☆Nueve meses después...
5 de marzo de 2017 a las 03:20am
Estaba plácidamente dormida en los brazos de mi adorado hombre, cuando de repente un fuerte tirón en mi parte baja me despierta de golpe, al principio no le di importancia ya que no dolía tanto, así que me levanté con cuidado de no despertar a Robert y respiré profundo. Cuando estoy a punto de salir de la habitación otro tirón más fuerte se hace presente haciendo que apriete con fuerza la perilla de la puerta.
Respiré profundo y comienzo a caminar hasta la cama nuevamente, al llegar, me siento del lado de Robert e intento despertarlo.
Kate: Amor...-Lo muevo con una mano y con la otra tocó mi vientre algo duro.- Robert por favor despierta.
Robert: Cariño, es muy temprano para despertar, ¿A caso es otro antojo? -Se sienta un poco adormilado en la cama mientras acariciaba sus nudillos.
Kate: Si, quizás esta vez sea el antojo de nacer. -Aprieto su mano con fuerza al sentir otro tirón haciendo que este rápidamente se alarme y lleve las manos a mi vientre.
Robert: ¿Pero son contracción o tirones? -Acarició mi vientre mientras me miraba.- ¿Tira para abajo nena?
Kate: Si, tira y horrible. -Hago una mueca y aprieto mi mano en forma de puño.
Robert rápidamente enciende la luz de la lámpara y comienza a caminar hasta su ropa para vestirse, mientras tanto no paraba de hablarle al bebé ante su nerviosismo.
Robert: ¿Ya quieres salir pequeño? -Dice mientras se sentaba a mi lado para calzarse.- ¿Estás apretadito ahí dentro bebé? -Besa mi vientre cuando termina y me ayuda a levantar con cuidado de la cama. Tomó mi bolso junto al del bebé y salimos de la habitación mientras llamaba a su amigo el doctor el cual nos iba a atender, para informarle.
Robert: Bien, dijo que los dolores serían más fuertes y que cuando rompas la fuente, camines. Dijo que eso ayudará a soportar el dolor. -Me ayudó a subir con cuidado al coche para luego rodear lo y subir él.
Cuando comienza a conducir, sentía que mi vientre se ponía cada vez más duro, yo apretaba con fuerza la manija de la puerta mientras respiraba profundo y Robert con su mano derecha acariciaba mi vientre intentando calmar los dolores.
Kate: Cariño, con cuidado por favor. No quiero morir el día del nacimiento de mi hijo. -Digo respirando profundo, ya que la velocidad a la cual iba era un poco alta.
Luego de un viaje algo largo, llegamos al hospital, cuando Robert abre mi puerta y me ayuda a bajar, me sostengo de esta al sentir un líquido recorrer mis piernas. Miro hacia abajo y luego a Robert quién sacaba los bolsos de la parte trasera del coche.
Kate: Robert...acabo de romper bolsa. -Le digo aún sosteniendo me de la puerta y este rápidamente me ayuda a caminar a la entrada del hospital.
5 de marzo de 2017 09:20am
Seis horas, seis benditas horas que para mi parecían un infierno, mi madre y la suya ya estaban ahí, junto a nuestros padres quienes habían decidido esperar en la cafetería. Robert y yo, ya nos habíamos recorrido la habitación mil veces y el dolor no cesaba, pero ahí estaba él, masajeando mi espalda, caminando a mi lado y sosteniendo me con fuerza por las dudas de que me callera.
Luego de casi veinte minutos más, el doctor entró a la habitación por quinta vez en la mañana y me acomodó en la camilla revisando mis dilataciones, cuando por fin estaba pronta, las enfermeras me llevaron a sala de partos.
Robert estaba ahí, ambos estábamos sudorosos, él por los nervios y yo por la fuerza masiva que tenía que hacer para traer al bebé al mundo. Él no paraba de besar mis labios y darme palabras de apoyo como "Lo haces bien nena", "Vas genial, ya casi" y demás.
Casi luego de una hora, un llanto calmo la situación dando a entender que nuestro pequeño había nacido, 3,100kg era lo que pesaba nuestro bebé, las enfermeras lo envolvieron y rápidamente lo pusieron en nuestros brazos.
Yo miraba a aquel pequeño con mis ojos bañados en lágrimas al igual que Robert y éste besa mi frente con ternura.
Realmente no podíamos creer el ángel que teníamos en nuestras manos.
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Love For You? Yes.
De TodoKate es una adolescente que se ve atraída por los encantos del sexy empresario mejor conocido como el mejor amigo de su padre. Robert Downey Jr, sería como su tío, pero el realmente no la ve así. En el transcurso de esta historia, amor, sexo, peleas...