-Amor- Mi madre corrió a mi auxilio- ¿Qué fue eso?
-Tengo que elegir entre Liam o él- Escondí mi cabeza en su pecho.
-¿No estabas de novia Liam?
-Sí pero lo engañé con Harry, así que los tres hicimos un trato.
-¿Qué trato?- Acarició mi cabello.
-Empezar todo de nuevo- Ella rió.
-Ve a hablar con ambos.
-¿Ahora?
-Sí linda, yo le di un tiempo a tu padre y no conseguí nada aparte de una vida solitaria.
-Sabes que el volverá de su viaje.
-No, no lo sé, por eso quiero que tú no cometas el mismo error que yo.
-Pero no puedo decidir.
-Tienes hasta mañana para hacerlo, te queda un día aun- Me levantó de la cama- Vamos- Me tomó de la mano.
-¿A dónde?
-Te iré a dejar a casa de los chicos para que arreglen todo.
-¿Qué cambiaría?- Dije siendo arrastrada escaleras abajo por mi madre- De igual manera tengo que elegir.
-Vamos Pía- Me ignoró y tomó a mi herma de la mano.
-¿A dónde vamos?- Preguntó emocionada.
- _______ irá a arreglar un asunto y nosotras iremos a comer helado.
-Por lo menos deja que me cambie la ropa y arreglé un poco- Me metió dentro del auto.
-Te ves linda- Abrochó el cinturón de Pía.
-¿Linda? Parezco un mapache- Protesté.
-Un lindo mapache- Se subió al asiento del piloto y comenzó a buscar algo- Ten- Me pasó un pañuelo blanco- Es una toallita desmaquíllante.
-Ok- Comencé a pasármela por debajo de los ojos.
-Vez que linda te ves sin maquillaje- Sonrió mientras me veía por el retrovisor.
-Tu conduce y mira al frente.
Luego de tener toda mi cara limpia me dediqué a mirar por la ventana con la cabeza pegada en el vidrio.
-Pareces una enferma _______.
-Déjame- Rezongué.
-No te enojes hija, solo te digo la verdad- Detuvo el auto- Ve a buscar a tu, digo a tus hombres.
-Jaja- Reí sarcásticamente- No me causa risa- Me baje del auto.
Me acomodé el cabello al igual que la ropa y decida camine hacia la puerta. Tan solo me basto tocar una vez para que Niall apareciera en bóxers purpuras.
-Hola- Dijo con la boca llena. Me abrazó y me comenzó a dar vueltas- Te extrañe- Besó mi mejilla en el momento que me dejó en el piso.
-¡Niall! Me dejaste con migas- Me limpié la mejilla.
-Mal agradecida- Me sacó le lengua llena de comida.
-¡Qué asco!
-¿Quién… ¡_______!- Sonrió Louis- Pasa.
Entré y todos estaban desayunando en la mesa pero lo que más me llamó la atención fue que Liam estaba en una esquina de la mesa y Harry en la otra. Al rizado se le dio vuelta el jugo cuando me vio llegar, y en cuanto al castaño, él tan solo se paró y caminó en mi dirección. Lo miré confundida al recibir un gran abrazó de su parte.