Cяσssfιяe [Lιαм Pαγиe, Hαяяγ Sтyles & Tu] terminada

Capítulo 3: La verdad quema [4/5]

Me vestí con lo que estaba sobre la cama y cuando termine Liam al fin había conseguido alcanzar su bolso.

-¿Tienes una polera y un chaqueta que me prestes?- Dije cubriéndome con los brazos.

-Claro- dijo sacando una polera azul con el logo de Superman y un polerón de color gris.

Me puse lo que Liam me paso, obviamente que sin sujetador ya que el mío ya yacía entre las cenizas y no creo que Liam ande con uno entre sus cosas ¿o no? Liam se vistió velozmente y se paró sobre la cama extendiéndome la mano, la cual por supuesto tomé.

Estábamos totalmente atrapados no había salida, por la puerta se podía ver como el techo de la sala estaba en el suelo y en llamas, por suerte el fuego aún no llegaba a tales magnitudes en esta habitación, pero de todas maneras ¿De que serviría? No había forma de salir de esta casa sin tener que salir en bolsas de plásticos totalmente calcinados.

-Cuidado- Dijo Liam en cuanto tomaba una lámpara y golpeaba la ventana rompiendo el vidrio.

La ventana no era muy grande, se encontraba a un costado de la cama y no media más de cuarenta por cuarenta centímetros. Lo de romper el vidrio fue la parte más sencilla, el verdadero reto era sacar los barrotes de la ventana. Liam estuvo unos cinco minutos intentando sacarlos, los golpeó con todo lo encontró a su alcancé. Las llamas ya se avecinaban, la mesita de noche junto a la cama ya estaba siendo consumida por el fuego y la próxima víctima de seguro sería la cama y por supuesto nosotros.

-Nada sirve- Dijo desesperándose- Debe haber algo más que podamos hacer.

-No lo sé- Dije volviéndome presa del pánico- ¿No tienes un cuchillo o algo que tenga filo?

-Es metal ______, tardaría una eternidad y no tenemos demasiado tiempo.

-¿Por qué no intentas fundir el metal?

-Tienes razón- Dijo mientras cogía un resto de madera  de la mesita de noche y la pasaba por el fuego.

Estuvo cinco minutos pasando la flama por los barrotes, estos ya se notaban algo desgastados por el calor, pero aún no demostraban estar tan débiles como para sacarse tan fácilmente.

-Siéntate en la cama- Dijo mientras tomaba otra vez la lámpara.

 Hice caso de inmediato y vi como Liam parado sobre la cama tomaba la lámpara como si se tratara de un bate de beisbol y la estiraba lo más atrás posible. Se podía ver que estaba muy nervioso, prácticamente tiritaba mientras yo rogaba porque todo resultara bien ya que no me sentía nada bien, el aire se agotaba, el calor era agobiante y mi cabeza comenzaba a dar vueltas

Definitivamente lo de morir carbonizada: Mala idea.

Liam respiró hondo y golpeó con toda su fuerza, la lámpara se hizo añicos al igual que los barrotes de aquella salvadora ventana.

-Sal tu primero- Dijo en cuanto me levantaba y me sostenía por los brazos mientras yo pisaba la punta el marco de la ventana y me agachaba ya que como dije la ventana no era muy grande.

Sentí el alivio más grande del mundo cuando mis pies tocaron la tierra.

-¿Tienes tú teléfono?- Le pregunté en cuanto salió finalmente por la ventana. No me respondió solo me tomo por la cintura y me levanto dándome vueltas en tanto su boca buscaba a la mía, la cual al fin y al cabo termino hallando.

-Sí, si lo tengo- Dijo dejándome en la tierra- Pero no tengo señal.

-Caminemos en busca de señal.

-Ok- Tomó mi mano y caminamos por los alrededores pendientes del celular, llegamos al muelle en donde raramente el teléfono tenía todas las rayitas de conectividad.

Liam lo primero que hizo fue llamar a los bomberos y luego le marco a Louis.

-Hola… ¿Dónde están?... ¿Todavía?... Sí… Sí… Después te lo explico tu solo ven lo más rápido que puedas- Dijo Liam a través del teléfono- Ya vienen en camino.

-No sé cómo pudo pasar esto- Dije posando mi cabeza sobre la piernas de Liam.

-Yo tampoco tengo idea- Dijo recorriendo mi cara con su dedo índice- Pero ya paso, ya estamos a salvo- Después de todo lo que paso esta noche, nada sería lo mismo, desde este momento sería un nuevo comienzo.

-Liam…

-¿Qué paso?- Preguntó preocupado al ver mi expresión.

-Soy una estúpida.

-¿Qué? ¡No!- Dijo levantando mi cabeza de sus piernas para que yo lo mirara- ¿Por qué dices una estupidez como esa?

-Porque lo soy,  ahora que lo recuerdo yo deje una vela encendida y se me olvido apagarla- Dije viendo fijamente sus ojos, el no hablo solo suspiro.

-Fue un accidente, no te culpo- Acaricio mi mejilla- Ni nadie lo hará.

Acto seguido solo se oyó una sirena a lo lejos que poco a poco intensificaba su estruendoso silbido.

Minutos después ya estaban aquí los bomberos intentando como locos parar lo que una inocente vela había provocado. Con Liam nos acercamos y veíamos como los hombres trabajaban arduamente.