Tres

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— ¿Te parece bien el color?

— No creo que le disguste...

— ¿Estas seguro?

— El cuarto esta lindo, Cheollie.

Jeonghan tomó a su novio y le dio un beso corto.

Desde que Jihoon dijo que se mudaria a la casa de Seungcheol, éste ha estado preparando el cuarto como loco, quería que el menor se sintiera cómodo de todas formas y estaba dando lo mejor de él para lograrlo.

El cuarto tenía paredes de color amarillo pastel, no muy fuerte. Las ventanas tenían cortinas azul marino y había varias estanterías, suficientes como para colocar un montón de cosas.

Seungcheol: ¿Estas en camino?

Jihoon: Iba a presionar el timbre...

Seungcheol bajó las escaleras a la velocidad de la luz y fue a recibir a su asistente, lo saludó y dejo que pasara primero. Jihoon asombrado miraba cada detalle de la casa, cada vez la vida de su jefe le parecía más impresionante.

El menor dejó sus maletas hacia un lado y Seungcheol le ofreció asiento.

— ¿Y bien? ¿Qué te parece?

— Impresionante — fue todo lo que salió de la boca de Jihoon.

Se escucho un tropiezo que venía desde las escaleras, Jihoon giro su cabeza rápidamente y Seungcheol se encaminó hacia el lugar.

— ¿Estas bien?

— Oh...si, no te preocupes. Sólo tropecé.

Jeonghan estiró su pierna y sonrió a Seungcheol.

— Hannie, él es Jihoon, mi nuevo asistente. Jihoon, él es Jeonghan, mi novio.

"¿Cómo no podía haberlo pensado? Es obvio que un chico como el tenga un montón de personas detrás y en especial un novio", Jihoon se abofeteó mentalmente por pensar varias cosas que tenían que ver con su actual jefe.

— Mucho gusto —dijo el menor con una sonrisa extiendo la mano al novio de su jefe.

— Igual, Jihoon.

Jihoon tomó sus maletas y pregunto donde quedaba su cuarto, Seungcheol lo guió hasta el lugar para finalmente dejarlo solo. El pelirosa se tiró a la cama, maldiciendose a sí mismo. A pesar de la tierna aura que tenia Jihoon, algunas veces podía ser un demonio totalmente, no desearían verlo enfadado.

Luego de unos 30 minutos, Jihoon bajó a la sala de nuevo, ya que se estaba muriendo de hambre. No pensó que en menos de 2 horas volvería a tener el estomago vacío. Tampoco es que haya almorzado hasta estallar, pero comió lo suficiente hasta sentirse satisfecho.

— ¿Qué tal te parece tu cuarto?

— Es genial...

— Lo diseñé yo...SooWoo me dijo que te gustaba leer y que en tu casa solías tener muchos libros, es por eso que te puse las estanterías ¿Te gustan?

El menor asintió con la cabeza.

— Si, me gusta.

Seungcheol sonrió y volvió su vista a la televisión, luego de unos segundos volvió a fijar su vista en el pelirosa para preguntarle si es que tenía hambre. Jihoon había negado, pero el mayor insistió al escuchar los gruñidos que hacía el estomago de Jihoon, gritando por comida.

— ¿Aún no has almorzado?

— Si, comí antes de venir. Pero no pensé que en tan poco tiempo mi estomago estaría vacío.

— ¿Comiste bien?

— Me dejó satisfecho.

— Así que eres una persona con mucha hambre.

— No, no —contradijo el menor rápidamente, un poco avergonzado—, es la primera vez que me ocurre esto.

— ¡Volví! — dijo el pelilargo entrando a la sala con unas bolsas en la mano.

— Que suerte ¿Estás bien?

Seungcheol se acercó a su novio y tomó la mayoría de las bolsas que cargaba, las dejó en la mesa y empezó a revisar las cosas que había comprado.

— Tenemos suerte que Hannie haya comprado algo para comer. Normalmente nunca suele hacerlo.

— ¡Eso es mentira! —Jeonghan río.

Luego de haber guardado las demás cosas con ayuda de Jihoon, comieron algunas galletas saladas.

— Muchas gracias.

— No lo agradezcas — dijo Jeonghan sonriendo.

El menor dejó a la pareja solos y volvió a su cuarto, tomó el cargador de su celular y lo conectó a un tomacorrientes para que éste pueda hacer su función, dejó su celular encima de la cama mientras cargaba y sacó un libro de su maleta para empezar a leer.

Hoy Seungcheol tenía el día libre, ya que habían terminado de grabar el ultimo drama que el protagonizaba así que, no había mucho por hacer.

El menor siguió leyendo hasta terminar el capitulo 41, el libro no le entretenía tanto, más bien lo aburría, pero como no tenia nada que hacer optó por eso. Tomó su celular en manos y vio que tenia un mensaje de un número desconocido.

Desconocido: Hola pelirosa.

Desconocido: ¿Tú eres el nuevo asistente de Choi Seungcheol?

Jihoon: Perdona ¿Quién eres?

El desconocido no respondió al mensaje, así que dejó eso pasar y se dedicó a explorar por la Play Store, en busca de juegos que pueda entretenerlo por un buen rato.

Se escuchó a alguien golpear la puerta tres veces, acto seguido la puerta se abrió rápidamente dejando ver a Seungcheol con un conjunto diferente al que había estado usando toda la tarde.

— Permiso —dijo el pelinegro y automáticamente Jihoon separó la vista de su teléfono— ¿Te apetece ver una película? Si es por Jeonghan no te preocupes, se acaba de ir.

— Estoy bien, gracias.

— ¿Estas seguro? Luego no te arrepientas.

— En serio, estoy bien, gracias.

Hubo silencio por unos segundos donde Jihoon miraba a Seungcheol y viceversa. Seungcheol se encaminó hacia la cama y se inclino hacia el menor.

— Oh vamos, no seas aguafiestas —Seungcheol tomó a Jihoon de la muñeca y lo levantó de la cama—, venga, vamos.

Jihoon soltó su celular antes de que pueda desconectarse y caerse. Al salir del cuarto el agarre se soltó y Jihoon empezó a caminar más lento que Seungcheol.

"No, Jihoon. No lo estás haciendo"

El pelirosa suspiro profundamente y cambio el ritmo de sus pasos a uno más rápido.

"¡No lo vuelvas a hacer!

Pero le fue imposible despegar sus ojos del trasero de Seungcheol.

El Nuevo Asistente →Jicheol←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora