Nuovo Amore (Katekyo Hitman Reborn

Capítulo 06

Habían pasado 40 minutos desde que Tsuna había atacado la segunda base con Aruko, se encontraba en el cuarto de mandos donde había un hombre atado en una silla, por su traje se podía deducir que él era el jefe del lugar, estaba golpeado y enojado.

-Bien, jefe de base, le haría preguntas pero dudo mucho que usted me entienda o que no me responda en el caso que si me entendiese. –Tsuna estaba sentado enfrente de él en una silla presidencial. –Pero creo más que usted no me responderá.

El jefe del cuartel no le entendió ninguna palabra pero podía deducir que quería interrogarlo. El simplemente se bufo de lo ingenuo que era, no sabía que pasaría una vez que los ostros líderes de su organización se enterarán sobre el ataque.

-No ha hablado desde que lo capturamos y por su sonrisa pienso que hay otros que se enojaran cuando se enteren de lo que paso aquí. –Tsuna miro una laptop, sacudió las cenizas que tenía encimas. –Que sorpresa, no está bloqueada y tiene internet. Perfecto –sonrió Tsuna mientras tecleaba. –Según Aruko ustedes hablan alemán pero lo dudo mucho. –paraba de teclear y retomaba la acción. –Alguien me dijo que tenía una intuición muy acertada y que confiara mucho en ella, en ese instante entraba Aruko con las Signum a su lado, llevaba una maleta en su hombro. –Asique creo que es inglés, pero le dejare esto traducido en alemán. –dejaba de tecla dándole entre y una voz femenina empezaba a hablar en alemán. –Adiós. –se despedía Tsuna saliendo de la habitación dejando al hombre que escuchaba el mensaje dejado por él.

-¿Qué estabas haciendo? –le pregunto Aruko.

-Platique un poco con él, le deje un mensaje. Pero más importante ¿Qué encontraste?

-Encontré una bóveda con mucho dinero y joyas además lingotes de oro, debo admitir que era mucho.

-Bien, vayámonos antes que el lugar explote. –Tsuna tomaba de la mano a Aruko para salir.

-Pero las armas, todavía no las he destruido. –lo detuvo.

-¿Los dejaste donde te dije? –pregunto Tsuna para estar seguro que todo saliera tal y como lo pensó, Aruko asistió. –Hubo un cambio de planes, cuando termine el mensaje que le deje él hará algo. Entonces antes que pase, vámonos. –Tsuna cargaba a Aruko de manera nupcial, fue cuando se escuchó un grito de ira y un segundo hubo una explosión muy fuerte que hizo temblar el suelo, luego otro tras otro.

-Tsunayoshi ¿Qué hiciste? –le pregunto Aruko que se agarraba fuerte de su cuello.

-Como te había dicho hubo cambio de planes. Y que el haría una cosa y eso era autodestruirse. –las tiendas que habían arriba empezaban a sumergirse y con agilidad subía los escombros, usando a acuario para abrirse camino. Pasaron unos segundos hasta que llegaron a la superficie partiendo un escombro. Dio un largo suspiro, lo que había pasado llamaría mucho la atención fue hasta que escucho ruido a su alrededor y se dio cuenta que habían personas alrededor y unos grababan los ignoro dio un salto desapareciendo a la vista de los curiosos.

Tsuna corría entre las favelas evitando las personas.

-Tsunayoshi, estoy bien puedes bajarme. –le decía Aruko.

-No, si me ven solo a mi es mejor. Si te ven ellos empezaran a moverse y molestarte. –se detenía a una pared observando a los lados. –No dejare que te vean hasta que pueda hablar con tu familia ¿de acuerdo?

-De acuerdo. –le respondió sonrojada, ante la mirada determinada e intimidante de Tsuna le hacía ver muy sexy, pensó Aruko, se colocaba mejor la capucha.

-Bien, falta poco para llegar donde 90. Agárrate fuerte. –Tsuna la abrazaba más a él y ella hacia lo que le pedía, e iniciaba a correr nuevamente, faltaba unos metros hasta que llego donde estaba la base donde se adentró 90, bajo a Aruko y le quitaba la manta que le había puesto para ocultarla.