Dos

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El primer día de trabajo para el nuevo asistente de Seungcheol había llegado. Cuando el pelinegro se contactó con el, afirmó que no necesitaba una entrevista, todo lo que necesitaba era que pueda entender las reglas que éste dejaba.

—Soy Lee Jihoon.

Era pequeño, media tal vez menos de uno sesenta y tenia el color pintado de color naranja y en las puntas era rubio. Seungcheol quiso reírse al ver su estatura, pero no podía juzgar a un libro por la portada, así que se contuvo.  No era para nada como lo había imaginado ayer por la noche, antes de irse a dormir. Pensó que sería mucho menos tierno y parecido a su asistente anterior, pero de similar no tenían nada.

— Buenos días — dijo Jihoon haciendo una pequeña reverencia a su nuevo jefe.

— Buen día, Jihoon — Seungcheol sonrió — Aquí tienes las reglas que suelo utilizar con mis asistentes.

La verdad solo había tenido un asistente desde que empezó a trabajar, SooWoo estuvo siempre con él y el hecho de que ahora no estaba se le hacía raro, sentía como si algo le faltaba.

— Bien, muchas gracias.

Jihoon tomó los papeles y Seungcheol pudo observar sus pequeñas y delicadas manos, tenia la tez blanca, demasiada diría el. Los ojos de color café y un traje que combinaba con su corbata de color azul. Jihoon no llevaba puesto algún saco o algo parecido, se había presentado con unos pantalones de vestir y zapatos del mismo tipo, una camisa que estaba doblada hasta los codos y, por supuesto, una corbata azul.

— Sígueme, por favor.

Ambos caminaron por el gran edificio de la empresa que había entrenado a Seungcheol, era la primera vez que Jihoon entraba en un edificio así por lo cual se lo notaba un poco emocionado. Caminaron hasta una de las salas donde se grababa el drama, y Jihoon seguía impresionado por todas las cosas que había en semejante lugar, para él no era algo que se pueda ver todos los días, por lo cual le hacía mucha ilusión trabajar en aquel lugar.

— Bien, ahora empezaré a trabajar. Ten mi número de teléfono, si necesito algo te llamaré. Si quieres puedes quedarte o pasear por el lugar — indicó Seungcheol—, pero supongo que querrás explorar el lugar ¿No?

Jihoon asintió con la cabeza mientras tomaba el papel que su jefe le había extendido.

— Antes de que te vayas, dame tu número de teléfono tu también, si no ¿Cómo podría llamarte?

Jihoon le dio su número de teléfono y luego de despedirse, con una pequeña reverencia, salió de la sala para irse a quien sabe dónde. Trató de buscar un lugar donde sentarse o alguna cafetería, para poder leer los papeles que su jefe le había dado minutos antes de que comience a trabajar.

Paseo por mucho tiempo por el edificio, sin éxito. Incluso preguntó a la gente donde quedaban los lugares, pasó un poco de vergüenza pero pudo encontrar al menos la cafetería.

Jihoon se sentó tranquilo en una de las mesas, una chica le preguntó si necesitaba alguna bebida o algo pero este le dijo que no. A los segundos de haberse sentado le llegó un mensaje.

Seungcheol (Jefe): ¿Podrías traerme una botella de agua?

Seungcheol (Jefe): Aquí ya se terminaron.

El pelirosa se levantó de su asiento y fue hacia el mostrador, le pidió a la chica una botella de agua, iba a pagar pero la chica le dijo que como la cafetería estaba dentro del edifico, no tendría que hacerlo, ya que la empresa pagaba anualmente por el servicio. Jihoon agradeció con una reverencia y salió del lugar, miró por todos lados perdido y confuso, no tenía idea donde era el lugar en el que actualmente Seungcheol estaba grabando el drama.

Jihoon: Lo lamento jefe, pero...

Jihoon: ¿Podría decirme en qué piso se encuentra usted?

Jihoon: Y también que sala, por favor

Luego de esperar unos cuantos segundos, el pelirosa recibió un mensaje de su jefe el cual decía que se encontraba en el segundo piso y en la primera sala  de la izquierda, envió un mensaje de agradecimiento y se encaminó rápidamente a la dirección que le había dado éste.

Tocó la puerta de la sala antes de entrar a ésta, escucho desde lejos alguien que le autorizó pasar dentro de la sala, buscó con la mirada a su nuevo jefe y se encaminó hacia él.

— Gracias, Jihoon

Seungcheol hizo una pequeña reverencia y tomó la botella llena de agua entre sus manos. Jihoon observaba detenidamente, no tenía otra cosa que hacer ya que los actores estaban tomando un descanso. El pelinegro era guapo, o eso pensaba Jihoon cada vez que lo veía y observar como el agua pasaba por su garganta le hacía parecer "sexy", según el menor.

El mayor pudo notar como los ojos de Jihoon no se despegaban de su persona, así que separo el plástico de sus labios y la cerró.

— Soy irresistible, lo sé —susurró al lado del menor mientras caminaba hacia el basurero para depositar la botella de plástico vacía.

El menor sonrió y en un segundo logró cambiar a un estado serio, como si nada hubiese ocurrido.

— Por cierto, algunas veces te necesitaré de noche. Así que tengo un cuarto preparado en mi casa.

— ¿Viviré en su casa?

— Si tu quieres, no tengo problema con que no quieras.

— Lo pensaré y se lo diré luego.

Seungcheol río por lo bajo por la forma en como lo trataba el menor, era demasiado formal y correcto. El pelinegro sólo quería que lo considere como su amigo y no como un jefe.

— ¿Podrías ser menos formal conmigo?

— Es solo que... — Jihoon no emitió ninguna palabra por unos segundos —, siento la necesidad de hacerlo ya que usted es mi jefe.

— Conmigo no necesitas formalidad, me haces sentir incómodo, Jihoonie.

El Nuevo Asistente →Jicheol←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora