Capitulo 5.

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Cuando llegamos al MONKEY DONKY, la unica discoteca decente en PINEWOOD, nos sorprendió lo lleno que estaba. Tuvimos que estacionar el auto a dos cuadras del lugar y aunque no era mucho caminar, con zapatos de tocón aun era un problema para mi.

―Woow, el lugar esta mejor de lo que pensé―

―El nuevo dueño si que sabe como atraer a la gente―

―Lo se, es un Smith que esperabas―lo dijo con tanto orgullo, y es que no me sorprendía que el lugar estuviera lleno.

Después de todo su hermano mayor, Peter, era el nuevo dueño de la discoteca, antes era un pésimo bar llamado DARK VILLE, raro lo se. Luego el anterior dueño no pudo con los gastos y toda la cuestion administrativa. Cuando cerro, Miranda vio que tenia un letrero que decía SE VENDE y no lo pensó dos veces para llamar a su hermano y decirle que había una muy buena oportunidad de negocios.

―Lo que no entiendo es el nombre―

―Ni yo, pero por favor, no juzgues a un libro por su portada.―me sujeto de mi brazo y me dirigió hacia la entrada―Ademas no tenemos que hacer fila y mejor aun, hoy invita mi querido hermano.―

Cuando entremos me sorprendí al ver el lugar, tenia un aspecto un poco gótico, pero las luces rojas azul y amarillas hacían que el sentimiento desapareciera. La música, tengo que decir que era buena, podías escuchar a David Guetta por todo el lugar con una mezcla de Lady Gaga una extraña combinación pero el DJ lo hacia funcionar.

El centro era la pista de baile, por lo que pude observar, habían mesas alrededor de la pista y a pocos metros habían mas mesas desplegadas por todo el lugar, al ir mas adentro me di cuenta que había un segundo piso.

―Ahí es donde iremos, VIP―guiño el ojo y me dio una amplia sonrisa, y me dirigió hacia las gradas a jalones, estaba realmente emocionada por estar aquí.

Mientras subíamos las escaleras me di cuenta que el bar estaba debajo de estas, cuando llegamos a nuestro destino tuve que evitar que mi mandíbula no se cayera de la sorpresa, Mira tenia razón tenia el aspecto de VIP.

Arriba tenían cinco mesas redondas sin orden en el lugar, un bar en medio de las mesas, y meseros y meseras que iban y venian. Mientras abajo era negro y luminoso, arriba tenia un aspecto realmente lujoso, con una gran pecera en vez de paredes y cortinas rojas y negras adornando el techo y la orilla del balcón.... y si tenia un balcón en medio de todo, y mientras pasábamos vi que era un lugar exclusivo para aquellos que fumaban.

―Ahí esta nuestra mesa―Mira me señalo la mesa de la esquina, la cual estaba al fondo del lugar. La mesa tenia un papel que decía RESERVADO.

―Vaya, tu hermano hizo un excelente trabajo aquí―

―¿Adivina quién lo ayudo con la decoración?―me quede con la boca abierta, y es que no me había dicho que estaba trabajando con Peter.

―¿Por qué no me dijiste?―me regalo una sonrisa juguetona

―Era un sorpresa, ademas Peter me pido que no dijera nada a ningun conocido.―

―Es comprensible, queria opiniones objetivas―

―Exacto―

Ambas nos sentamos en la mesa, la cual nos hacia ver mas pequeñas de lo que realmente eramos. Pero conociendo a Miranda no tardaría en llenar la mesa, y es que nadie podia resistirse a una rubia despampanante y de cálidos ojos marrones, y agreguemos que tenia un cuerpo envidiable, resultado de horas en el gym y, pues buena genética, la chica podía comer lo que quisiera sin engordar. Y en la manera que hoy se arreglo nadie podia negarse a su belleza.

SOMBRAS #CarrotAwards2017 (en pausa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora