocupada te veo dónde siempre.

Espero unos momentos mientras termino de ponerme un poco de labial y ella responde.

De Brookie: 12:52 pm.
¡Demonios! Tengo una entrevista de trabajo en veinte minutos, si me desocupo te veré ahí y si no suerte. ¡Eres la mejor!

Para Brookie: 12:53 pm.
Vaya, entrevista de trabajo, con que no sea para actriz porno todo es aceptable.
¡Suerte igualmente!

De Brookie: 12:55 pm.
¡No seas tonta!
Te dejo, voy manejando.

Para Brookie: 12:57 pm.
Ve con cuidado, te quiero.

Tomo mi bolso, voy hacía la habitación de Morgan y se escucha la regadera encendida así que deduzco que se está duchando, abro un poco la puerta y entro a su baño.

—¡Oye! — Morgan suelta un grito mientras que yo me carcajeo. Abre la puerta y me mira fulminantemente.

—Me vengaré, así qué prepárate. ¿Por qué vas tan arreglada? — Sale de la ducha totalmente desnudo, dejando al aire a su, ¿cómo decirlo? ¿su amigo? ¿su mini Morgan? Cómo sea, eso. Solamente me volteo para no verlo.— No te avergüences, que ya lo has visto antes.

Él y sus comentarios morbosos. ¡Maldita sea! Y es qué efectivamente, lo he visto de todos los ángulos posibles. Pero ese no es el caso.

—Morgan, cállate.— Siento mis mejillas sonrojadas. Se pone una toalla en la cintura y con la otra seca su cabello.— Iré a una sesión fotográfica.— Aviso.

—¿La qué me comentaste? — Salimos del baño.

—Exactamente. Me llamaron y tengo que irme, solamente te quería avistar.

—Pues suerte, yo saldré con unos amigos, por si no me encuentras cuándo llegues.

—Ya te dije, nada de sexo aquí y tampoco llegues muy ebrio.— Lo fulmino con la mirada señalándolo con el dedo.

—Me ha quedado claro.— Responde con una sonrisa divertida y se pone de espaldas abriendo su closet.

Vaya, esas nalgas siguen igual de lindas desde la última vez que las vi.

—Tengo que irme.— Digo riendo gracias a mis tontos pensamientos.— Adiós.— Salgo de la habitación sin alguna respuesta de Morgan, no le tomo importancia y agarro el primer taxi que veo, le indico a dónde voy y en quince minutos llego, me bajo sin antes pagarle al taxista.

Saludo al portero, y entro hacía el estudio fotográfico de Richard, lo veo acomodando varías cosas, haciendo que todo quede perfecto, cómo siempre y me acerco a él.— Hola, Rich.— Le doy un beso en la mejilla.

—Prepara todo cómo te lo he dicho qué es urgente.— Termina de hablar y entonces me hace caso.— Gracias que llegaste, Grace. Esto es muy importante, todavía quieres ser parte, ¿verdad? Porque sino, romperás mi corazón.— Creo que una vez en mi vida tengo que dejarme llevar por el momento, si me eligió es por algo y debo estar orgullosa, ya que hay muchas chicas hermosas y entre todas esas me eligió a mi, soy afortunada. Y estoy emocionada.

—Por supuesto que no, Rich. Cuenta conmigo para todo.— Da un pequeño grito de felicidad.

—En tú camerino están tus vestuarios, no importa cómo te los vayas poniendo solamente luce hermosa, cómo siempre, te veré en un minuto.— Se va sin decirme nada más, camino hacia mi camerino y al entrar noto mucha ropa colgada. Dejo mi bolso en la mesa y reviso las prendas, obviamente toda es ropa interior, qué por cierto está hermosa. Me pongo el atuendo que más me gusta que va de un brasier color café con encaje y un cachetero del mismo tipo, entra la maquillista y comienza a arreglarme.

Salgo ya lista, Richard siempre quiere que nos sintamos a gusto cada vez que está tomándonos fotos, así que pone música siempre. Está vez Focus de Ariana grande.

—Muy bien, Grace. Dame tu mejor cara.— Siempre dice eso antes de empezar, comienza a sacar más y más fotos, me indica unas poses, y así sucesivamente hasta que me dice qué pase a cambiarme por el siguiente vestuario.

•••

La tarde ha sido excelente y también cansada.

Hice alrededor de unos quince cambios de ropa y Richard tomó cientos y cientos de fotografías, algunas me las enseñó y otras dijo qué le habían gustado demasiado qué quería qué fueran una sorpresa. Richard siempre consigue qué me sienta cómoda enfrente de una cámara, mis nervios desaparecen cuándo la música comienza y puedo moverme a mi estilo.

Él me deja ser yo misma ante la cámara y eso es algo qué me encanta.

Después de terminar, Richard me agradeció mucho por haber aceptado y todos los demás me felicitaron por alguna extraña razón, ahora voy directo a casa, necesito descansar mi cuerpo y mi mente.

Abro la puerta, y Morgan no está, cómo había dicho, así que decido tomar una relajante ducha y después irme a dormir.