Martina.
4 de Marzo, cumpleaños de Jesús❤
Me recuerda una notificación de mi teléfono móvil.
Agradezco internamente que el cumpleaños de mi novio caiga este año en domingo, así podremos disfrutarlo con tranquilidad.
Dirijo mi mirada hacia él y me enternece comprobar que sigue dormido.
Me acerco a él con cuidado y empiezo a besarle.
Hasta que se despierta.
-Felicidades mi amor- le beso en los labios y él sonríe
-Gracias cariño- acaricia mi cara
-Bueno, yo ya tengo tu primer regalo- me coloco encima de él, poniendo mis piernas a cada lado de su abdomen
-¿Ah si?- pone cara pícara y yo asiento.Empiezo a besar su cuello y siento como sus manos acarician mi espalda, buscando el final de mi camiseta del pijama, para después, deshacerse de ella.
Bajo mi mano por su abdomen, llegando a su entrepierna, y le doy un ligero apretón.
Después miro su cara y puedo ver que está disfrutando.
Volvemos a besarnos con la misma pasión de siempre y cuando está buscando el broche de mi sujetador suena el timbre.
-No abras- murmura encima de mis labios
-¿Y si es importante?- me retiro de encima de él
-¿Importante un domingo a las once de la mañana? ¿Tu crees?- me mira con sorna y yo suelto una carcajada negando con la cabeza.Cojo mi camiseta y me la pongo lo más rápido que puedo.
Me dirijo a la puerta, abro y me sorprendo al ver a Gaby.
-Hola Gaby, no te esperábamos tan pronto- besamos ambas de nuestras mejillas
-Buenos días- sonríe achinando sus ojos marrones.Aparece Jesús en el salón y se sorprende al ver a su hija.
-Pues si que era importante- murmura
-Felicidades papá- sonríe su hija y le abraza, provocando que él sonría también
-Gracias rubia- besa su coronilla
-¿Interrumpía algo?- nos mira a ambos
-Para nada- miento, forzando una sonrisa
-Mejor- se sienta en el sofá -por cierto, Martina, llevas la camiseta del revés- me da una mirada pícara y yo río.Esta chica no tiene un pelo de tonta, definitivamente.
******
Gaby se acaba de marchar después de haber pasado toda la tarde con nosotros por ser el cumpleaños de su padre.
Y hasta Agosto no vendrá con nosotros porque le toca continuar los seis meses de la custodia con Lara.
Cierro la puerta y después me percato de como me mira Jesús desde la barra americana de la cocina.
-¿Ves algo que te guste?- cuestiono con sorna y el ríe
-Ahora mismo veo algo que me encanta- se acerca a mi y me besa.Nos vamos besando hasta llegar a la habitación.
-Tenemos que continuar mi regalo de esta mañana, cariño-
******
-¿Qué te ha dicho el ginecólogo?- cuestiono a Alaska, para después dar un sorbo a mi café
-Que tengo un embarazo bastante saludable y que me cuide, poco mas- hace un gesto con la mano y la pelirroja y yo asentimos
-¿Y ya habéis pensado en nombres?- pregunta la de los ojos azules y la morena niega con la cabeza
-La verdad es que no hemos hablado mucho de eso- contesta franca
-Hagamos una lista- propone Renata sonriendo y nosotras asentimos, no es tan mala idea.Martina: Elia
DavidRenata: Lorena
EnzoEsas son nuestras ideas para la futura criatura de nuestra mejor amiga.
-A ver, David ya se llama mi hermano, y aunque lo quiero mucho no le voy a poner ese nombre- se encoge de hombros y yo asiento -Elia me gusta, y Enzo le gustará a Marco, eso está claro- reímos
-Nombres italianos, nunca fallan- sonríe la pelirroja con autosuficiencia.Continuamos hablando durante un buen rato hasta que nos vamos de nuevo a nuestra última clase del día en la Universidad.
******
Besa mis labios y después me abraza.
-¿Sabes que te quiero mucho?- pregunta Jesús con una sonrisa
-¿Ah si?- sonrío y entrelazo mis piernas en su cintura, mientras ambos estamos sentados en el sofá
-Si. Demasiado- deja un beso en mi cuello, arrancándome un gemido
-Pues yo también te quiero mucho, ¿sabes?- ambos reímos por la coña que estábamos llevando.Nos volvemos a besar y enreda su mano en mi pelo.
-He tenido que ser muy bueno en otra vida para tener ahora un pivón como tú- me sonrojo notablemente
-Estás muy zalamero- río y coloco mi mano sobre su mejilla
-Es que cada día me enamoro más de ti, Martina- se me aguan los ojos.Pega mi cabeza a su pecho y acaricia mi cabeza.
-Vamos a la cama- le miro a los ojos directamente
-¿A dormir?- me mira pícaramente
-Si, sobretodo a eso, a dormir- ironizo.Nos levantamos del sofá y nos dirigimos a nuestro dormitorio a no dormir.
******
Me levanto con una pereza bastante grande y veo que mi pareja ya se había levantado.
-Dime que hoy no te han puesto turno- comento con una mínima esperanza de que me de la razón
-Si que tengo turno cariño- besa mi frente
-Tengo la solución para eso- sonrío y me mira confundido.Cojo mi teléfono móvil y marco a mi padre.
Al segundo tono, descuelga el móvil.
-Hola papi-
-Hola, princesa, ¿pasa algo? Tu no sueles llamar tan temprano-
-A ver, Jesús se ha levantado un poco descompuesto-Me sabe mal mentir a mi padre, pero también quiero momentos con mi novio, últimamente no tenemos intimidad casi.
Ayer por la noche del cansancio que teníamos los dos, no llegamos a hacer nada, nos quedamos dormidos.
-Ah bueno, no hay problema, hoy si que le puede cubrir alguien, dile de mi parte que se mejore-
-Vale papá, gracias por entenderlo- sonrío aunque no me vea
-Nada princesa, ya hablamos. Adeu-
-Adeu-Y cuelgo.
-Tenemos todo el día para nosotros, Jesús-
-¿Qué has hecho?- cuestiona mirándome entre confuso y divertido
-A los ojos de mi padre estás malo-
-¿Y a los tuyos?-
-A los míos eres un Mihura-Ambos sonreímos y se acerca a mi y me besa.
Me tumba delicadamente de nuevo en el colchón y reparte besos por todo lo rostro con suma suavidad.
Con cada beso me causa un delirio.
Y entonces puedo confirmar que le quiero.
Que estoy enamorada de él.
![](https://img.wattpad.com/cover/82471975-288-k956889.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Dieciocho años no son nada
RomanceMartina, una joven a punto de cumplir dieciocho años. Jesús, un adulto de treinta y seis. Él está casado, y tiene una hija. Ella aún vive con sus padres y todavía se cuenta los sueños e ilusiones con sus mejores amigos. Él trabaja y ella estudia. É...