17. Enamorado

13 1 0
                                    

11:54 a. m.

Madre había hablado conmigo, me dijo que intentará acercarme todo lo que pudiera a Thomas, pero... ¿Cómo?. No llegaría a su casa y le diría "Hola, quiero qué te vuelvas loco por mí, ven, hablemos".

—Emma, ¿por qué botas el jugo? —Dijo Paula mientras entraba en la cocina.

Estaba sirviéndome jugo de naranja, pero por alguna razón me quedé mirando a la nada y no había parado de verter el jugo en el vaso, este se boto en la mesa y de la mesa cayó al piso.

—Demonios —Mascullé. Tome un trapo y empecé a limpiar.

—¿Te... he dicho qué eres la mejor hermana de el mundo? —Preguntó mientras se apoyaba en la mesa.

Paula quiere algo, lo presentía.

—Dime qué quieres pequeña controladora —Dije mientras tiraba el trapo en la mesa, había terminado de limpiar.

—Bufó— Tommen. Él me invitó a comer, pero mamá no me dejara ir, y papá ni se diga. Así que necesito qué me lleves.

Complacer a Paula y ocultarle a mis padres qué ella iría a comer con Tommen, o decirle qué no.

—¿Qué me darás a cambio?.

—Lo que tú quieras, pero llévame, puedes quedarte si quieres.

—Está bien.

POV Thomas:

Estaba en la cocina preparando el almuerzo. Regina no le gustaba cocinar, se negaba rotundamente a acercarse a la cocina, eso fue algo qué siempre me ha enojado, si te casas es para atender a tu marido. Pero ella no hacía nada en nuestra casa. Un momento... ¡Claro qué hacía algo!, dormir, llamar a su peluquero para qué viniera a arreglarla, invitar a sus chillonas amigas y simular que era la esposa perfecta, entre otras cosas. Cuanto me arrepiento de haberme casado con ella, hace unos cuatro meses le hablé a mi madre sobre divorciarme, y su respuesta fue: "No".

—Voy a salir —Dijo Tommen mientras entraba en la cocina.

—Eso sonó a afirmación y no a una pregunta —Saqué la carne qué estaba friendo y la puse en un plato.

Tommen era mi hermano menor, tenía quince años. Él pasaba la mayoría de el tiempo en mi casa ya que mamá lo fastidiaba.

—Por qué no te estoy preguntando, te lo estoy afirmando. Y tú —Me señaló— Me llevarás.

—Eso sonó a orden —Me volteé para mirarlo.

—Por qué lo es, idiota.

—No me gusta ese tono —Lo señalé— Más vale qué me vayas hablando bien o alguien tendrá que volver a casa, con mamá —Lo amenace, el volteo los ojos— ¿A dónde irás?.

—Iré a comer con Paula —Se sentó en la mesa.

Paula, la hermana de Emma.

Emma Serrano, una mujer despampanante. Si les soy sincero pensaba en ella desde la cena, su cabello, sus ojos que apenas y pude apreciar, su carácter. Es una mujer hermosa. Y haría lo que fuera por volver a verla.

Mí GemaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora