Noté como YoonGi se daba media vuelta hacia mí. Estaba algo desubicada en el tiempo, esperaba que no fuera demasiado tarde. SeokJin no debería tardar en llegar, en cuanto pensé en él se me pasaron las ganas de despertar.
Lo que no comprendía era porque YoonGi acaba de cerrar la puerta, quizá fue comprar algo mientras dormía. Pero no era lógico, porque no traía nada en las manos. Un botezo se escapó de mis labios obligándome a empezar una conversación.
— ¿A dónde has ido? —la voz me salió algo ronca. Seguía adormilada.
— Yo-
— ¿Qué hora es? —pregunté interrumpiendolo.
— ¿Las cinco, quizá? —el corazón empezó a palpitarme en los oídos preocupada. YoonGi ladeó la cabeza pensativo— ¿Por qué?
— Jin —susurré empezando alevantarme quizá demasiado rápido; un leve mareo me asaltó haciendome detener. O quizá solo fue la mano de YoonGi alrededor de mi muñeca, había llegado a mi lado demasiado rápido.
— Él no va a venir.
— ¿Qué quieres decir? —exclamé.
Quizá mi expresión lo sorprendió bastante. Se había quedado sin palabras y era comprensible; era consciente que cuando me estresaba parecía una loca. Pero no me di cuenta en ese preciso momento, estuve intentado relajar mi respiración para no provocar algo malo a mi cuerpo por estar tan alterada.
—Vino hace un momento, le dije que se fuera fue bastante franco. No, no se disculpó, lo dijo como si no fuera para nada importante.
— ¿Tienes idea de lo que has hecho?—chillé zafándome de su agarre con enojo. Fruncí las cejas sin mirar a aquel desgracaido—. Van a matarme.
— MinSoo—claramente quería que me tranquilizara.
— ¿Qué pensarías si en el departamento de tu hija está un chico con pinta de ladrón?—exploté. Era más que obvio que SeokJin iría a decirles a mis padres que había encontrado a un drogadicto en mi apartamento—. Te veo más tarde.
Fue lo único que dije antes de salir corriendo a encontrar a SeokJin, ya en el ascensor me di cuenta que había sido demasiado dura con YoonGi. Empezaba a arrepentirme, lo había tratado cómo la mierda y él solo había stado intentando animarme. Golpeé mi frente con la palma de mi mano, pero ya habría tiempo de disculparme luego. En ese momento tenía otra misión.
🎀
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
