Amigo de la muerte

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Cuando Jason y Millie se arreglaron después de tres meses ambos lloraron.

Fue ahí cuando me di cuenta de que ambos debían haber pasado cada momento de su vida juntos y que estar separados de un momento para el otro debía de ser odioso.

De cierta manera yo estaba más feliz que nunca; mis dos mejores amigos se habían arreglado para siempre, empezaba a estar menos en mi casa. Tan poco que ni siquiera me enteré que mi padre había estado en casa y se había llevado todo el dinero que teníamos y ni siquiera me preocupaba.

Creaba los mejores momentos hasta ese entonces, en donde estaban las más épicas personas de todas.

Eso era lo único que me importaba en el momento.